Donald Trump sin inmunidad penal
Fallo acepta pedido del fiscal de Nueva York; el Congreso deberá esperar
▃ La Corte Suprema infligió ayer jueves un revés al presidente Donald Trump, al rechazar su reclamo de inmunidad en una investigación penal y dictaminar que sus declaraciones de impuestos deben ser entregadas a un fiscal de Nueva York. Pero, en otra decisión, la Corte bloqueó temporalmente la aspiración de la oposición demócrata de acceder a los documentos financieros del mandatario. Los fallos dispararon una serie de tuits furiosos de Trump. Seguramente, el titular de la Casa Blanca no tenga que dar a conocer públicamente sus finanzas hasta después de las elecciones del 3 de noviembre.
Un nuevo problema se le presentó al presidente Donald Trump en medio de la expansión del coronavirus, una economía devastada por la pandemia y a tres meses y medio de las elecciones, en la que se jugará la reelección ante el demócrata Joe Biden. Pero difícilmente este nuevo problema tenga consecuencias para Trump antes de las elecciones del próximo 3 de noviembre, más allá de la polémica que pueda desatar en la campaña.
¿De qué se trata? La Corte Suprema de Estados Unidos obligó ayer jueves al presidente Trump a entregar sus declaraciones de impuestos a un fiscal que lo investiga en Nueva York.
¿Y por qué no tendría consecuencias para Trump? Porque es muy improbable que esos registros lleguen a manos de la Justicia antes de las elecciones de noviembre.
Así, la mayoría conservadora de la Corte Suprema concedió una victoria agridulce a los fiscales y congresista de la oposición demócrata que desde hace más de cuatro años exigen que Trump publique sus declaraciones de impuestos.
A diferencia de otros presidentes de Estados Unidos, Trump se ha negado a entregar sus declaraciones de impuestos y otros documentos que podrían ofrecer detalles sobre su patrimonio y las actividades de su conglomerado inmobiliario, Trump Organization.
ENCIMA DE LA LEY, NADIE. La Corte examinó el tema en dos casos, uno relacionado con el reclamo de las autoridades de Nueva York y otro vinculado a la investigación abierta por la oposición demócrata en la Cámara de Representantes, destinado a identificar posibles conflictos de interés del presidente.
Aunque dio la razón a la Fiscalía de Manhattan en el primer caso, la Corte devolvió el segundo litigio a tribunales inferiores, lo que retrasa por ahora la posible entrega a la Cámara de Representantes de los registros financieros de Trump que reclaman los demócratas.
Trump, que podría contentarse con que nada saldrá a luz antes de las elecciones, reaccionó con furia ante el fallo de la Corte, porque en los hechos destroza la tesis de su defensa de que tiene inmunidad como presidente de Estados Unidos.
“Hace 200 años, un gran jurista de nuestra corte estableció que ningún ciudadano, ni siquiera el presidente, está categóricamente por encima del deber común de presentar pruebas cuando se le solicita en un proceso penal”, dictaminó el tribunal en el caso de Nueva York, resuelto por 7 votos a favor y 2 en contra.
“Hoy reafirmamos ese principio, y mantenemos que el presidente no es absolutamente inmune ante las citaciones penales de estados que busquen sus documentos privados”, agregó la Corte.
La decisión, escrita por el presidente de la Corte, el conservador John Roberts, la suscribieron incluso los dos jueces nominados por Trump: Neil Gorsuch y Brett Kavanaugh.
“NO ES JUSTO”. Trump reaccionó con furia, al tachar de “enjuiciamiento político” los casos relacionados con sus impuestos, y lamentar que después de superar la investigación sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016, tenga ahora “que seguir luchando en una Nueva York políticamente corrupta”.
“Las cortes han concedido en el pasado ‘una amplia deferencia (a los presidentes)’. ¡PERO NO A MÍ!”, tuiteó.
