Impuesto de Argentina involucra a Uruguay
■■ El impuesto argentino a la riqueza —conocido como el Aporte Solidario Extraordinario que grava a las grandes fortunas— sigue activando conflictos en los tribunales del país vecino dado que la Justicia decidió que obligará a pagar ese tributo a alguien que vive en Uruguay.
La Justicia Federal rechazó una medida cautelar que solicitó un contribuyente, quien alegó “que no es residente fiscal en Argentina” desde julio del año pasado cuando se mudó a Uruguay. El contribuyente había presentado un amparo para no pagar el impuesto, ya que vive en Uruguay desde el año pasado, antes de que el Congreso argentino aprobara el impuesto a la riqueza el 18 de diciembre de 2020.
Además, indicó que a fines de agosto le informó a la Administradora Federal de Ingresos Públicos (AFIP, el fisco argentino) “la pérdida de su condición de residente y solicitó su baja en impuesto a las ganancias y bienes personales”, al tiempo en que la Dirección General Impositiva (DGI) uruguaya reconoció su residencia fiscal.
“A su criterio, la improcedencia de la tributación por un no residente viola los principios establecidos en la Convención Americana sobre Derechos Humanos que establece el derecho de circulación y residencia de cualquier persona; el Convenio para evitar la doble imposición suscripto entre la Argentina y Uruguay, de quienes tengan vinculación con ambos países, y el principio de irretroactividad de las leyes”, remarcó.
Sin embargo, el juez federal rechazó la medida cautelar ya que “la doctrina ha señalado que puede plantearse que una persona física no solo sea residente del exterior, sino también residente en Argentina, es decir, tenga una doble residencia”.
La titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont, indicó que casi la mitad del patrimonio de quienes pagaron el impuesto a la riqueza se encuentra fuera de Argentina. “La riqueza de los sectores alcanzados, los más ricos del país, está en distintas formas de activos financieros”, aseguró.
Según la AFIP, cerca de 10.000 argentinos con patrimonios superiores a 200 millones de pesos argentinos abonaron el impuesto, 80% del universo estimado. [LA NACIÓN/GDA].