Aplicación de Ley 19.172: TRES MIRADAS Y UNA MISMA VISIÓN
Apesar de todas las complicaciones anteriormente anunciadas, tanto Julia Galzerano, Gustavo Robaina como
Bruno Calleros coincidieron en que la Ley 19.172 significa mun hito en la historia uruguaya en materia de derechos. La doctora declaró que lo ocurrido la semana pasada significó una nueva posibilidad de acceso.
“Esta es una cuarta etapa de la aplicación de la Ley, -el momento del cannabis medicinal- antes la ley apuntó a lo recreativo: se habilitó el autocultivo, la creación de clubes y el expendio en farmacias”, agregó.
Además, manisfestó que “todos los uruguayos vieron con expectativas el expendio en farmacias, y hubo una buena respuesta: no hubo problemas y el stock se agotó. Esohabla de que los uruguayos tuvieron una reacción diferente a lo que se esperaba”.
Por su parte, Gustavo Robaina afirmó estar de acuerdo con la facultativa y expresó que se está ante un momento crucial de la vida del país.“Esta ley, aprobada el 10 diciembre de 2013, significó una respuesta a la demanda de la ciudadanía. Además el gobierno se comprometió con la iniciativa y decidió no seguir reprimiendo a los usuarios de cannabis, lo que hizo, por tanto, fue comenzar a dudar sobre la justificación, poco argumentada, de su prohibición.”, indicó.
A su vez, manifestó que luego de 60 años de prohibición, actualmente la sociedad tomó conciencia de que hay otras opciones para tratar el tema. En ese sentido, Robaina recordó la decisión que tomó el expresidente
Mujica, quien dijo que el narcotráfico le había ganado al aparato represivo “y lo único que estamos haciendo es llevando presos a la gente pobre”. Asimismo explicó que ignorar esa realidad significa altos costos para el país, y que recién ahora la sociedad comienza a reflexionar sobre las implicancias del narcotráfico.
“Estos fenómenos no ocurren solo en Uruguay, sino que suceden en toda Latinoamérica y México ha sufrido su versión más vergonzosa: la renuncia del estado en el ejercicio de la autoridad al ser corrompido por la influencia del narcotráfico. Por tanto, ¿cuánto más va a durar este plan de represión, cuándo se acabará la justificación de encarcelar ciudadanos por esta causa? No olvidemos que la situación actual es solo un experimento, una iniciativa que no ha funcionado”, explicó el especialista.
En términos generales, Robaina declaró que es de suma relevancia hacer una reflexión sobre qué significa que un país tan pequeño como el nuestro adopte esta postura de legalización, la cual tuvo un costo geopolítico en el año 2013, cuando se generó una dura discusión con Cristina Kirchner y Dilma Rousseff. Además, recordó que en ese año se produjo un fuerte debate, a nivel internacional, con la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes “Con esta Ley, las personas ya no van a acceder más a marihuana paraguaya, la cual tiene una dudosa calidad”. (JIFE), el cual es el organismo internacional que regula las drogas.“Fue realmente duro y creo que sigue siendo unabatalla. Sin embargo las cosas se pueden hacer de forma distinta y tenemos que evaluarlas para reducir los riesgos y los daños. El hecho de que las farmacias hayan comenzado a vender un Cannabis con calidad controlada es un hecho histórico. Pensemos que es un producto con porcentajes de THC y CHD, claramente delimitados.
Además, las personas ya no tienen que ir a zonas alejadas, en las cuales los individuos han sido víctimas de violencia.
Ahora pueden consumir con total seguridad”.
En la oportunidad, advirtió que las bocas producen otro efecto negativo: el de góndola, porque, en esos lugares, el narcotraficante le propone al usuario no solamente el cannabis, sino que otras sustancias, tal es el caso de la cocaína o la pasta base.
“Creo que tenemos que pensar en la gente. Con esta Ley, las personas ya no van a acceder más a marihuana paraguaya, la cual tiene una dudosa calidad. Antes, cuando se consumía este cannabis, no se sabían cuáles eran los compuestos químicos que tenían”. Por su parte, Calleros se mostró muy positivo ante los números que se han presentado en los últimos días.“Hay mucha receptibilidad y efectividad en nuestra sociedad. Al día de hoy tenemos 7.000 registrados, por lo que en 45 días se registraron 5.000 y, en menos de una semana, 2.000 más. Eso nos da un primer parámetro: el nivel de aceptación, más allá de las discusiones previas de si el efecto era adecuado o no, ha sido muy bueno. Por supuesto, hay que tener en cuenta que estas dos primeras variedades van a evolucionar y que están pensadas para un amplio espectro de ciudadanos”. “Creo que todo esto está demostrando que la sociedad uruguaya es responsable y que puede construir políticas alternativas. Además, es una acción de inclusión y de reconocimiento de que tengo el derecho de hacer con mi cuerpo lo que me parezca en función de que no afecte la libertad de otras personas”.
El posible apoyo político para el cannabis medicinal Según Robaina, todos los partidos políticos están de acuerdo con la implementación del cannabis medicinal. Este conocimiento se produjo, en palabras del investigador, en una presentación que realizó Monitor Cannabis en el Parlamento el día 10 de julio, junto con la doctora Raquel Peurabe y Julia Galzerano, en la Comisión de Adicciones. “Quiero hacer un paréntesis para decir que hemos tenido el acuerdo de todos los partidos políticos, porque este tema tiene el mayor apoyo popular, mucho más que el uso recreativo o que otras políticas que se han implementado.
Estamos hablando de que, en una de las ultimas mediciones de opinión publica, este tema tenía el 70% de apoyo”, explicó.
Por tanto, Robaina entiende que este tema tiene dos aspectos positivos: el apoyo de todo el sistema político y una opinión publica favorable.“Todos sabemos lo que tenemos que hacer:
Uruguay, después de implementar las farmacias, ha perdido los compromisos que tenía con la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes
(JIFE). Por tanto, tenemos que sacar al cannabis de la lista uno y debemos cambiar la normativa para permitir que haya innovación en el país y productos a nivel nacional”.
Además, afirmó que es necesario capacitar a los médicos y al personal de salud para que puedan diagnosticar e indicar el tipo de cannabis requerido según la situación del paciente.“Sabemos que puede haber una alternativa, que es la de las especialidades vegetales, que no son consideradas medicamento sino que, al igual que la homeopatía o que otros productos que se venden de forma legal, y que tienen un registro del Ministerio de Salud Pública, el cannabis podría llegar a ser ese tipo o sino podemos utilizar la receta magistral, tal como lo hizo Colombia.
Por tanto, estamos llegando a un diagnostico, se sabe qué es lo que debemos realizar: lo único que falta es hacerlo”.