Ideas para construir las noticias
Las palabras construyen sentidos, sobre todo las emitidas desde los medios de comunicación. La utilización de un lenguaje inclusivo no siempre está presente en los medios por desconocimiento, por falta de tiempo, de espacio –sobre todo en titulares o zócalos televisivos-, por querer generar impacto. Muchas veces por la edición de notas a cargo de profesionales que desconocen que cuando no se utilizan las palabras adecuadas también se vulneran derechos.
Contexto
El abuso, la explotación, la trata de un niño, niña o adolescente no son hechos espontáneos. Hay una historia para contar anterior al hecho, una realidad social, cultural que debe estar presente en las noticias.Y también es fundamental un seguimiento del o los casos.
No hay que dejar de lado a los explotadores y abusadores. Las víctimas no son responsables de su situación, hay una o varias personas que lo son y el periodismo debe colocarlos en el lugar que corresponde.
El delito de la trata de personas es el tercer negocio ilegal más rentable, junto con el de las armas y el narcotráfico. Las redes de trata funcionan con impunidad a través de las fronteras de los países o al interior de los mismos. Muchas veces implican la connivencia de autoridades o fuerzas de seguridad, por lo que es muy importante brindar condiciones de seguridad y anonimato para las víctimas cuyos derechos el Estado debe restituir.
Otro aspecto fundamental al momento de escribir una nota o hacer una cobertura sobre un caso de abuso, es la incorporación de estadísticas confiables que permitan dar un contexto para comprender la magnitud e importancia de la problemática.
Además es importante dejar de lado los estereotipos de género, que incluyen parámetros de belleza y de éxito en los que se hace una sobrevaloración del cuerpo y se fomenta una sexualización temprana de niñas.
Imágenes
Las imágenes prevalecen en los medios de comunicación. Son un lenguaje en sí mismas en un periodismo multimedial, donde los formatos se complementan.
Fotografiar o filmar a un niño, niña o adolescente en situación de víctima daña su dignidad y le ocasiona secuelas a futuro que pueden ser imborrables. En aquellos casos en los que esta exposición esté justificada, es indispensable tomar todos los recaudos para proteger su identidad. Algunas opciones son: mostrarlos de espaldas, utilizar sombras de sus siluetas, efectos de distorsión de todo su cuerpo, planos cortos (sólo sus manos o sólo sus ojos o sólo la boca).Evitar la superposición de estos planos de manera que no sea posible armar un“rompecabezas” con las imágenes; identificar sus zapatitos; ilustrar con juguetes, como muñecas y osos de peluche rotos.
Mostrar el entorno de un niño o una niña víctima de abuso o explotación puede ser útil para contextualizar la nota. No obstante, es un recurso que mal usado podría develar la identidad de la víctima a la que se debe proteger. Mostrar a sus padres, parientes, maestros, vecinos, la escuela en la que estudia o la casa donde habita, facilita su identificación y la pone en peligro, sobre todo en situaciones de trata y explotación comercial.
La facilidad y el ansia de ‘primicia’ no deben llevar a vulnerar derechos.
Fuentes
Como en toda cobertura periodística, la diversidad y pluralidad de fuentes enriquece la nota, considerando que deben ser especializadas en derechos de niñez y adolescencia y en género, tanto de sectores académicos como profesionales de distintas disciplinas y organizaciones sociales.
Cuando hablamos de violencias hacia niños, niñas y adolescentes se destierra el axioma periodístico de dar voz a todas las personas, porque no se puede dar voz al abusador, explotador o tratante, y mucho menos sentar a víctimas y victimarios juntos en una entrevista. Si los responsables editoriales del medio exigen tener la voz del abusador, la víctima debe saber que eso sucederá.
La voz de los poderes ejecutivos es esencial cuando se trata de derechos de niños y adolescentes porque son los principales garantes, sin embargo, es importante evitar recurrir siempre a las mismas fuentes. Si se privilegia la versión policial de los hechos, se obstaculiza el tratamiento del tema como fenómeno psicológico y social complejo.
Los datos estadísticos son tentadores para cualquier cobertura y válidos para encuadrar las notas, sin olvidar que cada número se refiere a un niño, niña o adolescente.
Coyuntura
Cuando una noticia sobre abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes, trata o explotación sexual llega al periodismo, brinda la oportunidad de volver a colocar el tema en la agenda mediática, con el contexto que muestre que no se trata de ‘´un caso más’`: es una violación de derechos reiterada que necesita del debate público y de las acciones estatales adecuadas.
Un enfoque integral, que utilice temas de apoyo en torno a la historia principal, le dará mayor potencia informativa a la cobertura. Es la oportunidad para revisar cuales con las políticas públicas ausentes, interpelando al Estado, y cuales las que previenen los delitos sexuales contra la niñez y la adolescencia y contienen a las víctimas.
Las buenas noticias
Informar sobre la violencia sexual en la niñez y adolescencia también incluye introducir notas que visibilicen historias de superación, por ejemplo iniciativas estatales o de la sociedad civil o de sobrevivientes de violencia sexual. Hay soluciones y alternativas, y las noticias también pueden ser buenas y reparadoras.