Rusia amenaza al Reino Unido con “escalada grave” en la guerra
■ La entrega por parte de Reino Unido de misiles de largo alcance “Storm Shadows” a Ucrania es “un paso extremadamente hostil” que puede conducir a una escalada grave en la región, alertó ayer viernes el Ministerio de Exteriores de Rusia.
“Valoramos esta decisión como un nuevo paso extremadamente hostil por parte de Londres, dirigido a continuar bombeando armas a Ucrania y que conducirá a una escalada grave”, señaló la diplomacia rusa en un comunicado.
Rusia “se reserva el derecho a tomar todas las medidas necesarias para neutralizar las amenazas que podrían surgir a consecuencia del uso de los misiles de crucero británicos por parte de Ucrania”.
“Los autores y ejecutores de este paso irracional cargarán total y absolutamente con toda la responsabilidad por las acciones destructivas de Londres”, añadió el departamento encabezado por Serguéi Lavrov.
El ministro británico de Defensa, Ben Wallace, confirmó este jueves en el Parlamento que su Gobierno enviará misiles de largo alcance “Storm Shadows” al Ejército ucraniano.
En su declaración, Wallace argumentó que “la donación de estos sistemas de armamento da a Ucrania la mejor probabilidad de defenderse frente a la continuada brutalidad rusa, especialmente de los ataques deliberados contra infraestructura civil ucraniana, que van contra la legislación internacional”.
“Ucrania tiene derecho a poder defenderse frente a esto”, remachó el ministro, al insistir en que esos misiles “permitirán a Ucrania echar a las fuerzas rusas que están asentadas dentro de territorio de soberanía ucraniana”.
El político también señaló que no planea dar más detalles sobre las capacidades de esos misiles pero observó que “estos sistemas ni siquiera se encuentran en la misma liga que los misiles rusos hipersónicos Killjoy AS24 (Kinzhal)”, ni tampoco a la altura de los “misiles de crucero Kalibr que cuentan con un alcance de 2.000 kilómetros, unas siete veces más que los Storm Shadow”.
Los misiles Storm Shadow, desarrollados por el Reino Unido y Francia, tienen un alcance de más de 250 kilómetros, un poco menos que los Atacms que Estados Unidos se ha negado hasta ahora a enviar a Ucrania.