El PSDB aún no resuelve si le retira el apoyo a Temer
El aliado clave del mandatario suspendió una reunión ayer.
El presidente brasileño Michel Temer tuvo un respiro ayer tras la suspensión de una reunión del principal socio del gobierno en la que iba a decidir sobre su apoyo al mandatario, acorralado en una investigación por corrupción. Temer lucha por su supervivencia política desde que el miércoles el diario O Globo reveló una grabación en la cual avalaba comprar el silencio del expresidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, preso por corrupción.
El socialdemócrata PSDB, aliado clave del centroderechista PMDB de Temer, suspendió un encuentro previsto para ayer en el que iba a decidir sobre si mantiene o no su apoyo al gobierno. “No sabemos cuando tendrá lugar”, dijo un portavoz de la formación.
Una salida del PSDB -que sufrió la caída estrepitosa de su presidente, Aécio Neves, suspendido como senador esta semana al verse implicado también en las grabacionesimplicaría un golpe de gracia para Temer.
La anulación de la reunión dio un respiro a Temer, contra quien aumentan los pedidos de renuncia o que sea sometido a un impeachment. Temer asegura que las pruebas en las que se basa la investigación en su contra están “manipuladas”, de economistas e inversores por sus reformas de austeridad de un lado y el odio del brasileño común del otro, convirtiéndose en un mandatario con una enorme impopularidad.
Su poder reposa en la coalición entre su PMDB y varios socios.
Pero el sábado sufrió la primera baja: la del pequeño Partido Socialista Brasileño (PSB).
Con cuatro ministros en el gabinete, 47 diputados y 10 senadores, el PSDB representa un importante apoyo para sacar adelante las reformas y, llegado el caso, para decidir sobre un impeachment contra Temer.
De dejar Temer el poder ya sea a través de una renuncia o un juicio político, el Congreso debe votar un reemplazo para que gobierne hasta después de las elecciones de 2018.
No obstante, hay fuertes reclamos tanto de la izquierda como de la derecha para modificar la constitución y convocar elecciones directas de inmediato.
La crisis que envolvió a Temer esta semana está vinculada con la operación “Lava Jato” y se precipitó tras la divulgación de la comprometedora conversación, que forma parte de delaciones premiadas por parte de ejecutivos del gigante mundial de la alimentación JBS, entre ellos sus dueños Joesley y Wesley Batista.
Fue Joesley el que grabó secretamente a Temer durante una reunión en la residencia presidencial a altas horas de la noche. Un ejecutivo de JBS acusó a Temer también de haber recibido ilegalmente 15 millones de reales en 2014 (6,37 millones de dólares al cambio de ese año) por actuar en favor de la empresa.
Después de haber proclamado su inocencia y de haber enfatizado que no dejaría su cargo, el mandatario rompió un silencio de casi dos días y contraatacó el sábado diciendo que esa grabación fue “manipulada y adulterada”.