Reino Unido y la UE inician una nueva relación, ahora divorciados
Boris Johnson concretó el Brexit luego de cuatro años del referéndum
Con el Nuevo Año, entró a regir el acuerdo entre el Reino Unido y la Unión Europea, por el cual los británicos ya no pertenecen al bloque comunitario. El Reino Unido está, desde ahora, fuera del mercado único y la unión aduanera al terminar el periodo de transición iniciado el 31 de enero de 2020.
Así, cuatro años y medio después de que los británicos votasen en un referéndum a favor del Brexit, el Reino Unido inicia a una nueva era al estar sujeto a sus propias leyes, bajo jurisdicción de sus tribunales, con control de sus aguas y la libertad de negociar acuerdos comerciales con países fuera del bloque comunitario.
La separación ha sido recibida con pesar en Escocia, donde su ministra principal, Nicola Sturgeon, instó a la UE, en un tuit, a “mantener una luz encendida” porque Escocia “volverá pronto”. ( Ver nota aparte).
El divorcio de la UE no es una sorpresa. El Reino Unido se mostró siempre reticente a una mayor integración europea, sobre todo política y monetaria, hasta el punto de que consiguió mantener su libra esterlina y quedar fuera de la divisa comunitaria, el euro.
Entre los cambios prácticos que traerá el Brexit está el fin de la libre circulación de personas entre las dos orillas del Canal de la Mancha. A partir de ahora, los ciudadanos de los 27 socios de la UE necesitan visados para ir a trabajar y estudiar en el Reino Unido, aunque quienes residían en el país antes de la separación conservarán mayoritariamente sus derechos. También volverán a realizar controles aduaneros.
Otro cambio histórico fue anunciado el jueves por la ministra española de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya: un acuerdo in extremis para dejar abierta la frontera entre España y Gibraltar, pequeño territorio británico ubicado en el extremo sur de la península ibérica que se integrará en el espacio europeo Schengen para, a diferencia del resto del Reino Unido, mantener la libertad de movimiento de personas.
PADRE FRANCÉS. El primer ministro Boris Johnson volvió a prometer a sus compatriotas una nueva era repleta de éxitos y un lugar más fuerte en el mundo para su país como campeón del libre comercio. Con la presidencia británica del G7 y la organización de la gran conferencia climática COP26, 2021 será “un año muy importante” para la influencia del Reino Unido, tuiteó.
Esto pese a que su padre, Stanley Johnson, está en proceso de solicitar un pasaporte francés para mantener sus vínculos con la UE tras el Brexit.
Johnson padre, un exmiembro del Parlamento Europeo que votó por la permanencia en la UE en el referéndum de 2016, dijo a la radio RTL que quiere convertirse en ciudadano francés debido a los fuertes vínculos familiares con Francia.
“Si lo entiendo bien, soy francés. Mi madre nació en Francia, su madre era totalmente francesa, al igual que su abuelo. Entonces para mí se trata de recuperar lo que ya tengo. Y eso me hace muy feliz”, dijo Johnson padre, de 80 años.
“Siempre seré un europeo, eso es seguro. No se le puede decir al pueblo británico: no son europeos. Es importante tener un vínculo con la Unión Europea”, agregó.
TAMPONES. Una de las primeras medidas que adoptó el gobierno británico tras su divorcio de la UE, fue suprimir el IVA a los tampones y compresas menstruales.
La salida de la UE implica que el Reino Unido ya no tiene que aplicar la reglamentación europea que obliga a imponer un IVA mínimo de 5% a los productos de higiene.
Felicia Willow, directora general de la Fawcett Society, asociación de defensa de los derechos de la mujer, saludó la medida. “Ha sido un largo camino para llegar hasta aquí, pero el impuesto basado en el género que vio los productos de higiene clasificados como artículos de lujo, no esenciales, puede finalmente ser relegado a los libros de historia”, afirmó.
El ministerio de Finanzas estimó que la eliminación del IVA en las protecciones menstruales le ahorraría a una mujer unas 40 libras (55 dólares, 45 euros) a lo largo de su vida.
El padre de Johnson inició los trámites para convertirse en ciudadano francés.