“Se requieren soluciones excepcionales”
El analista apela a enfoques sistémicos y soluciones acordadas
■ Sobre el impacto en Uruguay de la guerra entre Rusia y Ucrania, Petrella afirma que “uno de los problemas surge cuando se miran los desafíos desestabilizadores desde el lado de la normalidad. Hay que tener en cuenta que las soluciones para un ámbito de normalidad no son aplicables a la excepcionalidad. Miremos como ejemplo la crisis de la pandemia del coronavirus. Mientras el tratamiento consistía en ajustes de la normalidad previa, no logramos grandes avances. Sin embargo, cuando nos dimos cuenta que enfrentábamos una situación excepcional y se empezaron a tomar medidas excepcionales, no solo sanitarias sino también económicas y sociales, logramos atenuar los efectos negativos de la crisis y encontrar soluciones”.
El ingeniero afirma que actualmente los países están entrando, en alguna medida (dependiendo del impacto -directo o indirecto- del conflicto en Ucrania en sus respectivas economías), en modelos estratégicos de economía de guerra.
En el país todo implica un cambio en cuatro niveles: en los agentes del gobierno, en las conductas de la oposición política, en los sindicatos y en la población en general.
“Deberíamos llegar a un acuerdo sobre cómo vamos a asimilar los costos económicos, políticos y sociales con los cuales vamos a tener que lidiar si la guerra no termina pronto, o por el contrario, si escala”, advirtió.
A su entender, hablar sobre desarrollar el agro en esta incertidumbre mundial, debería hacerse viendo al sector en forma contextualizada, esto es, su integración con el sistema financiero (en relación, por ejemplo, a créditos que permitan su crecimiento), el académico (para producir innovación), el logístico (para extraer y distribuir productos), y el comercial (donde también se puede agregar valor). “Eso es pensamiento sistémico, más necesario que nunca en un contexto bélico como el actual”, concluyó.