Primera cátedra sobre aborto
Por primera vez, una universidad nacional de Argentina va a incorporar una materia específica sobre el aborto en la carrera de Medicina. La iniciativa mereció apoyo unánime del Consejo Directivo de la Facultad y el respaldo del ministro de Salud de la pro
El Código Penal argentino, en su artículo 86, define causales por las que la interrupción voluntaria del embarazo es legal: cuando hay peligro para la vida o salud de la mujer, en los casos de violación o de violación de una mujer con discapacidad mental.
Sin embargo, quienes desarrollarán en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario (provincia de Santa Fe) la primera cátedra en el país sobre ´´El aborto como problema de salud`` estiman que muchos profesionales del área, “por ignorancia o por falta de compromiso, lo obstaculizan. Suponemos que hay algún grado de desconocimiento porque la formación en las facultades de Medicina ha sido muy restrictiva y se ha educado en relación al aborto sólo como un delito. Siempre se nos inculcó el miedo, no los derechos”, afirmó a Infobae la doctora Raquel Tizziani, responsable académica.
Para capacitar a los futuros médicos/as, en el primer módulo se analizará el marco legal vigente en Argentina. Usarán “casos testigo” para mostrar en qué situaciones el aborto no es punible. Uno de ellos es el de Ana María Acevedo, una chica de 19 años, pobre y madre de tres hijos, a quien le diagnosticaron cáncer a fines de 2006 y poco después se enteró de que estaba embarazada. Los médicos se negaron a hacerle el aborto que pidió y también a hacerle quimioterapia para no afectar al bebé. El bebé nació a los 5 meses de gestación y murió a las 24 horas. Veinte días después, murió ella.
Objeción de conciencia y secreto médico
También el foco estará puesto en una práctica extendida en el ambiente, que es “la objeción de conciencia”, informó Tizziani, médica clínica y sexóloga y miembro, al igual que los otros siete médicos y enfermeros que dictarán clases, de la Red de profesionales por el derecho a decidir.
La “objeción de conciencia” (negarse a practicar un aborto porque su religión o su moral no se lo permiten’) “ha sido mal entendida y pareciera que cualquier persona puede ampararse en ella. La realidad es que sólo pueden hacerlo los profesionales que están en relación directa con la práctica”, aclaró la profesional a Infobae. En consecuencia, podría el médico/a que realiza la pràctica, no quien recibe la primera consulta.
“Una cosa es ser objetor de conciencia y otra cosa es ser obstaculizador. Muchos no saben que la persona que está obstaculizando la práctica puede ser sancionada”, puntualizó Tizziani, quien trabaja en el Hospital Roque Sáenz Peña, en Rosario. El ejemplo es una psicóloga de Santa Fe, a quien le suspendieron la matrícula por haber convencido a una niña de 11 años de que no abortara. La niña tiene un retraso madurativo y había sido violada por su padrastro. El bebé fue dado en adopción.
Otro tema será el “secreto médico”, para lo cual se apoyarán en en el ´´Caso Belén``, una joven de la provincia argentina de Tucumán que llegó al hospital con una hemorragia y los médicos de guardia la denunciaron. Pasó más de dos años detenida bajo la acusación de “homicidio doblemente agravado por el vínculo y alevosía”.
Atención integral
El segundo módulo se llamará “Atención integral del aborto”, en el que se explicará que en los lugares donde se garantiza la interrupción legal en la Salud Pública el aborto desciende, para combatir la fantasía que sostiene lo contrario. Se calcula que en Argentina se hacen entre 350.000 y medio millón de abortos clandestinos por año.Y que 1 de cada 5 mujeres que muere en el proceso de gestación es a causa de un aborto inseguro.
También se les enseñará a los futuros médicos/as cómo abordar a la paciente embarazada que llega a la consulta. “Que la primera pregunta sea cómo se siente en relación a ese embarazo, no felicitarla directamente. Esto permite habilitar el espacio para evaluar si le está pasando algo. Tal vez su pareja la viola y eso enmarca dentro de las causales de aborto no punible y por no saber preguntar pasa de largo”, aclaró Tizziani.
En el tercer módulo se desarrollarán las “Técnicas y procedimientos, tanto farmacológicos como quirúrgicos”, o sea el procedimiento con la pastilla Misoprostol y la aspiración manual endouterina.
El último módulo se llamará “Consejería post interrupción legal del embarazo”, que tiene por objeto prevenir otro embarazo no deseado, haciendo ecografía de control, evaluando qué método anticonceptivo es el mejor para una mujer en particular e indagando si ella no está siendo víctima de alguna situación de violencia.