Ausencia de Panini se suma a denuncias
La investigación sobre la ida de la mujer a Córdoba se sumará a una indagatoria por denuncias cruzadas
■■ La desaparición de Andrea Panini y su reaparicion en Córdoba (Argentina) será una pieza más dentro de la investigación que la Fiscalía viene llevando a cabo hace un año ante las denuncias cruzadas entre la mujer y su expareja. La fiscal Mirna Busich sumará los resultados que se obtengan en esta etapa de la indagatoria a la causa que ya está abierta.
Asimismo, la Policía y Fiscalía también investigan cómo fue que la mujer argentina con nacionalidad uruguaya logró salir del país. La principal hipótesis de los investigadores es que recibió ayuda y que podría haber salido de Uruguay escondida en un vehículo.
La fiscal espera ahora los resultados de las pericias al celular de la mujer para concluir responsabilidades en el caso. De estos análisis se aguarda información de su salida y si alguien cooperó.
La salida de Uruguay de Andrea Panini (43) sigue siendo motivo de investigación por parte de la Fiscalía y de la Policía. Pero su ausencia es un elemento más dentro de una investigación que ya estaba en curso por denuncias que tenía en su contra desde hace aproximadamente un año.
Panini fue hallada en Córdoba, Argentina, el pasado viernes 18 de junio. Era buscada en Uruguay desde el 11 de ese mes, cuando se denunció su desaparición. Una vecina de Panini fue la que alertó a la Policía que el día anterior la mujer se había ido a su casa, le había dejado a su hijo de 11 años, y que le había transmitido que iría a Atlántida a hacer un trámite y volvería. Como esto último no ocurrió, la Policía comenzó distintos operativos de búsqueda y rastrillaje para dar con la ciudadana argentina, que también tiene nacionalidad uruguaya.
Fuentes de la investigación indicaron a El País que la desaparición de Panini en Uruguay y su posterior aparición en Córdoba formarán parte de una misma carpeta investigativa de denuncias cruzadas entre ella y su expareja. Panini acusó a su exesposo de maltratarla y el hombre la denunció a ella por violencia doméstica hacia el niño, por no enviarlo a la escuela. A raíz de las denuncias, la Justicia dispuso la colocación de una tobillera electrónica al hombre y un dispositivo rastreador a la mujer.
La fiscal de Atlántida Mirna Busich aguarda ahora los resultados de distintas pericias para poder determinar las responsabilidades en el caso de su salida del país, y agregarlo a la investigación que está en curso para llegar a una conclusión.
Entre las pericias se encuentra el análisis del celular, que Panini dejó en su casa ubicada en el Remanso de Neptunia (Canelones) antes de ausentarse. Este hecho, sumado a que también dejó el dispositivo de rastreo que llevaba consigo, fue la primera pista que siguió la Policía para sospechar que su desaparición había sido voluntaria.
El hermano de Andrea Panini transmitió a Busich que la joven decidió huir del país porque había recibido una amenaza de muerte de su expareja. Según las fuentes, no era la primera vez que ella hacía este tipo de afirmaciones. La fiscal Busich deberá ahora reunir todos los elementos en torno a la desaparición para sumarlos a la investigación.
SALIDA DEL PAÍS. En paralelo a la investigación de denuncias cruzadas entre Panini y su expareja, la Policía analiza cómo fue que la mujer logró salir del país. Como no hay datos oficiales de su partida, es evidente que su viaje ocurrió mediante una vía ilegal. La línea de investigación entonces tiene como base saber cuáles fueron los pasos de la mujer antes del día en que se la vio por última vez.
Para determinar este punto también serán claves las pericias al celular de la mujer. Según fuentes policiales, se buscará verificar si hay mensajes o llamadas que determinen si se trató de una salida planificada por Panini en los días previos a su desaparición. En caso de ser así, los investigadores podrían concluir que habría recibido ayuda de una persona cercana para dejar el país.
Respecto a por dónde pudo haber salido, la Policía maneja la hipótesis de que tal vez “pasó oculta en algún vehículo”. Esta práctica, confió una fuente de la investigación a El País, “es la más común” a la hora de salir a través de la frontera de forma ilegal.
Además de los controles migratorios que ya están establecidos y de los determinados para tener un registro de los ingresos y las salidas en el marco de la emergencia sanitaria, la semana pasada la Policía realizó operativos de control de ómnibus específicos en los departamentos de Paysandú y Río Negro. De todas maneras, los efectivos no lograron obtener datos sobre su salida del país. Al menos no bajo su nombre real.
Fiscalía espera por los resultados de pericias para llegar a una conclusión del caso.