“NO QUIERO SEPARARME DEL PERSONAJE”

Entrevista exclusiva con el protagonista de la telenovela “Jesús” que se emite por Canal 10

Entrevista de El País a Dudú Azevedo, el protagonista de “Jesús”.

Al igual que otras telenovelas con temática religiosa, Jesús integra el ranking de lo más visto en nuestro país, un fenómeno que también conquistó espectadores en los países de la región cautivados con este versión brasilñea de la historia de Jesúsde Nazareth. Ese éxito se debe, en parte a los imponentes escenarios, vestuarios y una preciosa fotografía que están al servicio de una trama conocida, que se basa en las Sagradas Escrituras.

Para el actor carioca Dudú Azevedo, quien interpreta al protagonista en esa telenovela de Record TV —lunes a jueves a las 23.00 por Canal 10—, trabajar en esta producción fue “un trabajo increíble ya que alcanzó un nivel de realización por encima de lo que habíamos visto hasta el momento”, dijo a El País.

Azevedo no es nuevo en el fenómeno de las telenovelas bíblicas: estuvo en Moisés y los 10 mandamientos donde interpretó a uno de los villanos y en El Rico y Lázaro donde fue el desdichado protagonista que se enfrenta a su antiguo amigo por el amor de una joven. Ambas telenovelas fueron emitidas por Canal 10 y también solían entrar en el podio de lo más visto de cada día.

Para Azevedo —quien contestó un cuestionario de El País vía correo electrónico— interpretar a Jesús no fue un trabajo más. “Cuando fui seleccionado, me di cuenta de la magnitud y de la responsabilidad que tendría con este personaje”, dijo. “Al mismo tiempo, no tuve miedo y sentí que tenía una gran misión por delante a la que debería dedicarme. Tenía que sumergirme, tomarlo muy en serio y me siento muy bien con la forma en que interpreté el papel”.

— ¿Qué viste o leíste para convertirte en un personaje así?

—Busqué todo el conocimiento posible sobre su historia. Lo busqué de una manera muy sensible e introspectiva para encontrar al verdadero Jesús dentro de mí. El Jesús que ha sido parte de toda mi vida y quien me ayudó a crecer, quien me guió y me guía todos los días de mi vida, el Jesús en quien creo. En esa búsqueda encontré que estuvo todo el tiempo conmigo. Estoy seguro que él y su fuerza estuvieron durante todo este proceso, tanto en la preparación como en la realización de esta novela. Estoy seguro de que mi conexión, mi búsqueda y mi fe han hecho posible las cosas más verdaderas y más reales.

— ¿Hubo una escena muy complicada o difícil de realizar?

—Durante todo el trabajo estuve muy conmovido, tuve mucha entrega. En los días que tuve que registrar los milagros, lloré mucho. Sentí todo mi ser vibrar y se me puso la piel de gallina. Entonces miré a mi alrededor y vi la importancia del trabajo que estábamos haciendo y todo me conmovió mucho. Fue una experiencia grandísima y es imposible no salir transformado después de un trabajo como este. Incluso hoy, tanto tiempo después, me sigo emocionando al ver las escenas.

—¿Pensaste que la telenovela sería un éxito?

—Estoy muy feliz de que nuestro trabajo sea reconocido en otros países y muy feliz de saber que el trabajo ha sido un gran éxito en Sudamérica. La gente me envía mensajes expresando cariño y admiración por mi trabajo. Para mí todo este proceso ha sido muy gratificante.

—¿Cómo fue rodar esta historia en Marruecos?

—Las grabaciones en el desierto, a menudo eran muy difíciles. Siempre estuve en situaciones adversas e incómodas, el calor fue una de ellas. Teníamos una sensación térmica de 53 grados, así que fue muy difícil, pero estaba muy concentrado y con buena salud, especialmente salud emocional. Así que logré superar todas las dificultades, incluido el calor.

—¿No temes que la gente te encasille con un personaje histórico o religioso?

—Este trabajo ciertamente me trajo muchos valores, enseñanzas y me convirtió en una mejor persona e inevitablemente llevo conmigo los restos de este trabajo todos los días de mi vida. No quiero separarme nunca de este personaje. Sin embargo estoy preparado para hacer cualquier trabajo que venga por delante, de cualquier género. Creo que esa es la clave de nuestra profesión, estar disponibles y preparados para todo tipo de transformaciones que se nos presenten.

—Leí que tuviste que dejar en Brasil a tu esposa embarazada para hacer esta telenovela, ¿cómo fueron esos meses alejado de tu familia?

—Cuando comencé a grabar en Marruecos, mi esposa estaba embarazada de siete meses. Pasamos casi un mes allí y fue muy difícil alejarme del lado de mi esposa en ese momento. Pero, afortunadamente, todo salió bien y poco después, nació Joaquim. Desde ahím todos los días estaba con el corazón en la mano, con ganas de estar más con mi hijo, pero entendí que todo estaba pasando por un propósito. También comprendí que sería recompensado y tendría tiempo de calidad con mi hijo después de completar esta misión. Todo lo que pasó fue maravilloso. Crecí mucho y aprendí mucho y hoy puedo disfrutar del tiempo que tengo con

mi hijo.

“Las grabaciones en el desierto, a menudo eran muy difíciles”, dice Azevedo.