Las ventas de 0 km muestran signos de reactivación
En septiembre caen menos que el desplome previo
▃▃EL mercado automotor volvió a mostrar signos de recuperación. En septiembre, al igual que en agosto, se atenuó la caída en el nivel de ventas de vehículos 0 kilómetro al compararlos con iguales meses del año pasado.
En septiembre hubo una disminución de 5% interanual, según datos divulgados ayer por la Asociación del Comercio Automotor (ACAU).
El sector sufrió una fuerte caída de ventas en los primeros meses de la pandemia. En marzo el descenso fue de 24,56% (2.464 frente a 3.266), en abril de 57,3% (1.308 frente a 3.063), en mayo de 53,14% (1.632 frente a 3.483), en junio de 26,57% (2.495 frente a 3.398) y en julio 15,96% (3.106 frente a 3.696). Luego, en agosto fue de 3,8% (3.398 frente a 3.534).
En el acumulado eneroseptiembre se comercializaron en total 23.792 vehículos 0 kilómetro, una caída de 21,7% respecto a igual período del año pasado (6.556 unidades menos).
No todas las categorías de vehículos se comportaron igual. La comercialización de autos 0 kilómetro bajó 12,54% internanual en septiembre. En este mes de 2020 se vendieron 1.652 y en igual mes del año pasado 1.889.
En los vehículos deportivos (SUV) hubo un caída interanual en septiembre de 12,98% (696 frente a 616).
También se dio una disminución en los minibuses. Se vendieron ocho cuando en septiembre del año pasado fueron 10.
En cuanto a los utilitarios, el descenso en el mes frente a septiembre de 2019 fue de 6% (863 frente a 919).
Sin embargo, hubo dos categorías que tuvieron un aumento de ventas en septiembre. Estas fueron camiones que creció 20,33% (142 frente a 118) y ómnibus que subió 84% (35 frente a 19).
A comienzos de septiembre, Alberto Bernheim, director de Werner Bernheim, concesionario de Volkswagen, y secretario de la Asociación de Concesionarios de Marcas de Automotores (Ascoma), explicó a El País que el COVID-19 “profundizó la caída” que ya tenía el rubro previamente y que eso afectó las ventas desde marzo hasta junio inclusive.
De hecho, la predisposición a la compra de bienes durables (medida en el Índice de Confianza del Consumidor que elabora la Cátedra SURA de Confianza Económica de la Universidad Católica con la consultora Equipos) se desplomó en marzo y cayó 24 puntos, al pasar de 30,9 puntos a 6,9.
No obstante, a partir del sexto mes del año las ventas comenzaron a reactivarse lentamente y en julio y agosto “se consolidó un nuevo ritmo” en el nivel de actividad.
“Es muy dispar lo que está pasando, hay algunas marcas que vienen con un ritmo interesante y otras no. La alegría va por barrios”, señaló.
El secretario de Ascoma dijo que uno de los efectos que tuvo la pandemia en el sector automotor fue que algunas empresas, ante el temor de quedarse con mucho stock, frenaron los pedidos que tenían con las fábricas pero en cuanto la demanda se empezó a acelerar se quedaron sin stock.