EXIGEN CRÉDITOS BLANDOS
créditos la situación será caótica”.
Desde el ministerio, Monzeglio confirma que el reclamo está siendo analizado en la OPP, mientras que Economía estudia la petición del sector de ser exonerado del aporte patronal al Banco de Previsión Social y de la suspensión del pago anticipado por el impuesto a la renta y al patrimonio a la Dirección General Impositiva, ambos por un período de hasta tres meses después de la apertura de fronteras.
Pero, pensando en un horizonte más cercano —o sea, en las vacaciones que se vienen—, el sector también demanda que se habiliten incentivos que prosperaron en temporadas pasadas para atraer a extranjeros. Específicamente, plantean la devolución del IVA y convenios con tarjetas de crédito que a su vez propongan descuentos. Hasta ahora, sin novedades.
Además están a estudio dos proyectos de ley, uno de reprogramación de vuelos internacionales y otro que pretende regular los alquileres para sofocar la informalidad. Y se espera el aval de más protocolos para reabrir servicios.
Unos días atrás el Ministerio de Turismo difundió las condiciones para hotelería y centros gastronómicos. Se decidió que las empresas registradas que reabran firmen una declaración jurada en la que se comprometen a cumplir con las exigencias y luego soliciten ante la dirección de turismo de cada intendencia un sello numerado de habilitación. Serán las comunas las encargadas de fiscalizar.
En la noche de este viernes, finalmente se habilitó la reapertura de las termas; “salió con fórceps”, bromeó Monzeglio
Intendencias de Salto y de Paysandú podrán retomar la actividad turística en los parques termales.
por la presión que había para lograr este protocolo.
El mismo indica que el aforo del parque termal no puede superar el 50% del que se tenía previamente al COVID-19 (unas 2.500 personas por día en temporada alta) y se deberán mantener seis metros de distancia por persona o grupo familiar en las piscinas cerradas y cuatro en las abiertas. En espacios comunes la separación prevista es de dos metros. El agua de las piscina deberá cambiarse hasta en un 50% con una hipercloración con cloro granulado que asegure la correcta desinfección y la calidad del agua.
Esta es una gran noticia para el sector. Sin embargo, todavía faltan los protocolos para los organizadores de congresos y eventos —lo cual alimenta la hotelería en invierno—, rentadoras de vehículos, inmobiliarias y agencias de viajes.
BIENVENIDA CON CLAROSCUROS. Días atrás, Camtur y Ministerio de Turismo convocaron a operadores dispuestos a reabrir para las vacaciones de invierno con el fin de sumarlos a una estrategia de publicidad dinámica en distintos medios de comunicación, aprovechando los créditos a favor disponibles por la suspensión de la Semana de Turismo.
“Hay unos 1.000 emprendimientos registrados y se apuntaron en el entorno del 20%”, plantea Martínez. Esa se estima que será la oferta, aunque otras tantas empresas todavía analizan qué hacer.
Es que el entusiasmo, en vez de ir por barrios, va por destinos. Rodríguez, de la Asociación de Hoteles y Restaurantes, cree que las propuestas preferidas serán las de turismo rural, enológico, religioso, aventura, circuitos gastronómicos y complejos hoteleros con entretenimiento en sus instalaciones.
Su intuición está bien calibrada. Marina Contrera, de la Sociedad Uruguaya de Turismo Rural y Natural, es de las pocas que ve el futuro con optimismo. Si bien el 70% de los clientes habituales son extranjeros, al menos el 50% de los establecimientos optaron por la reactivación motivados por la cantidad de consultas —de uruguayos mayoritariamente, pero también de extranjeros deseosos de venir. “No es la gran ola, pero lo bueno es que al final del túnel vemos una luz”, dice.
Nery Coitinho, propietaria de la casa de campo Los mimbres, opina que la sorpresa de la buena demanda está relacionada a la incorporación de un actor nuevo en el turismo interno: las agencias de viajes. Pera, de la asociación que las reagrupa, explica que en estos cuatro meses de pausa hubo capacitaciones y una de ella, muy concurrida, tuvo que ver con el turismo rural.
