Archivan caso de abuso y enjuician a madre de víctima
La demanda la inició un docente de un colegio capitalino
■■ En diciembre de 2021, una madre realizó una denuncia ante un colegio de Montevideo donde indicó que su hija de 11 años había sido abusada por un docente de la institución. El colegio separó del cargo al profesor y elevó un informe a la Fiscalía.
A la investigación se sumó además una pericia de parte realizada por una psicóloga forense que entrevistó a la niña.
El 23 de febrero del año pasado trascendió que el fiscal Maximiliano Sosa investigaba el caso y había indagado al profesor denunciado y a la menor, entre otras personas.
Poco después, Sosa archivó el expediente sin perjuicio. Es decir, que lo puede reabrir en caso de surgir algún elemento nuevo.
El miércoles 17 de este mes, el docente inició una demanda civil contra la madre de la menor reclamando daños y perjuicios. Alegó que fue víctima de “una falsa denuncia de abuso sexual respecto de una niña menor de edad”.
Sostuvo que la madre demandada promovió contra él medidas cautelares ante el Juzgado de Familia Especializado de 6° Turno en forma “totalmente antijurídica” y que lo “estigmatizaron” ante su entorno y la sociedad.
El profesor señaló que, tras la separación del cargo en el colegio, fue “estigmatizado públicamente” en distintos lugares y en redes sociales, lo que le provocó la pérdida de oportunidades laborales más allá de la “crítica mirada social” que recayó sobre su persona.
“Queda claro que se ha formulado una denuncia plagada de falsedades, injurias, difamación e incluso desconocimiento de las conclusiones de la investigación interna que ordenó el colegio donde se supone ocurrieron los hechos”, expresó el escrito del profesor.
Y reiteró que la madre demandada incurrió en “hechos ilícitos”; esto es, la lesión al derecho a la integridad moral del docente provocándole “daños” en el desempeño de sus actividades laborales, culturales y sociales.
El docente sostuvo que las actuaciones en Fiscalía, que no generaron consecuencias jurídicas en su contra, provocaron una “mancha oscura” en su vida, generándole así “un sinnúmero” de padecimientos emocionales y estigmatización social y cultural.
Todo esto, continuó, lo llevaron a hacer varias consultas médicas, le provocaron angustia reiterada en el tiempo y episodios depresivos. En otro tramo de su demanda, el profesor recordó que es mayoritaria la posición jurisprudencial dentro del derecho uruguayo que admite el resarcimiento del daño moral.
Por eso, reclamó a la madre demandada el pago de una indemnización de $ 500.000 por lucro cesante y daño emergente y US$ 60.000 por daño moral dadas la “terrible angustia y dolor” que debió enfrentar luego de que se lo apuntara como sospechoso de un delito de abuso sexual de una menor.