Los nuevos capos
Desde su fundación, en julio de 2010, el Cártel Jalisco Nueva Generación se ha empeñado en posicionarse como el cártel de la droga dominante en territorio mexicano, y lo ha logrado a través de enfrentamientos violentos con las fuerzas de seguridad del Gobierno de dicho país, así como con sus enemigos, entre los que destacan Los Zetas y el Cártel de Sinaloa, quienes han visto mermado su poderío tras la captura de sus principales líderes.
Actualmente, con el control de 17 de los 32 estados de México, el CJNG lidera un poderoso imperio criminal que tiene sede en el estado de Jalisco, pero con grandes centros de distribución en ciudades como Juárez y Nuevo Laredo, desde los cuales se envían cantidades al por mayor de marihuana, heroína y cocaína a sitios como Los Ángeles, NuevaYork, Seattle y Atlanta, en EEUU.
El líder de esta agrupación es Nemesio Oseguera Cervantes, también conocido como 'El Mencho', un sanguinario lugarteniente de 51 años de edad que gusta de apostar dinero y decenas de kilogramos de cocaína pura en peleas de gallos, en su natal Jalisco. De acuerdo con la DEA, 'El Mencho' es uno de los fugitivos más buscados de EEUU y México, al igual que Ismael Zambada García, alias 'El Mayo', y Rafael Caro Quintero, quienes hoy día ostentan el liderazgo del Cártel de Sinaloa, tras la aprehensión y posterior extradición a territorio americano de su colega Joaquín "El Chapo" Guzmán.
De manera extraoficial, se sabe que la llegada de esta organización al norte de México se debió a una alianza entre miembros del CJNG e integrantes del Cártel de los hermanos Arellano Félix, quienes durante décadas controlaron la venta y comercialización de estupefacientes en Los Angeles, hasta consolidar la ruta de las drogas del Pacífico en 1980, con la ayuda de Amado Carrillo Fuentes, alias 'El Señor de los Cielos'.
Algunos reportes de la Agencia Antidrogas de EEUU (DEA, por sus siglas en inglés) aseguran que el CJNG distribuye metanfetamina y cocaína a lo largo de un corredor de más de 10.000 kilómetros situado en el océano Pacífico, en una zona no especificada que se extiende por EEUU hasta llegar a Canadá. Asimismo, la DEA aseguró que esta organización opera en Asia y Oceanía desde el año 2014.
El informe más reciente de este organismo estadounidense también detalló que los cárteles de la droga colombianos, tales como el Clan del Golfo y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), "enrutan los cargamentos de cocaína y heroína a través del Caribe, donde las bandas locales los reciben y los transportan a México, para su comercialización en EEUU".
En entrevista con la agencia rusa RT, Juan Carlos Silva, comisario de la División Antidrogas de la Policía Federal de México, detalló que la organización criminal de Jalisco cuenta con un "presunto adiestramiento militar por parte de las FARC, debido al tipo de artefactos que utilizan durante los enfrentamientos con elementos del Ejército mexicano, sin dejar de mencionar la capacidad armamentística con la que operan". Prueba de ello son los explosivos caseros conocidos como "papa", los cuales están fabricados con clorato de potasio, azufre, así como piedras, clavos y tuercas. Esta arma mortal es envuelta en papel aluminio y enrollada con cinta canela, y es utilizada por el CJNG como una bomba para dañar a sus enemigos, al igual que como una táctica de guerra para infundir miedo a los ciudadanos mexicanos.