Areco encabeza un “proyecto serio” para resucitar el básquetbol en Peñarol
Víctor Hugo Berardi participó en su creación, que se produjo a mediados de 2012.
P asaron más de 20 años desde que Peñarol compitió en básquetbol por última vez. Tras aquel febrero de 1997, un club que supo ser campeón federal y Sudamericano está dormido.
Con la intención de resucitarlo, el Movimiento 2809, liderado por Marcelo Areco, elaboró un proyecto para lograr que Peñarol regrese al básquetbol. Mucho tuvo que ver en él un emblema del deporte nacional,Víctor Hugo Berardi, quien falleció hace dos años.
A un par de semanas del lanzamiento oficial de un proyecto, que “Si no ganamos las elecciones, también va a estar a disposición del club”, Areco charló con TRIBUNA sobre el motivo de su gestación, la viabilidad y la respuesta de los socios.
La génesis ¿Qué los llevó a impulsar este proyecto?
En el 2012 me empecé a reunir con Víctor Hugo Berardi y le plantee la idea de que Peñarol debía volver al básquetbol. Tuvimos varias reuniones, y yo le había llevado un boceto que la verdad le dio gracia. Me dijo ‘la verdad, si no te lo tomás a mal me gustaría hacerlo yo’ (risas). Y al cabo de una semana me trajo el proyecto.
Empezamos a avanzar y por razones obvias de su salud se detuvo el proyecto. Después Víctor se fue, y obviamente eso paró un tiempo las cosas. Hace más de un año y medio lo retomamos. Hablamos con el hijo de Víctor y con el profesor Mena, que había participado de las reuniones, para que validaran la continuidad.
Junto con otra gente del básquetbol, no puedo decir que terminamos el proyecto porque ya estaba terminado, pero le dimos otra perspectiva. La metodología, el desarrollo de las formativas, la escuelita. Hay tres directores de escuelitas de equipos de primera división que están colaborando. Hay dirigentes trabajando, un economista enfocándose en la parte económica. Hay una persona muy versada en el tema de seguridad encargándose de esa área. En definitiva, completamos el proyecto en todas sus fases.
Esperamos para largarlo en este momento porque sabíamos que no había buen ánimo en el club, o por lo menos de este presi- dente, para incorporar el básquetbol a Peñarol.
¿Cuáles serían los primeros pasos para ejecutar el proyecto?
Uno tiene que construir una pirámide correcta para que no se caiga.Y la base siempre tiene que ser más ancha. Estamos hablando de un proyecto en serio. El plan para el primer trienio, es enfocarse el primer año en la escuelita, el segundo en las tres categorías de abajo de formativas, y el siguiente año las otras tres.
Después el club dirá si podemos acelerar o debemos retrasar los tiempos. ¿Por qué?, porque para competir, son necesarias las formativas. No podes competir sin ellas.También necesitas instalaciones apropiadas y habilitadas, y Peñarol hace muchos años dejó de ser un club de básquetbol, y también eso implica ir acomodando la estructura.
A partir de ahí, el tiempo dirá. La idea de todo esto es que el básquetbol vuelva para quedarse, con una base sólida. La finalidad es volver a competir en primera y ganar, que es lo que manda la historia de Peñarol.
El plan entonces es, eventualmente, luchar por cosas importantes, y no volver al básquetbol porque sí…
Justamente. Es lo que nos manda la historia. Pero para que eso pase debemos tener un proyecto serio, que lo tenemos, que contemple todos los aspectos: teórico, económico, la metodología, la capacidad de la gente que integra el proyecto, la seguridad, etcétera.
Debemos hacer gestiones dentro del club, después de ganar las elecciones, en materia reglamentaria. Formar una Comisión de Básquet. Hay una cantidad de cosas por hacer. La buena base de formativas, recomponer la estructura y a partir de ahí ponernos la meta de volver a primera división y ser campeones.
La viabilidad y la respuesta del socio Muchos piensan que Peñarol no juega al básquetbol porque no es viable económicamente, ¿les dirías que están equivocados?
Hay una viabilidad económica muy clara. Hoy Peñarol tiene muchísimos socios. Además, actualmente existe un elemento que no jugaba cuando el club competía en el básquetbol: la televisión. Imaginate que si Peñarol estuviera jugando en DTA, al menos la mitad de los peñarolenses estaríamos pegados a la pantalla las noche que juega. El peso de la camiseta vale muchísimo más.
Hay muchas posibilidades de sustentar un proyecto de básquetbol. La preocupación en este momento pasa más por el tema de la seguridad, pero está contemplada con una persona que es sumamente capaz.
¿Con qué respuesta de los socios se encontraron?
Las dos veces que lo planteamos en redes, fuimos tendencia. Eso muestra, e incluso lo medimos, que el impacto de la noticia fue increíble. El 6 de setiembre vamos a hacer un lanzamiento en el Hotel Paladium a las 19.30 horas, donde se presentará el proyecto, va a haber figuras y se va a invitar a la prensa. Va a ser el lanzamiento oficial de un proyecto que, si no ganamos, también va a estar a disposición del club. No es una condición que gane el 2809 para que se lleve a cabo.
¿Entonces la vuelta al básquetbol no depende de que el 2809 gane las elecciones?
Depende del triunfo porque las otras agrupaciones nunca dijeron ni hicieron nada al respecto. Acá una cosa es decir “deberíamos volver al básquetbol”. Otra es trabajar durante años con cinco comisiones, de seguridad, económica, metodología y demás.
Estudiamos la viabilidad y la forma de ejecutar el proyecto. Entonces, si nosotros ganamos, sabemos cómo hacerlo, y somos quienes realmente tuvimos la voluntad de hacerlo. Pero los proyectos del 2809 siempre están a disposición del club, no están sujetos a resultados electorales. Siempre ha sido así.