Maldita inseguridad
Hoy todos hablan de la inseguridad, los medios de comunicación dedican gran parte de sus informativos a la crónica roja montando shows en los que narran, dibujan, maquillan, y alimentan la violencia que vive el país. Se ha confundido, maliciosa e intencionalmente, libertinaje informativo con“libertad de expresión”, que, justamente, está en el polo opuesto. Como decía Tomás Eloy Martínez: “Este periodismo sigue esforzándose por convertir a las víctimas en piezas de un espectáculo que se presenta como información necesaria, pero cuya única función es saciar la curiosidad perversa de los consumidores del escándalo”. Alimentan esa bestia que todos llevamos dentro, nuestra parte más miserable, porque el ser humano en líneas generales es miserable, luego, desmenuzando un poco, yendo a lo particular, puede llegar a ser otras cosas, incluso buena persona.Y es esa parte oscura del ser humano que luego va a destilar odio y ponzoña a las redes sociales. Allí, en ese mundillo, donde la opinión del más renombrado filósofo o premio Nobel de literatura queda en el mismo escalón que la de aquel que jamás ha tocado un libro en su vida ni se ha preocupado de instruirse acerca de lo que va a opinar, es donde se disemina el veneno de la ignorancia y el resultado se torna impredecible. El espectáculo que montan los medios es trasladado al llano, a las redes sociales, grupos de whatsapp, desde allí la peligrosa horda de los que escriben“ojo con h” hace su trabajo rastrero. Se monta un espectáculo que aparenta surgir desde lo bajo, pero está digitado desde arriba. La proliferación de violencia y el odio que incitan las redes sociales no es fruto de nuestras diferencias, sino que es fruto de nuestra más baja y oprobiosa ignorancia.
Consultamos a un renombrado grupo de sociólogos y sicólogos a los efectos de elaborar un test para detectar posibles violentos. Es importante mirarnos al espejo y analizar cómo somos nosotros, si somos buena gente, forjadores de una sociedad mejor o, por el contrario, somos unos tipos jodidos. En este test lo invitamos a hacer introspección y reflexionar acerca de qué tipo de persona es, si no esconde dentro un ser violento en potencia:
1) ¿Cuál es su hobby preferido? A) Coleccionar estampitas. B) Pintar grafitis.
C) Correr viejas a cadenazos.
2) ¿Dónde se reúne con sus amistades?
A) En la casa de un amigo.
B) En el centro.
C) En alguna casa abandonada o algún terreno baldío.
3) Cuando un amigo le hace una broma pesada, ¿usted cómo reacciona?
A) Se ríe aunque no le cause gracia.
B) Lo señala con el dedo y le dice: "La próxima te rompo la jeta".
C) Le dispara con un 38 a quemarropa sin mediar palabras.
4) ¿Qué le gustaría tener?
A) Una moto para ir a trabajar. B) Una chumbera para matar pajaritos.
C) Un revólver para salir a robar.
5) ¿Qué piensa hacer en la próxima edición de la Criolla del Prado? A) Ir a recorrer stands.
B) Ir a apedrear a los artistas mientras actúan en el escenario.
C) Esperar escondidos con sus amigos y cuando pase la gente que vuelve a pie del predio "sobarles bien el lomo" y afanarles todo.
6) ¿Quién es su ídolo? A) Ghandi.
B) Macri.
C) El Betito.
7) Su canción favorita es aquella que dice:
A) Pintarse la cara, color esperanza...
B) Quién se ha tomado todo el vino...
C) Mucho palo pa’que aprendan le van a dar...
8)Va a los cumpleaños de quince o casamientos a:
A) Divertirse.
B) Tomar y comer de arriba. C) Pegarle a los invitados y robarles los championes a los más chicos.
9) ¿Cómo le gustaría que lo llamen?
A) Carlos.
B) Cholo.
C) Pato feo, el capo del Comcar.
10) Usted sale a la calle a manifestar por:
A) La educación pública.
B) Que las Ceibalitas tengan acceso libre a páginas pornográficas.
