Correa regresa a Ecuador a enfrentarse con Moreno
El expresidente de Ecuador Rafael Correa retornó al país en medio de un ambiente tenso para participar en una convención del partido oficialista, dividido entre sus seguidores y los del mandatario Lenín Moreno.
Correa llegó a la ciudad de Guayaquil (suroeste), donde cientos de simpatizantes se concentraron en el aeropuerto con carteles con la leyenda “Bienvenido Rafael”, mientras que sus opositores lanzaban consignas llamándolo “delincuente”.
La policía debió formar un cordón de seguridad para mantener la distancia entre ambos grupos, que se dispersaron horas después.
Estaba previsto que Correa, quien se radicó en Bélgica tras dejar el poder, apareciera por la zona de arribo internacional del aeropuerto José Joaquín de Olmedo de Guayaquil.
Sin embargo, debido a los enfrentamientos entre simpatizantes y opositores, Correa salió por un hangar ubicado fuera de la terminal aérea.
“Llegamos, Patria querida. Cansado pero feliz”, escribió en Twitter el exmandatario, quien gobernó durante una década la nación.
“Que nada nos quite nuestra alegría, ni siquiera los duros momentos que la Patria y la Revolución están pasando”, anotó en referencia a la severa pugna dentro del partido oficialista Alianza País (AP), ahora fraccionado entre ‘morenistas’ y ‘correístas’.
Estos últimos celebrarán su convención nacional el próximo 3 de diciembre en la ciudad de Esmeraldas (noroeste) con la presencia del expresidente, quien dijo en una entrevista con la AFP que la intención de la cita es “expulsar” del partido a Moreno, al que acusa de“traidor” y de gobernar con la derecha. Aliados en el pasado, Correa y Moreno se han convertido en rivales políticos y se disputan el control de AP, cuyos bandos han nombrado cada uno a su propia directiva.
El destino del movimiento es todavía incierto, pero varios analistas aventuran algunas hipótesis, entre ellas el nacimiento de un nuevo partido.
Correa “viene a hacer una encuesta de carne y hueso para ver cómo le va, qué tanta capacidad de movilización conserva y a partir de ahí todo puede cambiar”, dijo a la AFP el analista político Esteban Nicholls, de la Universidad Andina Simón Bolívar.
Para el catedrático, la presencia de Correa hace aún más importante la consulta popular planteada por Moreno, que busca, entre otras cosas, eliminar la reelección indefinida aprobada por el exmandatario.
“La situación de Correa va a ser saldada en la consulta popular, no tanto por el peso de las preguntas, sino porque se va a medir la capacidad que aún conserva de movilizar a las personas”y de canalizar votos a su favor, opinó Nicholls, quien no descarta en el escenario una asamblea constituyente.
Los seguidores del expresidente consideran que él llega a “poner orden” en el país. Correa “viene a poner orden y a demostrar que Lenín Moreno no es el Ecuador”, señaló a la AFP Isabel Zavala, quien esperaba al exmandatario.
Agregó que los correístas están “decepcionados de la traición y la falta de personalidad de Lenín” a quien no reconocen como su presidente por “aliarse con la derecha”.