El sector empresarial pide apurar reforma jubilatoria
Cámaras exigen que no se piense en los costos políticos
La reforma de la seguridad social, más precisamente la jubilatoria, es un tema que preocupa al gobierno y más allá. La semana pasada el presidente Lacalle Pou se reunió con todos los integrantes de la coalición en la residencia presidencial de Suárez para pedir que se busque “un consenso con todo el sistema político”.
Y el tema también preocupa en el sector empresarial.
Juan Martínez, presidente de la Confederación de Cámaras Empresariales, se refirió a esta realidad como una situación “que no se soporta más”.
“El sistema está casi en un colapso, tenemos que buscar una mejor distribución económica y social porque lo que estamos haciendo es un agujero económico que a la vez, da una retribución a la gente con la que no puede hacer mucho porque tuvo una pérdida de poder adquisitivo importante”.
El empresario alertó que el país necesita “sí o sí, hacer esa reforma”. Y remarcó: “Llega un momento en el que se vuelve insostenible la carga”.
Ante esta realidad, Martínez hizo hincapié en que es necesario que el ambiente político haga a un lado sus intereses y que comiencen a “pensar más allá de los gobiernos”. “Si se ven las grandes reformas del país en términos de resultados electorales, estamos mal. Desde el punto de vista empresarial, la reforma hay que hacerla. El país necesita relanzarse más allá del gobierno de turno porque tiene que tener la cabeza abierta para encarar reformas si quiere avanzar”. Además, agregó que en estos momentos donde “el mundo va acelerado” “no nos podemos dormir”.
“Por eso no entendemos los frenos. Cuando se piensa en los costos políticos se piensa más en la silla de cada uno en vez del bienestar de todos los uruguayos, ahí caemos en el error más grande”, enfatizó.
Alfredo Antía, presidente de la Cámara de Industrias del
Uruguay (CIU), coincide. “Hay que ver a la ciudadanía más allá de los colores partidarios, hacer la reforma con la mayor inteligencia posible y corregir el rumbo en Uruguay, no solo para asegurarle a los jubilados sus ingresos sino para que los actuales trabajadores tengan una caja sana para que reclamen esos servicios”, explicó.
Para Antía, cuanto más se tarde en llevar adelante la reforma jubilatoria, peor será para el país. “Da la sensación que el tiempo que pasa es tiempo que se pierde. Esto es una materia que Uruguay debe encarar. Es un problema que tiene el país, más allá del color que tenga el gobierno, porque los beneficios serán para las generaciones futuras”, dijo.
De demorar la reforma, indicó Antía, las alternativas que existen para paliar las pérdidas pueden impactar directamente en el sector empresarial.
“Si la caja (de jubilaciones) no se reforma, se paga con déficit fiscal o con más impuestos. Lo primero genera el ingreso de divisas con endeudamiento para cubrir las cuentas, puede deprimir el tipo de cambio y generar pérdida de competitividad para el sector. La otra solución es generar más impuestos y no hay espacio para esto. Porque si eso pasa, puede conducir a las empresas a la limitación de contratación de personal”, alertó el principal de la CIU.
Desde la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay, indicaron que la reforma es necesaria porque tiene “una profunda repercusión en todos los sectores de la sociedad, además de contribuir al crecimiento y desarrollo del país mejorando las condiciones de vida del presente y futuro de las personas”.
Por ello, enfatizan que es necesario se lleve adelante “como país”. Se muestran optimistas porque aseguran que se transita el camino “con un horizonte certero de pasos a seguir”, aunque reconocen que “aún resta mucho por hacer”.