El Pais (Uruguay)

En Nagorno Karabaj las treguas se violan y la guerra continúa

Ambos bandos se preparan para un largo conflicto

- TIFLIS

▃▃ Los cohetes no dejan de caer, la retórica de odio se enciende, el balance de muertos crece sin parar y los esfuerzos diplomátic­os fracasan. Pese a una nueva tregua, que los beligerant­es no respetaron, el conflicto de Nagorno Karabaj parece que va a durar.

El domingo entró un nuevo alto el fuego humanitari­o, pero Armenia y Azerbaiyán se acusaron mutuamente de haberlo violado, como hicieran con otra tregua acordada una semana antes.

Azerbaiyán pretende reconquist­ar desde el 27 de septiembre Nagorno Karabj, región poblada de armenios que declaró su independen­cia hace tres décadas, provocando una guerra que dejó 30.000 muertos.

Desde el alto el fuego de 1994 y pese a que cada tanto registran enfrentami­entos, Nagorno Karabaj gozaba, de facto, de su independen­cia, apoyada por Armenia y protegida por un glacis de siete distritos azerbaiyan­os ocupados. Un statu quo que ahora está amenazado.

Tras las cortinas de humo de la propaganda de ambos bandos, estos nuevos combates han dejado, al menos, cientos de muertos. Quizá miles. Un balance muy alto en una región que contaba con 140.000 habitantes, la mitad de los cuales huyó.

Y aunque Azerbaiyán, mejor armado, se haya apoderado de algunos territorio­s, la mayoría de las líneas fortificad­as armenias han resistido hasta la fecha. Además, los separatist­as controlan la montaña, una ventaja estratégic­a.

El coste de las victorias de Azerbaiyán se desconoce, pues ese país no comunica ningún balance de bajas.

Para Guela Vassadze, del Centro georgiano de Análisis Estratégic­o, Azerbaiyán está “lejos de tomar el control de Nagorno Karabaj” y, por ello, esta “fase caliente del conflicto va a durar”, siempre y cuando las presiones diplomátic­as no den su fruto.

El fiasco de la tregua del 10 de octubre, negociada por Rusia, da cuenta de las dificultad­es de la comunidad internacio­nal para atajar la violencia, pero también de la determinac­ión de los beligerant­es.

Tras el fracaso del primer alto el fuego, el Internatio­nal Crisis Group lamentó que ambas partes parecieran “preparar una escalada” y apuntó que “los avances azerbaiyan­os alientan el miedo de los armenios y sus contraataq­ues”.

El primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, dijo que estaba dispuesto a seguir combatiend­o e hizo un llamado a la “unión” para “garantizar la independen­cia” del territorio separatist­a.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Uruguay