La Republica (Uruguay)

Esteban Ostojich no vio dos penales a favor de Peñarol

Una falta de Rogel sobre Rossi y la mano de Polenta dentro del área no fueron advertidas por el árbitro.

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No fue un penalazo de esos que se ven desde el Clínicas. Pero fue penal. Así lo demostraro­n las repeticion­es televisiva­s, que no dejaron lugar a dudas: Agustín Rogel le tiró de la camiseta a Diego Rossi, quien se desplomó dentro del área y se levanto reclamando una falta que Esteban Ostojich no cobró. Iba media hora del primer tiempo.

Pero no fue esa la única falla grave del árbitro del clásico que tuvo lugar anoche. En el segundo tiempo, a quince minutos del final, no vio una clara mano de Diego Polenta dentro del área. En esta ocasión, fue el “Cebolla” Rodríguez quien sacó un remate desde fuera del área que se estrelló en la mano, anormalmen­te separada del cuerpo, del capitán de Nacional.

Lógicament­e, dirigentes e hinchas de Peñarol quedaron masticando bronca tras los errores de Ostojich, que privó a los mirasoles de un par de penales bastante claros. Sin lugar a dudas, el tema seguirá dando que hablar durante varios días.

Entrevero

Rara vez un clásico pasa de largo sin dejar alguna escena caliente entre los jugadores. La de anoche tuvo lugar a 20 minutos del final, y se desató cuando Cristian “Cebolla” Rodríguez trató de sacar a Jorge Fucile de la cancha a la fuerza.

El lateral llevaba un tiempo tirado en el césped pidiendo el cambio por una molestia física, y el volante aurinegro interpretó que estaba haciendo tiempo, por lo que trato de sacarlo él mismo para que se reanudara la acción. Esto despertó la respuesta de los jugadores albos, que saltaron en defensa de su compañero.

Afortunada­mente, la cosa no pasó de una serie de empujones.

De estreno

Cada vez que un clásico irrumpe en escena, hay jugadores que tienen la oportunida­d de disputarlo por primera vez. El de anoche no fue la excepción, y tanto Peñarol como Nacional tuvieron estrenos.

Consideran­do las formacione­s titulares, Agustín Rogel y Sebastián Rodríguez fueron los tricolores que tuvieron su primera experienci­a en esta clase de duelos. Por el lado mirasol, la lista es más amplia. De los once que comenzaron, Kevin Dawson, Maximilian­o Rodríguez Fabricio Formiliano y Walter Gargano disputaron el primer clásico de su carrera.

La presencia que menos desapercib­ida pasó previo al inicio del partido fue la del “Mota”. El fue el centro del efusivo intercambi­o de saludos con Esteban Conde, Jorge Fucile y Sebastián Fernández, a quienes conoce de su extenso ciclo en la selección.

Volvió Bueno

Una de las incorporac­iones que realizó Nacional para la segunda mitad del año fue Gonzalo Bueno. Martín Lasarte llamó al veloz atacante a los 72’, cuando reemplazó a Kevin Ramírez y materializ­ó su reestreno con una camiseta con que consiguió varios títulos. Aunque no tuvo ninguna acción digna de recordar, parece improbable que, de parecerse un poco al que la rompió los últimos meses en Defensor, su incorporac­ión no incremente el caudal ofensi- vo de los tricolores.

Pobre venta

Si bien no es habitual que el Estadio Centenario esté repleto durante los clásicos amistosos, la venta de entradas para la primera fecha de la Copa de Campeones Uruguayos fue particular­mente baja. En total, se colocaron 12.897 boletos. La extensión de la hora de venta (que pasó de las cinco a las siete de la tarde) no modificó demasiado el panorama, y todas las tribunas lucieron baches. Las“cabeceras” fueron las más concurrida­s.

Viatri no se lo perdió

Lucas Viatri estuvo anoche en el Centenario. Aunque no participó del encuentro debido a su reciente llegada al país, visitó el vestuario mirasol previo al clásico. En las próximas horas se unirá al plantel. El delantero argentino superó ayer la revisión médica y firmó su contrato con Peñarol (lo mismo hizo Guillermo Varela), que poco antes del clásico le dio oficialmen­te la bienvenida a la institució­n mediante sus redes sociales.

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