Reino Unido comenzó a vacunar con Oxford y vuelve a encerrarse
Es la segunda vacuna aprobada en el país; el confinamiento irá al menos hasta febrero
El avance del coronavirus no deja muchas opciones. Varios países están restringiendo actividades y apurando las campañas de vacunación. En estas horas, el caso más extremo es el del Reino Unido, donde Inglaterra y Escocia anunciaron confinamientos totales a partir de esta semana ante la nueva ola de contagios.
En el Reino Unido esta medida se toma el mismo día en que comenzó a aplicarse la vacuna de Astrazeneca y la Universidad de Oxford, la segunda habilitada en el país luego de la de Pfizer y Biontech.
La nueva campaña de vacunación se lanzó con 530.000 dosis de la de Astrazeneca. El Reino Unido ya ha inoculado a un millón de personas con la vacuna de Pfizer/biontech.
Los expertos consideran que la vacuna de Astrazenec/oxford marcará un hito en las vacunaciones porque no requiere temperaturas tan frías para su almacenamiento como las de Pfizer/biontech y Moderna.
Eso podría significar un mayor acceso a la vacuna en las regiones más pobres del mundo.
En el resto de Europa, los países de la UE comenzaron a inmunizar contra el COVID-19 el 27 de diciembre con la vacuna de Pfizer/biontech, pero el avance ha sido mucho más lento que en Estados Unidos, el Reino Unido o Israel.
De todos modos, la cifra de 4,2 millones de personas vacunadas hasta ahora en Estados Unidos está muy por debajo de las predicciones oficiales de 20 millones para el Año Nuevo.
Las críticas son particularmente virulentas en Francia, donde hasta el 1 de enero apenas 516 personas habían recibido la primera dosis, en comparación con más de 200.000 en Alemania y más de 85.000 en Italia, en el mismo periodo.
India, con el segundo mayor número de casos registrado en el mundo de coronavirus, aprobó el domingo el uso de emergencia de dos vacunas, allanando el camino para una de las campañas de vacunación más importantes del planeta.
El gigante del sur de Asia se fijó el ambicioso objetivo de vacunar a 300 millones de sus 1.300 millones de habitantes para mediados de 2021, y dio luz verde a la vacuna Astrazeneca, así como a una desarrollada por la empresa farmacéutica local Bharat Biotech.
CONFINAMIENTOS. En paralelo a la nueva campaña de vacunación con Astrazeneca, primer ministro británico, Boris Johnson, anunció ayer lunes un confinamiento nacional en Inglaterra, que incluye el cierre de los colegios, debido a la alarmante expansión de la variante del coronavirus.
“Los hospitales están bajo más presión que en ningún momento desde el comienzo de la pandemia”, dijo Johnson en un discurso a la nación, en el que instó a todos los ciudadanos a no salir de sus hogares salvo por algún motivo esencial.
“Por lo tanto, debemos entrar en un confinamiento nacional, que es lo suficientemente duro para contener esta variante. Eso significa que el gobierno está ordenando una vez más que se queden en casa”, afirmó Johnson.
El primer ministro dijo que las medidas incluirían el cierre de escuelas a partir de hoy martes y reglas que requieren que la mayoría de la gente se quede en casa salvo para compras esenciales, el ejercicio y otras excepciones limitadas.
Johnson confía en levantar gradualmente el confinamiento y reabrir los colegios tras las vacaciones escolares de mitad de febrero “si no cambia nuestro conocimiento del virus, si la vacunación sigue siendo exitosa, si las muertes empiezan a bajar y si todo el mundo juega su papel cumpliendo las reglas”.
También para mediados de febrero espera que se haya administrado la primera dosis de la vacuna a los cuatro grupos prioritarios: trabajadores de residencias y sus internos, mayores de 80 años, trabajadores de la salud pública y paciente con enfermedades preexistentes.
Johnson remarcó que la nueva variante del virus —entre un 50 y un 70% más contagiosa— se está propagando “de manera frustrante y alarmante”. Para ilustrar la situación, reveló que el número de hospitalizados actualmente por COVID-19 es “un 40% más alto que en el pico de la primera ola” en abril.
Johnson destacó como “gran diferencia” entre este nuevo confinamiento y el anterior el hecho de que el país se encuentra ahora sumido “en la mayor campaña de vacunación de la historia” del Reino Unido.
También en Escocia, la primera ministra, Nicola Sturgeon, anunció su decisión de que durante todo el mes de enero rija un “requisito legal de permanecer en casa, excepto para fines esenciales (...) similar al confinamiento del pasado marzo”.
En otros países europeos también se están tomando medidas drásticas. Es el caso de Italia, cuyo Gobierno estudia mantener las restricciones impuestas para el periodo navideño hasta el 15 de enero, sin excluir el confinamiento casi total en todo el territorio nacional el próximo fin de semana.
“Evaluamos la hipótesis de aplicar para el próximo fin de semana las medidas de zona roja para festivos y vísperas de festivos”, dijo el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, en referencia al confinamiento y prohibición de desplazamientos excepto en casos de necesidad que rigió en las principales fechas del periodo festivo.
Los expertos dicen que la vacuna de Astrazeneca/oxford marcará un hito.
La nueva ola del coronavirus también avanza en España, sumando contagios luego de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, y con retrasos en el programa de vacunación debido fundamentalmente a problemas logísticos y de almacenamiento de la vacuna.
La vacunación en España, que comenzó hace una semana en las residencias de ancianos, no está siguiendo, de momento, el ritmo previsto, lo que ha provocado la queja de algunas comunidades autónomas.
Madrid ha utilizado sólo un 6% de las vacunas recibidas hasta ahora, poco más de 3.000.
En Cataluña, los expertos sanitarios urgen al Ejecutivo autonómico a acelerar la campaña de vacunación, ya que en esa región hasta el domingo sólo se habían puesto unas 7.700 dosis de las 60.000 que recibieron de Pfizer/biontech.
En los próximos días el proceso de inmunización en España contará también con la vacuna de Moderna.