Una década sin esos ojos color violeta que conquistaron el mundo

Las muchas caras de una actriz que tuvo dos premios Oscar, ocho matrimonios y más de 50 películas.

Nació en Londres, aunque construyó en Hollywood una carrera gracias a una singular belleza de ojos color violeta y un carácter para los papeles fuertes que le valieron la admiración del mundo entero. Fue Elizabeth Taylor, un icono del cine aunque su vida profesional estuvo marcada por su tempestiva vida privada, sus excesos y un aire de diva que solo la fama y muchos años en la industria pueden dar.

A10 años de su muerte recopilamos 10 datos de su vida.

NIÑA ESTRELLA. Con 10 años, el nombre de Elizabeth Taylor llegó al cine gracias a un contrato por siete años con Universal Pictures. Trabajó sin cesar en 18 películas, entre ellas Mujercitas (fue la malcriada Amy), Juego de juventud y en películas de la perra Lassie. A medida que fue creciendo, también lo hicieron sus roles. El padre de la novia, Gigante junto a James Dean y Un gato sobre el tejado caliente, consagraron a Taylor como una estrella.

OCHO MATRIMONIOS. Taylor no era una mujer sencilla, y eso quedó marcado en su vida marital. Su primer esposo fue el magnate hotelero Conrad Nicholas Hilton, luego vieron Michael Wilding, Mike Todd, Eddie Fisher (por el que se convirtió al judaísmo), Richard Burton con quien se casó dos veces, John W. Warner y Larry Fortensky.

DOS PREMIOS OSCAR. En la lista del American Film Institute con las 25 estrellas de los primeros 100 años del cine, salió séptima. Taylor recibió cinco nominaciones al Oscar y lo ganó dos veces: en 1961 por Una venus en Visón, y en 1967 por ¿Quién le teme a

Virginia Wolf?, tal vez el papel más importante de su carrera. Junto a Marlon Brando tiene el récord de cuatro nominaciones consecutivas .

RIVAL. Como muchas estrellas, Taylor tuvo una gran rivalidad en Hollywood, de esas que la pusieron en las tapas de revistas, y la rival era nada menos que Marilyn Monroe. Mientras Monroe se hizo conocida por sus papeles en comedias, Taylor se forjó una carrera gracias a papeles dramáticos y personajes atormentados.

CLEOPATRA. Taylor fue la primera actriz en firmar un contrato por un millón de dólares, que en 1963 era un montón de dinero por Cleopatra, una película maldita que casi lleva a la bancarrota a los estudios 20th Century Fox. Fue uno de los tantos de un rodaje carísimo y problemático y en el que Taylor comenzó un romance con Richard Burton, quien sería su quinto marido. Y que sería una de los grandes romances del siglo XX.

UNA GRAN AMISTAD. Taylor fue la primera en llamar a Michael, “el rey del pop” en los Soul Train Music Awards de 1989. Las dos estrellas siempre fueron muy unidas ya que ambos se veían reflejados como sufridos niños prodigio de la industria del entretenimiento. Para el cumpleaños 65 de su amiga, Jackson escribió “Elizabeth I Love You”.

Durante su matrimonio con el senador John Warner, Taylor comenzó una dependencia del alcohol y las drogas, que la termino llevando en 1983, un año después de su divorcio, a ingresar a la Clínica Betty Ford. Las estrellas no hablaban sobre sus problemas de adicciones, por lo que en eso también fue una pionera.

ACTIVISTA. Su matrimonio con el demócrata Warner también la acercó al activismo. Desde inicios de 1980 habló ante el Congreso de Estados Unidos pidiendo ayuda contra el SIDA y fundó una organización para recaudar fondos para los pacientes de la enfermedad. Uno de los motivos de su involucramiento fue su amistad con el actor Rock Hudson, una de las primeras víctimas del Sida.

TELEVISIÓN. Cuando ninguna estrella de cine trabajaba en televisión, Taylor dio la nota. Participó en varias series conocidas y hasta la sitcom

The Nanny. También fue la voz de Maggie Simpson en el episodio donde la pequeña dice su única palabra en la historia de la serie: “papi”.

EMPRESARIA. Además de actriz, Taylor fue en una empresaria exitosa en el mundo de perfumes. En 1987 lanzó “Passion”, su primer fragancia fue un éxito y tuvo ventas por más de 70 millones de dólares al año.