Renta Básica Universal: ¿adelanto o regresión para las mujeres?
La idea de una Renta Básica Universal se discute en el mundo y Uruguay está incluído. El debate en general está centrado en cuestiones económicas, de oportunidad y posibilidad. Menos se habla de que debe ser contemplada desde la perspectiva de género, par
Se entiende por Renta Básica Universal (RBU), en sentido amplio, un ingreso pagado por el Estado a cada miembro de pleno derecho de la sociedad, incluso si no quiere trabajar de forma remunerada, sin tomar en consideración si es rico o pobre o, dicho de otra forma, independientemente de cuáles puedan ser las otras posibles fuentes de renta y sin importar con quien conviva. Análogo con el derecho ciudadano al sufragio universal, no impone condiciones adicionales a ciudadanía.
El programa del Frente Amplio contempla la Renta Básica Universal desde 2004. Se discutió en un seminario organizado por el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) en 2008 y en 2017 la Escuela de Gobierno del Parlamento, que preside la diputada del Movimiento de Participación Popular (MPP) Lilián Galán, organizó un Foro a su respecto.
La idea no es una novedad. Por citar solo algunos de los antecedentes, ya estaba presente en la sociedad ateniense como condición para la democracia. Thomas Paine la propuso en su publicación sobre Justicia Agraria y en 1995 hizo lo propio Philip Von Parade en el entendido de que se trataba de un elemento de creación de ciudadanía porque da libertad y es justa.
Opiniones generales
El sociólogo Christian Mirza informó en el reciente foro, que son pocas las experiencias prácticas: la de Alaska basada en la renta del petróleo y una experiencia acotada a los desempleados de Holanda que recién empieza, son algunas de ellas.
Se argumenta a favor de la RBU que asegura la existencia material de las personas, cosa que no hacen ni el trabajo remunerado ni tampoco las transferencias o la protección social.También permitiría más libertad para desarrollar intereses personales, recreación, creación, educación, participación. Es una simplificación de las transferencias monetarias, disminuye las burocracias sobrefocalizadas y permite reorientar a los técnicos; todos los ciudadanos y ciudadanas tendrían derecho a recibirla por el mero hecho de serlo. Un enfoque ultraliberal la propugna como un elemento de bienestar en el mercado, que permitiría que no disminuya el consumo al desaparecer empleos; desde la izquierda española y brasilera se la plantea como instrumento dentro los parámetros del Sistema de Protección Social.
Para Mirza, las objeciones a la RBH son culturales, ya que a su juicio no hay impedimento fiscal: se alega que puede haber una fuga del mercado laboral, tentación al ocio y obstáculos a la movilidad social. La reducción del clientelismo y la transparencia de las políticas sociales serían argumentos a favor.
El diputado Pacha Sánchez (MPP), afirma que ``Tenemos la responsabilidad de evitar que la gente se muera de hambre y erradicar definitivamente la pobreza medida por ingreso. Hay que discutir la RBU con las políticas fiscales para captar la riqueza concentrada``. Aclara que no sirve una renta elemental que no cubra la línea de pobreza, por lo cual su costo es importante. Cree que habría que pensarla por lo menos para los menores de 18 años y las jefas de hogar.
El licenciado en Economía Gonzalo Sala, coincide en que