Clínicas propone sumar la rehabilitación a Unidad ACV
El proyecto plantea ampliar y consolidar la atención que se ofrece desde 2007
El Ataque Cerebro Vascular (ACV) constituye la segunda causa de muerte en Uruguay, solo superada por la enfermedad isquémica del corazón. Unos 2 mil uruguayos mueren por año a causa de este ataque: entre 5 y 6 por día.
Para hacerle frente, el Hospital de Clínicas cuenta desde el 2007 con la Unidad de ACV, dedicada exclusivamente al tratamiento de pacientes con ACV, unidad que pretende ampliar y consolidar así como sumarle el proceso de neuro-rehabilitación según un plan presentado en la última Rendición de Cuentas.
“Es una experiencia que ya lleva más de 10 años y que ha ido mejorando a lo largo del tiempo”, destacó la doctora Cristina Vázquez, directora de la Cátedra de Neurología del hospital.
La profesional contó que a partir de 2010 lograron tener camas propias, solo para uso de pacientes con ACV y en 2014 se incorporó la presencia de un neurólogo de guardia las 24 horas, los 365 días del año.
PROGRAMA. Vázquez explicó que si lo que se busca es cambiar la realidad del ACV en cualquier país, hay tres pilares de acción. El primero es evitar que se produzca. “Para eso tenés que hacer políticas de prevención y promoción de salud, como controles de hipertensión, de colesterol, de diabetes, de tabaquismo; lo que llamamos la prevención primaria”, detalló la especialista.
El siguiente pilar es la atención del paciente cuando hace un ACV, que tiene como objetivo reducir la mortalidad y la discapacidad. Luego viene todo el proceso de evitar las recurrencias. “Una vez que vos hacés un ACV tenés riesgo de hacer otro; es lo que llamamos prevención secundaria”, apuntó Vázquez.
El Hospital de Clínicas tiene cubierto este segundo pilar y de forma muy aceitada gracias a su Unidad de ACV, pero con el Programa de ACV busca mejorarlo. El primer objetivo es ampliar la cantidad de camas de cuatro a seis. “Se calcula que una Unidad de ACV debe tener una cama cada 100 mil habitantes o cada 100 mil usuarios de ese sistema. Si uno toma en cuenta que en Montevideo hay aproximadamente algo más de 400 mil usuarios de ASSE, nosotros hoy estamos en condiciones de cubrir la atención de prácticamente todos los usuarios de ASSE de Montevideo. Con dos camas más estamos agregando los poco más de 200 mil usuarios de Canelones, entonces seríamos el centro de referencia para todos los usuarios del subsector público de Montevideo y Canelones”, explicó.
Otro objetivo es incorporar dentro del tratamiento en agudo del ACV la trombectomía mecánica, una de las dos técnicas que se utilizan para desobstruir las arterias que se taparon y provocaron el ataque (ver recuadro).
“Si bien ya la venimos haciendo, como no es una prestación que esté contemplada en el PIAS (Plan Integral de Atención en Salud) y pensamos que en el correr de este año va a estar financiada a través del Fondo Nacional de Recursos, queremos incorporarla de una forma más fluida dentro del tratamiento del ACV. Además el hospital acaba de comprar un angiógrafo de última generación, que es necesario para este procedimiento”, señaló Vázquez.
REHABILITAR. El proceso de neuro-rehabilitación es el tercer pilar de acción y, en el caso del programa presentado por el Hospital de Clínicas, es lo único realmente nuevo. La dirección del hospital pretende crear un Programa de Neuro-rehabilitación que no solo atienda a los pacientes con ACV, sino a los pacientes neurológicos en general.
“La idea es que contemple lo que se llama el paciente agudo, donde estaría incluido el ACV, pero podría estar también un traumatismo de cráneo o una cirugía de un tumor cerebral. Eso serían módulos para pacientes agudos, es decir pacientes a los que se les soluciona su problema, pero permanecen vinculados al módulo hasta que alcancen un nivel de independencia que les permita retornar a su casa”, explicó Vázquez.
Después estarían los módulos para pacientes crónicos, como una esclerosis múltiple o una enfermedad de Parkinson. “Un enfermo con Parkinson que está notando que se va para el costado o que se está cayendo con frecuencia, ingresaría a un módulo de rehabilitación que va a tener como objetivo solucionar ese problema específico. Es lo que llamo la neuro-rehabilitación de sastre o a medida, en la que tus objetivos van a ser lograr que ese paciente recupere funciones para alcanzar un nivel lo más cercano posible al que tenía”, detalló la especialista.
En eso es fundamental tener presente que cada paciente tiene una realidad distinta. “No es lo mismo poder caminar para alguien que trabaja en una tarea que le implica actividad física, que la pérdida del lenguaje para una persona que se desempeña como docente. Cada uno tiene un conjunto de expectativas, deseos, necesidades que tienen que ver con su vida social, familiar, laboral”, agregó.
En principio el Programa de ACV y Neuro-rehabilitación está pensado para cubrir las necesidades del subsector público, pero si se logra plasmar en los hechos tal como lo planifican consideran que sería un servicio que también se podría ofrecer a los usuarios del sector privado.
Por lo pronto, según Vázquez, para llevar adelante este modelo de rehabilitación se van a necesitar obviamente recursos, probablemente mejorar la infraestructura existente y adecuarla a los procesos de rehabilitación y conseguir extensiones horarias para el personal. “Todo proceso de neurorehabilitación circunda fundamentalmente en la presencia de los rehabilitadores mucho tiempo con el paciente”, destacó.
Todo lo demás está. “Nosotros las ganas las tenemos de sobra”, concluyó la especialista.