Informe indica que cuando se pidió atención había ambulancia
ASSE inició investigación por presunta “negligencia” en muerte de hombre
El presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Leonardo Cipriani, ordenó ayer una investigación administrativa de carácter urgente por la muerte de Ruben González, de 76 años, en enero pasado tras un reiterado pedido de asistencia médica que nunca llegó.
Cipriani envió el caso a la gerencia general de ASSE para que iniciara la investigación administrativa luego de recibir un primer informe de SAME 105. El área tomó como elemento central las grabaciones del 20 de enero, cuando se pidió por un médico de forma urgente, que no fue a la casa del paciente a pesar de la insistencia.
Según supo El País, tanto la recepcionista de la emergencia de ASSE como un médico coordinador que participaron del llamado no percibieron la “gravedad” del caso. Esto es considerado a priori un acto de negligencia grave porque dada la situación, la recepcionista debió haber enviado una ambulancia de inmediato, lo que no ocurrió. Pero además, dio aviso al médico unos tres minutos después, quién tampoco supo diagnosticar el caso.
De la investigación de SAME 105 también surgió que cuando transcurrió el llamado a la emergencia había una ambulancia disponible en la base. “Estaba operativa, pronta y a muy poca distancia del paciente”, lamentó un jerarca de ASSE.
El titular de SAME 105, José Antonio Rodríguez, fue quien activó de inmediato la investigación y ya tomó las medidas correspondientes.
Según supo El País, ambos funcionarios no están trabajando en dichos cargos.
La División Investigaciones y Sumarios de ASSE comenzará a citar a los funcionarios por estas horas. Se estima que la semana próxima ya se arribará a una definición, agregaron las fuentes.
Cipriani aún no recibió el informe solicitado al director de la Red de Atención Primaria (RAP) de Canelones, Carlos Ortega, por el pedido de asistencia que había iniciado personalmente el 19 de enero un vecino de González.
CASO. Danilo Tubino, amigo personal de González, fue quien escribió la carta denunciando que nadie lo atendió. El adulto sufría la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y a comienzos de enero dio positivo a covid-19, contó Tubino a El País. Estuvo internado en cuidados moderados del Hospital de Clínicas unos cuatro días. Volvió a su casa y una semana después su estado empeoró.
El 19 de enero, González tenía dificultad respiratoria “importante” y le pidió ayuda a un vecino. Lo auxilió y después se comunicó con Tubino, quien le dijo que vaya hasta la Policlínica Norte de Parque del Plata —donde se atendía González— para pedir un médico a domicilio.
Según Tubino, al vecino lo “maltrataron” y le dijeron ese día de mañana que “ya iba a ir a verlo un médico”.
Tubino denunció que ese día “no fue nadie” y el adulto permaneció afectado. Al mediodía del 20 de enero, Tubino recibió un aviso del vecino de González: “Rubén no puede respirar más, está liquidado, por favor vení”.
Ante ello, le pidió que llamara a SAME 105. “Le dijeron tranquilicese, ya va a ir un médico”, contó. Sin embargo, tomando en cuenta el pedido de horas atrás, lo trasladaron en su camioneta a la Emergencia de Parque del Plata, donde falleció por insuficiencia respiratoria. “Estaba agonizando, apenas respiraba” cuando llegaron, recordó Tubino con dolor.