Lucrecia Martel: “No puedo avalar con mi película las fantasías violatorias”
Después de nueve años fuera de los cines, la directora de cine argentina Lucrecia Martel estrenó ``Zama``, basada en la novela de Antonio Di Benedetto, sobre un funcionario colonial español que sufre la angustia de la espera en las costas bravas del río Paraná, llenas de mosquitos y de víboras, a fines del siglo XVIII. Algunas escenas de la historia fueron eliminadas y la cineasta explicó al diario argentino ``La Nación`` el motivo.
En la última creación cinematográfica de Lucrecia Martel no se ve la escena cuando Zama, el protagonista de la historia de Di Benedetto y por tanto de la película, tiene sexo con una mulata, después de haber herido a unos perros con su espada.
Martín Mazzini, quien la entrevistara para el diario ``La Nación``, lo advierte e indaga al respecto. Martel es muy clara en su respuesta:“La saqué aunque a muchos compañeros les parecía buena. Pero si vivís en un país en el que cada día matan a una mujer y filmás una escena de violencia contra una mujer, aunque puedas dar muchos matices sobre las circunstancias, es intolerable. Me parecía imposible que no remitiese a una idea errada: que la violencia sobre una mujer tiene razones poéticas para ser cometida. Para una mujer, cuyo cuerpo es la escenografía de esa situación, es muy difícil tener ganas de hacer lecturas sobre eso”.
La directora también se adelanta a los posibles cuestionamientos: “Dirán que con esa posición políticamente correcta se terminaron las situaciones de violencia de género en mi cine. Hasta que esto mejore, sí. No podemos avalar con discursos públicos escenas que abonan la fantasía violatoria de los hombres. No he visto una sola película, por más que el resultado sea el desprecio por la persona que abusa de su poder, que en el fondo no esté realizando una fantasía violatoria. Es lo que sucede con `Irreversible´: la elaboración que hace Gaspar Noé de la violencia me parece una porquería”.