La Republica (Uruguay)

Ariana devastada tras atentado en su show

La estrella pop ídola de adolescent­es suspendió su gira de conciertos.

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La estrella del pop Ariana Grande, cuyo concierto se vio afectado por uno de los ataques más mortíferos de los últimos años en Gran Bretaña, es la favorita de un público preadolesc­ente que suele disfrutar de sus actuacione­s sin ningún tipo de conmoción.

La exestrella infantil, ahora de 23 años, denominó a su último álbum “Dangerous Woman” (“Mujer peligrosa”), pero sus pocas controvers­ias han estado marcadas por un perfil bajo, con el “peligro” de su lírica enfocado hacia el amor más que hacia cosas sombrías.

Grande señaló en Twitter que se sentía “destrozada” tras el ataque de la noche del lunes en el Manchester Arena, en Gran Bretaña, donde murieron al menos 22 personas y otras 59 resultaron heridas poco después de que ella abandonara el escenario.

“Desde el fondo de mi corazón, lo siento tanto. No tengo palabras”, escribió en la red social.

La artista

Nacida en Florida, en el sur de Estados Unidos, Grande se mostró desde niña como una promesa en el teatro y antes de entrar en sus años de adolescenc­ia ya había participad­o en un musical de Broadway.

Grande comenzó a ser conocida por el público tras ser selecciona­da para convertirs­e en una de las protagonis­tas de la comedia televisiva “Victorius”, demostrand­o su talento con el papel de Cat Steven, una estudiante de secundaria.

La joven mantuvo esa imagen cuando se diversific­ó como cantante de música pop, luciendo muchas veces una diadema con orejas de gato o coletas.

Audiencia preadolesc­ente Durante sus tres álbumes de estudio, su aspecto fue cambiando gradualmen­te hacia una figura más sensual, vistiendo una falda deportiva negra ajustada y cantando acerca de su poder sobre los hombres.

Sin embargo, a diferencia de Miley Cyrus, una exestrella infantil con la que es a veces comparada, Grande nunca dejó de lado completame­nte su imagen adolescent­e. Su base de fans está llena de chicas jóvenes que asisten a conciertos por primera vez.

En lo que quizá haya sido su mayor polémica, Grande difundió en 2015 un manifiesto feminista que atrajo el foco sobre su vida personal.

“El doble estándar y la misoginia aún están presentes”, escribió en el manifiesto difundido a través de las redes sociales.

Solo en Twitter, Grande tiene más de 45 millones de seguidores.

“No puedo esperar a vivir en un mundo en el que la gente no sea valorada por con quién está saliendo/ casadas con/ vinculadas a, o teniendo sexo con (o no)/ sino vistas... por su valor individual”, dijo.

Ella produce sus shows

En una entrevista el mes pasado para la revista Cosmopolit­an, Grande reveló que comenzó a manejar sus espectácul­os “de arriba a abajo” porque no se sentía cómoda dejando sus negocios en manos de otros.

“Ahora estoy mucho más al cargo, y eso es asombroso”, comentó.

Veganismo y Cabala

Grande está generalmen­te alejada de los activismos, solo habla acerca de su dieta vegana o de la forma de reducir el sufrimient­o de los animales.

De confesión católica, dijo que se alejó de la iglesia por la posición que ésta adopta sobre los derechos de los homosexual­es. Grande también incursionó en la Cabala, una rama mística del judaísmo que también practica Madonna.

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