CPA: más crecimiento, pero “tensiones” en agenda
Inflación y resultado fiscal tensionarán la política y la economía
■■La consultora CPA Ferrere presentó ayer nuevas proyecciones sobre la economía uruguaya y el análisis de la coyuntora internacional y local en un evento para clientes del Servicio de Análisis y Pronósticos Económicos de la firma.
La presentación titulada “Claves económicas para la segunda mitad del período de gobierno”, estuvo a cargo de los socios de CPA Ferrere, Alfonso Capurro y Gabriel Oddone y del gerente del departamento de Consultoría, Nicolás Cichevski.
Sobre Uruguay señalaron que “se consolida la recuperación de la actividad, al tiempo que se afirman perspectivas para 2022. Si bien el marco internacional es actualmente favorable, persiste la necesidad de implementar reformas que potencien el crecimiento en el largo plazo”, según consignó la firma.
La consultora elevó la proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para este año en 1,7 puntos porcentuales a 4,7% y la de 2023 en 1 punto porcentual a 3,1%.
Explicaron que los motores del crecimiento serán los agronegocios y el consumo privado y que hay riesgos para el pronóstico por el lado de una escalada del conflicto bélico Rusiaucrania, el resurgimiento de covid-19 en China y un aumento abrupto de tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
A su vez, son desafíos para el escenario de Uruguay, el mantener el dinamismo de la inversión, la amenaza para las exportaciones de turismo y bienes no agroindustriales por la inflación en dólares y la fuga de consumo privado a la región.
Según CPA el resultado fiscal estructural mejoró, en línea con lo propuesto por el gobierno, un ajuste fiscal de 2 puntos del PIB respecto a 2019.
“Sin embargo, la política fiscal dejaría de ser contractiva,
CPA Ferrere. en tanto ciclo económico y político impondrán presión sobre las cuentas públicas en los próximos años”, afirmaron.
El déficit fiscal sería de 3,1% del PIB al cierre de este año y el déficit estructural (que excluye aspectos coyunturales) sería de 2,4% del PIB. En 2019, esos guarismos eran de 4% y 4,6% del PIB respectivamente.
Sobre la inflación, la consultora afirmó que superaría el 9% en los próximos meses (fue 8,85% en 12 meses a febrero), “posicionándose como uno de los principales temas de agenda”.
El proceso desinflacionario que se propone llevar adelante el Banco Central, “encontrará crecientes desafíos, en tanto se mantienen presiones externas y comienza la recuperación salarial”, explicó CPA.
La consultora indicó que la apreciación del peso uruguayo frente al dólar “amortigua” la suba del precio de los commodities y “opera como ancla de inflación”.
CPA Ferrere estima una inflación de 8,3% para fin de este año y de 7,2% para fin de 2023, en ambos casos fuera de la meta del gobierno que es que se ubique entre 3% y 6%.
“En síntesis, si bien las perspectivas sobre la actividad son favorables en el corto plazo, persisten desafíos que tensionaran la agenda económica y política en los próximos años”, aseguró la consultora.