Otra faceta de una cara conocida

El actor y conductor habla de su rol en la película “En la mira” y de sus proyectos para este año

Maxi de la Cruz dice que la mayor dificultad a la hora de filmar En la mira que llega hoy a la cartelera uruguaya, fue intentar no decir algo gracioso o transformar una escena seria en comedia.

“En todo el rodaje tuve que contenerme, me tuve que morder la lengua, y cuando no estaba filmando me mantenía serio porque si decía algo y se empezaban a reír, no parábamos más”, dice a El País.

La seriedad se debe a que se trata de un thriller que si bien tiene alguna escena de humor, es un espectro actoral en el que no suele moverse el también conductor de los ciclos de Canal 12: La culpa es de Colón

y 100 uruguayos dicen.

Su personaje dista mucho de lo que los uruguayos estamos acostumbrados verle; en la película de Ricardo Hornos y Carlos Gil que protagonizan Nicolás Francella, Gabriel “Puma” Goity y Emilia Attias, De la Cruz interpreta a Gustavo, el supervisor del centro de atención al usuario de una empresa telefónica donde trabaja Alex (Francella). Allí, entre decenas de cubículos y jóvenes con cara de estresados que atienden llamadas sin parar, Gustavo se siente como el señor del lugar. Y desde el primer minuto queda claro que al jefe solo le interesa quedar bien con los superiores. Su primera aparición es para terminar el festejo de cumpleaños de una trabajadora porque se había pasado el tiempo de descanso. En pocas palabras: un botón.

“Cada escena fue un desafío para mí, porque en cada momento le pasa algo, o hace algo que te llama la atención”, dice De la Cruz. “Nunca está porque sí. Cuando se presenta ya botoneando te marca su presencia, hasta que se pone a hostigar a Axel. Para mí fue interesantísimo hacer ese proceso”.

Dice que lo ayudó que los directores y protagonistas sean argentinos y no tengan tan asociado su nombre con el humor. Gracias a eso pudo hacer el proceso de casting sin prejuicios, y una vez que le confirmaron su personaje, comenzó a desarrollarlo. “Todo ese proceso fue una experiencia divina”, resume.

Claro que acostumbrado a hacer televisión y teatro, lo sorprendió tener que grabar la última escena en la que participa, al inicio del rodaje.

“Eso fue un ejercicio nuevo para mí. Por ejemplo, me decían: ‘vamos a empezar con la pelea’, y ahí el director nos decía qué había pasado con el personaje, porque Ricardo Hornos estaba muy arriba de nosotros para que sepamos cómo llegamos a ese momento”.

Esa pelea a la que hace referencia es una de las últimas escenas de su personaje. “Los directores buscaban que sea una pelea patética porque si te ponés a pensar, Gustavo es el típico tipo del que la gente se ríe por atrás pero no le pueden decir nada porque te puede joder

“En la mira”, thriller donde De la Cruz comparte elenco con Nicolás Francella.

Maxi De la Cruz también conducirá de formato “¿Quién es la máscara?”.

la vida. Igual lo odian todos. Y para esa escena se buscó eso”, dice.

“Es un tipo que se puede hacer el gauchito solo en la oficina, pero si tiene que pelear no sabe hacerlo. Por eso lo araña, le tira manotón y el otro lo reduce en un minuto. Pero está bueno que la película tenga ese aire para reírte sin que sea una comedia. Sin querer hacer reír, surge la risa”, dice.

Más allá del proceso de filmar, En la mira fue una película compleja de realizar porque Axel, por cuestiones que más vale no revelar, está todo el tiempo hablando por teléfono.

“Yo tenía que decir mis diálogos con Nicolás mientras le hablaban por teléfono, y había que cuidar el tiempo de los silencios. Tenía que imaginarme que estaba hablando por teléfono y que pareciera real. Todo ese trabajo fue interesante y lo resolvimos en el momento. Si bien en el guion estaba marcado, faltaba hacerlo en la acción para entenderlo bien”, dice.

UN AÑO FUERTE. Es un año importante en materia laboral para Maxi de la Cruz, quien además será el conductor de

¿Quién es la máscara?, que llegará la semana próxima al prime time de La Tele.

“Ahora voy a ver antes de la función si me pongo a vender pop, es lo único que me faltaría”, dice entre risas.

Si bien la conducción no es algo nuevo para él, dice que

¿Quién es la máscara?, es algo distinto “porque no sabés a quién presentás y hay mucho secretismo porque nadie te dice nada”, comenta. “Y como está todo muy bien armado, yo soy solo el intermediario entre los investigadores, los personajes y la gente que también va a jugar desde su casa, porque es inevitable que pase eso”.

The Masked Singer , o sea la franquicia que acá emitirá La Tele es el formato más vendido del mundo, aunque para De la Cruz, lo mejor es que muy pocas personas en el canal sepan los nombres de los participantes.

“Yo me quedo parado al lado de los famosos que están en los disfraces, los miro y pienso ¿quién será?. Es loco mirarlo y no saber quién está debajo. Por ahí es un amigo mío y no me doy cuenta. Lo que es seguro, va a haber sorpresas. Igual, lo que más me atrajo del juego es el tener que adivinar quién está escondido y no darte cuenta. Me habían dicho todo esto antes, pero no me di cuenta de la dimensión hasta que lo vi en vivo”, dice.

Este año tendrá una gran presencia en la televisión, pero adelanta que con la llegada del ¿Quién es la máscara? se tomará un descanso de la conducción de La culpa es de Colón. “Sino me va a odiar la gente de tanto verme”, dice.

—Hace unos meses publicaste en Instagram que te ibas a España ¿Se puede hablar de lo que estuviste haciendo?

—Tengo un contrato de confidencialidad y no puedo hablar nada de eso. Es un proyecto en cine grande, solo eso te puedo adelantar.