En el bando de los que tienen esperanzas también está Salto, cuyo núcleo fuerte de visitantes es local. La directora de Turismo, María Noel Rodríguez, estima que tendrán “un movimiento importante”. Confía porque había varias reservas de la Semana de Turismo que están siendo reagendadas, y porque se viene trabajando en la desestacionalización del turismo con un catálogo de alternativas al aire libre, más allá de las famosas aguas. “Lo vemos como un gran momento para agregarles valor a nuestros atractivos”, dice.
“La estrategia más fuerte es la apuesta al Corredor de los Pájaros Pintados”, dice en referencia a un paseo que conecta a distintas localidades que bordean el río Uruguay y en donde se practica, entre otras actividades, la pesca deportiva, que está habilitada. Además cree que la zona de la represa tendrá su atractivo, al igual que un emprendimiento de turismo aventura en Daymán. También se está preparando un circuito comercial y cultural en la ciudad, considerando que este fue el segundo aspecto valorado —luego de las termas— por los visitantes en una encuesta reciente.
En Rocha, trabajando codo a codo con las agencias de viajes, de acuerdo al perfil de los turistas, la mayoría de los “micro destinos” están planificando su reactivación. Eso sí: “De menos a más”, dice Delvair Amarilla, presidenta de la Corporación Rochense de Turismo. Se refiere a cierta cautela de no volver a tomar personal —hay 5.000 en seguro de paro— hasta no tener la certeza de que habrá reservas.
Si los establecimientos rurales están entusiasmados con su inesperado protagonismo, en las zonas de sol y playa avanzan con paños fríos. En La Paloma, por ejemplo, se estima que entre el 30% y el 50% retornará a la actividad. “Lo hacemos por responsabilidad, para no dejar al destino caer y que se convierta en un balneario fantasma”, dice Robert Caballero, de la Liga de Fomento y Turismo.
Pernigotti, de la Asociación Turística de Colonia, está en la misma sintonía. Este mojón del turismo que no cierra nunca viene debilitado por las últimas temporadas con menos llegada de argentinos, y la pérdida de la Semana de Turismo fue “un golpe mortal”. Su estabilidad —como la de Montevideo y Maldonado— dependen de la apertura de las fronteras. “Todavía no tenemos señales de reservas. Para nosotros el turismo interno representa el 10% de la afluencia, y el mejor escenario podría ser captar ese otro 10% correspondiente a ese uruguayo que por lo general sale del país a vacacionar”, dice.
Los 140 negocios gastronómicos y los 70 hoteles están levantando la persiana de a poco. “La mayoría de los que ya abrieron —el 10%— lo hicieron aclarándonos que lo hacen para minimizar las pérdidas, para cambiar el estado de ánimo. Porque los grandes hoteles de todas maneras tienen personal trabajando en el mantenimiento, pero nadie abre pensando que va a empatar: es a pérdida en la mayoría de los casos”, señala Martín De Freitas, presidente de la Cámara Hotelera.
En tanto, Montevideo viene repuntando desde fines de junio, aunque con una ocupación muy baja. Rodríguez, el de la Asociación de Hoteles y Restaurantes, adelanta que en estos días reabrirán entre tres y 10 hoteles. Uno es de la cadena Hilton. Desde la administración dicen: “Mes a mes vemos una lenta mejora del cliente local”. También confirma que comenzaron a reincorporar a parte del personal.
La reactivación de las fronteras punto a punto será clave para el sector. A esto apuestan las autoridades, que celebran los avances en la conectividad. “Los únicos números que puedo tener en la cabeza son los del crecimiento que esperamos tener de a poquito”, dice Monzeglio.
También tiene expectantes a los operadores de los destinos que todavía no sintieron esta crisis porque brillan en verano. Es el caso de Maldonado. El Centro de Hoteles estima que el 35% estará abierto en los próximos días, estimulados por el incremento de la población local e intuyendo que tal vez tengan visitas. Pero el verdadero objetivo está puesto en octubre: “Cuando termine la temporada europea y podamos ver cómo les fue a ellos, qué cosas podés hacer y cuáles no, qué errores hay que evitar”, explica Gastón Figún, de la Corporación Gastronómica.
Al menos tenemos ese consuelo: jugaremos con las cartas a la vista.