Millennials y centennials reaccionan a la pandemia
Un estudio muestra menos actitud pesimista en jóvenes
Si bien es muy temprano para conocer los impactos a largo plazo de la pandemia en cualquier grupo de edad, la Deloitte Global Millennial Survey 2020 reveló que “la determinación y resiliencia de las generaciones más jóvenes darán forma al mundo que emerge”. Esa es una de las principales conclusiones que arrojó un estudio global de Deloitte que explora las tendencias en comportamiento de las personas pertenecientes a las generaciones Z e Y.
En la primera parte del estudio, los investigadores de la consultora Deloitte encuestaron a más de 18 mil millennials y centennials de 43 países entre noviembre y enero. Sin embargo, con la aparición de la pandemia por COVID-19, el estudio tuvo una segunda parte que evaluó las respuestas de más de 9 mil personas de 13 países entre los meses de abril y mayo de 2020. Los millennials encuestados nacieron entre enero de 1983 y diciembre de 1993, mientras que los Generación Z entre enero de 1995 y diciembre 2003.
ANSIEDAD Y ESTRÉS. Los investigadores descubrieron que en la primera parte del estudio la ansiedad era la principal preocupación de los jóvenes. Un gran porcentaje de los adultos jóvenes (cerca del 50% de los centennials; 40% de los millennials) aseguraban sentirse estresados todo el tiempo. Sin embargo, con la llegada de la pandemia la vida se volvió más calma y los niveles de estrés bajaron significativamente.
Esto se explica por diversas razones. La primera parte de la encuesta se realizó a finales del 2019, en momentos especialmente estresantes, atravesados por las fiestas navideñas y el cierre del año. En cambio, en la segunda parte las preocupaciones de los jóvenes se centraban en su salud, el bienestar de sus familias, las perspectivas laborales y su futuro financiero a largo plazo. Muchos de los que tenían trabajos de oficina ahora trabajaban desde casa, pasaban más tiempo con su familia inmediata y menos desplazamientos en atascos. Y aunque su trabajo probablemente se vio afectado de alguna manera, la mayoría conservó su posición y gastó menos dinero. Esa vida más tranquila se reflejó en niveles de estrés bastante por debajo del período anterior.
El mismo informe establece que, de todos modos, hay temas que quitan el sueño tanto a los jóvenes de la generación Z como Y: el bienestar familiar, sus futuros financieros a más largo plazo y sus perspectivas de trabajo o carrera. Si bien estos temas los preocuparon tanto antes como durante la pandemia, ambos se mostraron preocupados por sus cuentas en la cotidiana y los más jóvenes están especialmente preocupados por los problemas de dinero a largo plazo.
Por otro lado, los encuestados “parecen más inclinados que las generaciones anteriores a considerar que el estrés es problemático y que la salud mental es importante”, indicaron los investigadores, por lo que aconsejaron a los empleadores tener en cuenta estos puntos para el futuro de sus empresas.
SOLIDARIDAD. La conciencia social es un tema que ha estado muy presente desde el comienzo de la pandemia en las distintas sociedades y eso se ve reflejado en el resultado de la investigación citada.
Cerca de tres de cada cuatro de los encuestados indicó que la situación actual los volvió más comprensivos sobre las necesidades de otros. Además, esa preocupación se tradujo en el deseo de tomar medidas para impactar de forma positiva en sus comunidades.
Dentro de las acciones que proyecta, seis de cada 10 jóvenes se proponen elegir productos pertenecientes a empresas que han trabajado para mitigar los problemas ocasionados por la pandemia. Mientras que el 75% señaló que hace un esfuerzo cotidiano para fomentar el comercio local, comprando a los emprendedores de sus localidades.