El mandatario se quejó además de que le ocurra esto cuando la Administración de Barack Obama fue “totalmente corrupta” y “espió” a su campaña —acusación sobre la que nunca ha presentado pruebas— y “no les ha pasado nada”.
“Y ahora el Tribunal Supremo da un dictamen que retrasa (la posible entrega de documentos al Congreso), algo que nunca habrían hecho con otro presidente. Esto se trata de CONDUCTA PROCESAL INCORRECTA”, sentenció Trump, para después añadir que es otra “caza de brujas” en su contra.
“Gané la Caza de Brujas de Mueller, y otras, y ahora tengo que seguir luchando en una Nueva York políticamente corrupta. ¡No es justo!”, insistió en alusión a la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la trama rusa.
Su tono no pudo contrastar más con el de su abogado, Jay Sekulow, cuyo comunicado tras el fallo dejó claro que, en la práctica, el dictamen no desatará ningún paso inmediato que pueda perjudicar las opciones de reelección de Trump en noviembre.
Por su lado, el fiscal de Manhattan, Cyrus Vance Jr., celebró la decisión del Supremo como “una tremenda victoria” para el sistema judicial por esdad tablecer que “nadie, ni siquiera el presidente, está por encima de la ley”, y adelantó que retomará la investigación inmediatamente.
“VICTORIA PARA TRUMP”. Cyrus Vance Jr es un fiscal demócrata que busca obtener ocho años de registros financieros del presidente en relación con un supuesto pago de “dinero secreto” hecho a la actriz porno Stormy Daniels y a la exmodelo de Playboy Karen Mcdougal.
Pero como esas pesquisas están en manos de un gran jurado, y las reglas de extremo secreto de ese tipo de investigaciones, sumadas a los tecnicismos que aún deben resolverse y apelarse en un tribunal inferior, hacen muy improbable que las declaraciones de Trump salgan a la luz en un futuro cercano.
“Esto es una victoria para el presidente”, dijo Stephen Vladeck, profesor de Derecho Constitucional en la Universide Texas, en su cuenta de Twitter. “Sí, los fallos son una victoria para la legalidad y la idea de que los presidentes no están por encima de ella. Y es probable que en algún momento, se tengan que entregar (los registros). Pero si Trump está escondiendo algo inculpatorio, retrasar su divulgación más allá de noviembre es una victoria para él”, agregó Vladeck.
Norman Eisen, que fue uno de los fiscales del juicio político en el Senado contra Trump, coincidió en que el Congreso “ciertamente no conseguirá (los registros financieros) antes del 3 de noviembre”, cuando el presidente podría ganar un segundo y último mandato.
Y en el caso de Nueva York, “Trump podría enfrentar cargos, pero también podría haber abandonado ya el poder para cuando eso ocurra”, resumió Eisen en un artículo publicado junto a la abogada Victoria Bassetti en el portal Just Security.
Pero los demócratas no se quedarán quietos, y menos a tan poco de las elecciones.
Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes y líder demócrata en el Congreso, dijo que continuará presionando para que los registros financieros de Trump se entreguen a los legisladores.
“El Congreso continuará haciendo supervisión para el pueblo, manteniendo la separación de poderes, que es lo genial de nuestra Constitución”, aseguró Pelosi.
“Continuaremos presionando nuestro caso en los tribunales inferiores”, remató.
Lo cierto es que el fallo de la Corte habitando al fiscal de Nueva York a acceder a las declaraciones patrimoniales de Trump, llega en momentos en que el número de casos de coronavirus toca un récord diario en Estados Unidos, y que nuevos datos gubernamentales muestran que 1,3 millones más de personas solicitaron beneficios por desempleo, poniendo de manifiesto el devastador impacto de la pandemia en la economía.
Ni siquiera el presidente es inmune a las citaciones penales”.
Corte Suprema de EE.UU. Lucho contra una Nueva York políticamente corrupta”.
Presidente Donald Trump.