Machismo y porno en el Parlamento del Reino Unido
Declaraciones misóginas de un parlamentario y denuncias de dos diputadas por vídeos sexuales
La política británica orbita alrededor de un poderoso imán que la hace ir de lo sublime a lo mezquino a golpe de titulares de cualquier periódico tabloide. Sobre todo si se trata del Daily Mail. Lo sublime, desde hace semanas, es el modo en que el Reino Unido se ha hecho hueco en el gran teatro internacional con su decidido apoyo a Ucrania. Lo mezquino se reparte entre las fiestas prohibidas de Downing Street durante el confinamiento, con su correspondiente multa a Boris Johnson, o los episodios anónimos de machismo o indecencia pública en los grupos parlamentarios conservador y laborista relatados en los últimos días.
El corresponsal de información política del Mail, Glen Owen, publicó el pasado fin de semana una crónica que rayaba lo ridículo, con el sugerente título de Los Tories acusan a Rayner de usar la estrategia de ‘Instinto Básico’ para distraer a Boris. Los tories es el término con que se conoce a los miembros del Partido Conservador. Rayner es Angela Rayner (42), la número dos del Partido Laborista. Una mujer que fue madre del primero de sus tres hijos a los 16 años, de orígenes humildes, trabajadora social y sindicalista, con un carisma político arrollador y una fuerte pertenencia a la izquierda. La estrategia de “Instinto Básico” es el legendario descruce y cruce de piernas de Sharon Stone que probablemente ostente el récord del momento más pausado en la historia del cine. Boris es Boris Johnson.
“Sabe que nunca podrá competir con las habilidades oratorias que adquirió Boris en el club de debate universitario de Oxford Union, pero ella dispone de otras habilidades de las que él carece”, aseguraba al periodista desde el anonimato un diputado conservador, que conseguía la triple proeza, en una sola frase, de presentar al entorno del primer ministro como un grupo de niñatos de colegio y universidad de élite; hacer gala de un machismo trasnochado; y poner en duda la capacidad de concentración de Johnson frente a unas piernas.
“Las mujeres que entran en política se enfrentan cada día al machismo y a la misoginia. No soy diferente al resto”, respondía Rayner a través de Twitter.
El asunto ha indignado a políticos de uno y otro bando, hombres y mujeres, hasta el punto de protagonizar parte de la sesión de control al primer ministro de los miércoles. El propio Johnson, prometió “desatar los terrores de la tierra”, como el Rey Lear de Shakespeare, contra el diputado anónimo que había realizado el comentario machista.
La misma repulsa que hizo constar el presidente de la Cámara de los Comunes, Lindsay Hoyle,