Milán recibe a los turistas
La Catedral de Milán es uno de los puntos más visitados en una Italia marcada por el coronavirus
El turismo en Italia se recupera poco a poco, aunque aún lejos de las cifras prepandemia. En Roma, su Coliseo recibe entre 7.000 y 8.000 visitas diarias, lejos de las más de 20.000 que llegaban al anfiteatro antes de la pandemia.
El Duomo de Milán está en la lista de los destinos imprescindibles de Italia y ha retomado sus visitas.
Quienes llegan ante la catedral descubren una construcción que tomó 579 años. Este es el mejor ejemplo del estilo gótico flamígero en Italia,
en el que se privilegia el ornamento sobre la estructura. Es la segunda catedral más grande del mundo con 157 metros de longitud y una capacidad para 40.000 personas. Su estructura está compuesta por cinco naves cubiertas de mármol, una nave central de casi 45 metros de altura y dos a cada lado con 40 pilares de 24 metros cada uno, además de decenas de pináculos, vitrales y torres con estatuas en la cima; precisamente una de estas estatuas, la Madonnina, es el punto más alto con 108 metros de altura.
Los turistas regresan a Milán
para conocer la catedral por fuera y por dentro. Encuentran, por ejemplo, una estatua de Bartolomé el Apóstol con la piel arrancada representando su martirio y un clavo de la cruz de Cristo, que está en una Bóveda tras el altar y se exhibe al público el sábado más cercano al 14 de septiembre, día de la Exaltación de la Cruz y día en el que se celebra el Rito de la Nivola, que conmemora la procesión que hizo San Carlos Borromeo (antiguo arzobispo de la ciudad) con la reliquia en 1577 para que terminara la peste.