Niegan la extradición a Assange
Una jueza británica negó entregarlo a EE.UU. porque podría suicidarse
▃▃ La justicia británica rechazó ayer lunes extraditar al fundador de Wikileaks, Julian Assange, a Estados Unidos, que lo reclama para juzgarlo por espionaje por la publicación de cientos de miles de documentos secretos. “La salud mental del señor Assange se deterioraría motivándolo a cometer suicidio”, escribió la jueza Vanessa Baraitser de la corte penal de Londres. EE.UU. tiene 14 días para recurrir la decisión. La defensa de Assange pedirá su libertad bajo fianza.
Ni el frío ni la pandemia lograron ayer lunes apagar la explosión de júbilo que estalló fuera del tribunal penal londinense de Old Bailey tras anunciarse el fallo que rechazó la extradición a Estados Unidos del australiano Julian Assange.
Decenas de personas aguardaban en la calle desde bien temprano para conocer el dictamen de la jueza Vanessa Baraitser, que rechazó la entrega del fundador de la plataforma Wikileaks, acusado por Estados Unidos de presuntos delitos de espionaje, al juzgar que presenta riesgo de suicidio.
La Justicia estadounidense recurrirá. “Estamos extremadamente decepcionados” y “continuaremos buscando la extradición del señor Assange”, afirmó el Departamento de Justicia en Washington.
En última instancia, el caso podría llegar hasta la Corte Suprema británica.
Stella Moris, abogada y madre de dos de los hijos de Assange nacidos cuando estaba refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, se mostró esperanzada de que el australiano, de 49 años, vuelva “pronto” a casa.
Moris criticó a quienes quieren enviar a Assange “al agujero más profundo y oscuro del sistema penitenciario estadounidense” —algo que confía en que no pasará porque “no se puede aceptar que el periodismo es un crimen”—, y pidió al presidente saliente, Donald Trump, “acabar ya con esto”.
En la misma línea se pronunció Rebecca Vincent, directora de Reporteros Sin Fronteras (RSF), que, al igual que Amnistía Internacional, lamentó que la decisión de la jueza se haya sustentado “únicamente” en los problemas de salud de Assange, en detrimento de otros argumentos legales.
Por su parte, el redactor jefe de Wikileaks, Kristinn Hrafnsson, llamó a no bajar la guardia. “Es un día de victoria para Julian Assange, pero debemos ser cautelosos, no es necesariamente una victoria para el periodismo”, afirmó.
En el banquillo de los acusados, Assange, con traje oscuro y mascarilla, cerró los ojos al escuchar el fallo, mientras que su pareja rompió a llorar.
La jueza decidirá mañana miércoles si le otorga la libertad condicional o lo mantiene provisionalmente en la cárcel londinense de Belmarsh mientras se resuelve el recurso de la Justicia estadounidense.
“Considero que el estado mental del señor Assange es tal que sería opresivo extraditarlo a Estados Unidos”, afirmó la jueza. “La salud mental del señor Assange se deterioraría motivándolo a cometer suicidio llevado por la ‘determinación obsesiva’ de su trastorno de espectro autista”, agregó. La jueza señaló que Assange llama regularmente desde la cárcel a la asociación benéfica Samaritans.
Assange lleva 20 meses recluido en la cárcel londinense de Belmarsh desde su detención en abril de 2019 en la embajada de Ecuador, donde vivió refugiado siete años.
Assange y Wikileaks se hicieron famosos en 2010 a raíz de la publicación de unos 700.000 documentos militares y diplomáticos confidenciales que pusieron a Estados Unidos en más de un aprieto. Entre ellos figuraba un video en que se veía cómo helicópteros de combate estadounidenses disparaban contra civiles en Irak en 2007, matando a una docena de personas en Bagdad, incluidos dos periodistas de la agencia de noticias Reuters.
Estados Unidos acusa a Assange de haber puesto en peligro la vida de sus informantes con la publicación de esos documentos secretos sobre las acciones militares en Irak y Afganistán, que revelaron actos de tortura, muertes de civiles y otros abusos.
La defensa del australiano, coordinada a nivel internacional por el ex juez español Baltasar Garzón, denunció en el pasado que Trump quería aplicar a Assange un castigo “ejemplar” en su “guerra contra los periodistas de investigación”. Está ahora por ver cuál será la actitud del presidente electo, el demócrata Joe Biden.
EE.UU. dijo sentirse “decepcionado” y apelará el fallo de la Justicia británica.