BNPL: ¿cómo funciona este crédito que no requiere tarjeta?
Una nueva tendencia que integra segmentos de usuarios no bancarizados
En una sociedad en la que cada vez hay más opciones de pago para realizar compras, las electrónicas y digitales ganan espacio desplazando al tradicional efectivo. El propio nombre de “Buy Now, Pay Later” (BNPL, “Compre Ahora, Pague Después”) da una idea de qué trata este método de crédito, que a nivel global es una tendencia y que en Uruguay es más incipiente. El BNPL cuenta con características que lo diferencian de aquellos métodos que ya utilizamos en la actualidad.
En este Finanzas de Bolsillo veremos de qué trata esta nueva tendencia en el comercio minorista, que integra a quienes también no están dentro del sistema bancario y que en Uruguay impulsan empresas fintech (aquellas que combinan finanzas y tecnología).
El País consultó a diferentes firmas que prestan este servicio para consumidores y empresas y participaron Paigo, Tucuota.online, Agrotoken y Prezzta.
Pero entonces, ¿qué es el BNPL? Esta es una nueva forma de financiamiento que permite a cualquier usuario, que tenga o no tarjeta de crédito, comprar un producto o servicio en una tienda online o física y pagarlo en cuotas fijas, en la mayoría de los casos, sin interés. Si bien en el caso de una compra física depende del comercio en cómo se presenta la opción, al hacer una compra online suele verse como opción dentro de los métodos de pago.
Según explicó Maximiliano Isa Paiva, socio de Tucuota.online, en este método de financiamiento el que asume el costo de financiar es el comercio que hace la venta, pagando un arancel a la financiera que provee el servicio. Sin embargo, este comercio no se hace cargo del riesgo de morosidad.
Una de las características de este método es que integra a aquellos consumidores que no están dentro del sistema financiero, es decir que no tienen una tarjeta de crédito o cuenta bancaria.
Si bien no es el único proveedor de este método, el growth manager de Paigo, Agustín Bordaberry, explicó que el cliente que no quiere o no puede usar una tarjeta de crédito (ya sea por falta de acceso, desconfianza de costos o porque la utiliza para otras necesidades) es quien utiliza principalmente este servicio.
DIFERENCIAS CON CRÉDITO. Si bien ambas opciones permiten a los consumidores financiar el pago de sus compras, hay varias diferencias entre el BNPL y la tarjeta de crédito.
Una de las diferencias principales, según lo describió Mateo Infantozzi, cofundador de Prezzta, es que no se necesita tener un plástico o límite de crédito pre-aprobado para realizar la compra. Siempre dependiendo de la financiera, este nuevo método presenta una flexibilidad que lo diferencia. En este sentido, el crédito a otorgar tiene un fin específico, la compra de bien o servicio puntual, a diferencia del crédito pre-aprobado.
Asimismo, Infantozzi señaló que otra diferencia es que permite hacer un desembolso inicial y después tener pequeñas cuotas para saldar la deuda. De todas formas, esto también depende de la institución financiera que ofrece el financiamiento.
Por otro lado, los consultados agregaron que es menor la cantidad de información que se requiere para acceder a este método respecto a la requerida para obtener una tarjeta de crédito.
En tanto, las tarjetas de crédito suelen tener cargos adicionales por el uso y el mantenimiento, mientras que el BNPL no tiene estos costos. Además, este último no tiene un agregado de interés, mientras que determinados pagos de las tarjetas sí los tienen.
Por otro lado, la tarjeta de crédito suele contar con beneficios o sistema de puntos por compra, mientras que el BNPL no cuenta con ello.
Estas diferencias en los métodos de financiamiento no implican necesariamente una competencia entre ellos, ya que, como explicaron los consultados, con el BNPL no se consume el disponible de la tarjeta de crédito, permitiendo optar qué tipo de compras se realizan con uno u otro.
MONTOS Y PLAZOS. Este servicio se caracteriza, en Uruguay, por financiar montos pequeños o medianos, no mayores a $ 50.000, a plazos no mayores a 12 meses.
En otros países como Argentina o Estados Unidos, la tendencia es a usarlo para plazos entre cuatro o seis meses.
Estas condiciones pueden variar a medida que se utiliza el servicio, ya que la financiera pasa a tener un mejor conocimiento del usuario. Por otra parte, las penalidades por morosidad también existen en este método de financiamiento, en donde el consumidor, si no paga en término, deberá pagar cargos extra y podría ser reportado al clearing, viendo su score (puntuación financiera) afectado.
Los consumidores que quieran utilizar el BNPL como método de financiamiento también serán analizados por la financiera, ya que de acuerdo a su perfil crediticio pueden determinar el monto a prestar.
¿CUÁNDO CONVIENE MÁS? Si bien cada consumidor conoce su situación financiera, hay métodos que pueden ser más convenientes dependiendo la compra que se vaya a realizar.
Según los consultados, este servicio es conveniente para ser usado con compras chicas, casuales, ya que de esta forma se evita utilizar el crédito disponible de la tarjeta de crédito, pudiendo utilizar este último para compras más grandes o como contingente para una emergencia.
Asimismo, el uso de BNPL genera otro punto de información para el score crediticio del consumidor, permitiendo el acceso a mejores condiciones de este método en un futuro.
PARA COMERCIOS. Este nuevo método también presenta posibilidades a los comercios y financieras, según los consultados. Si bien los comercios pagan una arancel a la financiera que otorga el crédito al brindar este servicio, tasa por momentos mayor que al tomar pagos con tarjetas de crédito, les habilita un nuevo segmento de consumidores al que antes tal vez no podían ofrecer sus productos.
Por otro lado, el BNPL también presenta un beneficio para las empresas financieras que lo otorgan, ya que es una vertical más que les permite llegar a un nuevo segmento de clientes tomadores de crédito al que les resulta más difícil y caro llegar mediante el crédito tradicional.