UTE fue reconocida por su política de inclusión en todo el país
CELADE reconoció el trabajo del ente regularizando el servicio eléctrico a familias de contexto vulnerable.
UTE recibió el Premio Nacional a la Excelencia Ciudadana que entrega el Centro Latinoamericano de Desarrollo (CELADE) por su tarea en la regularización del servicio eléctrico en hogares de contexto socioeconómico vulnerable.
Esta labor, que en UTE es coordinada por la Subgerencia de Atención Comercial Social, se une a la de otros organismos y favorece la inclusión social de miles de familias que tienen dificultades en el acceso a servicios básicos, tanto en Montevideo como en el Interior.
Desde 2013, el ente ha regularizado unos 11.000 suministros fundamentalmente en asentamientos urbanos de todo el país. En lo que va de 2017 son 3.500 los hogares que han accedido a la energía eléctrica y se espera que sean 4.550 al finalizar el año. Un aspecto fundamental de la política de UTE es la sostenibilidad del servicio, para lo cual se desarrolla una batería de acciones en conjunto con los vecinos involucrados. Esto ha permitido que hoy el 92% de quienes acceden a la electricidad se mantenga dentro del servicio regular.
Al recibir el premio, el presidente de UTE Gonzalo Casaravilla destacó que los servicios públicos como la energía eléctrica, el agua potable o las comunicaciones son “derechos inherentes a la ciudadanía” y agregó, en el caso de la electricidad, que con la regularización se consigue un elemento central que debe tener este servicio: la seguridad. “No es admisible que una persona entre a su hogar y corra riesgo de electrocución”, dijo Casaravilla.
Atribuyó los resultados obtenidos a la iniciativa de los propios vecinos y a la gestión de los agentes comerciales y asistentes sociales de UTE, que apoyan a los barrios. Recordó, además, que durante los últimos dos años el ente no ajustó las tarifas para las poblaciones más vulnerables. “Eso nos va ayudando a tener esa condición de cambio, esa inclusión, que tiene que ver con un cambio cultural y de hábitos”, consideró.
Inclusión y distribución de la riqueza
Señaló Casaravilla que las empresas públicas trabajan en la mejora de infraestructura, en inversiones, en mejoras de gestión, pero que todas ponen especial esfuerzo en la inclusión. “Se ha procurado dar igualdad de oportunidades, servicios sin exclusión a todos los habitantes del país”, enfatizó.
“En particular, en lo referido a servicios eléctricos, la inclusión social pasa también por llegar a completar la electrificación rural”, añadió el titular de UTE. Al respecto indicó que la energía eléctrica cuesta lo mismo al usuario en un centro poblado que en el paraje más remoto, y remarcó que esto es así porque UTE es una empresa pública que cumple un rol social.
“Las empresas públicas son una palanca formidable para generar condiciones de equidad social y redistribuir la riqueza. La tarifa eléctrica ha sido siempre la misma en todos los puntos del país y es mucho más caro entregarla en medios rurales que en una ciudad densamente poblada. Eso es inclusión social, eso es distribución de la riqueza”, apuntó.
Al momento de ser entregada la distinción a UTE, Casaravilla pidió la presencia de la directora Cristina Arca y de los funcionarios responsables de las tareas necesarias para regularizaciones de servicios en zonas carenciadas.