C) Que liberen al“Pato feo”.
Resultado: Todas "A", usted es un buen tipo, manso como agua de aljibe.Todas "B", usted no es lo que quizá se diga la peor lacra humana, pero yo qué sé…tiene "algo" que no convence, igual prefiero tenerlo como amigo.Todas "C" es un peligro para usted mismo, es la propia baldosa suelta, porque todos lo esquivan.
Cómo disimular la violencia en fechas festivas
Se aproximan las fiestas tradicionales, son fechas en las que, así como afloran los sentimientos y alegrías, también salen a relucir viejas disputas y rencores familiares. Lo ideal es mantener la calma, no llegar a la violencia. Empero, si no puede contener la ira, al menos disimule para no contagiar violencia a los demás.
Por ejemplo, las suegras suelen ser un clásico motivo de sacar a relucir añejas disputas. No la golpee, y mucho menos la asesine delante de todos. Espere que sean las doce, y en el momento de mayor virulencia de los fuegos artificiales, disimuladamente, tome un arma de grueso calibre (se recomienda ya tener el arma escondida entre sus prendas) y le mete dos o tres tiros.Trate de hacerlo con calma y decisión, a los efectos de no fallar en el intento, hecho que podría acarrearle fastidiosos problemas legales. Luego esconda rápidamente el arma y empiece a gritar efusivamente:
-¡Feliz Navidad, feliz Navidad, feliz Navidad suegrita querida del alma!
Nadie sospechará de usted entre todo el bochinche de la pirotecnia, y el infortunio será adjudicado a la maldita inseguridad que reina en esta sociedad. Es aconsejable mantener una actitud de indignación para despejar cualquier duda sobre su persona.
No obstante siempre es recomendable no llegar a emplear la violencia física. Por ejemplo, en vez de atacar a su suegra, aproveche la fecha de vísperas de Navidad y ponga música bajoneante, onda José Feliciano y su clásico“Feliz Navidad”, o los Wawancó, para entrar en clima depresivo, y a las doce le regala un libro de Horacio Quiroga, delo por hecho que a más tardar las dos de la mañana, la vieja se suicida; nunca falla.
Consejo práctico para no parecer tan fachos
Siempre es bien visto en las redes sociales o grupos de whatsapp compartir fotos de negritos desnutridos de África. De esa forma cuando gritemos que a los menores infractores habría que matarlos a todos, pedir rifle sanitario, o que salgamos a insultar y maldecir a Fabiana Goyeneche, la fotito compartida del negrito africano nos servirá de excusa para defender nuestro inquebrantable espíritu humanista.
A mí no hay cosa que me indigne más que los pichis esos, delincuentes colibríes que habría que eliminarlos a todos de un plumazo. Hay que matarlos a todos, no aguantan nada, los dejas fuera del sistema por un par de generaciones y, de puro rencorosos que son, te salen matando por veinte pesos. Pero bueno, uno no puede decir nada de liquidarlos a todos porque siempre saltan los intolerantes de siempre a criticar lo que uno dice.
La inseguridad y la manija de los medios de comunicación
Yo era muy de enojarme todos los días con el periodista de la radio, entraba en un estado de cólera infernal cuando escuchaba la tergiversación que hacía de las noticias, cómo manipulaba los hechos. Me acostaba de noche escuchando los disparates y barbaridades sin fundamento que decía, echándole siempre la culpa de todo al gobierno.Y en la mañana lo mismo, me levantaba y el tipo dale que te dale, repitiendo una mentira tras otra, y situaciones fuera de contexto. Me fastidiaba mucho la impunidad con que mentía ese tipo, me daban ganas de reventar la radio contra la pared de bronca e impotencia.
Pero ahora ya no me molesta tanto, es más, reconozco que hasta me cae un poco simpático el periodista de la radio.Y bueno, qué querés, con la crisis que hay, encima este gobierno no hace más que mirar para el costado, mientras nos mata a impuestos para mantener vagos, ya no se puede ni salir a la calle con la inseguridad que hay, una bronca me dan estos comunistas, festejen uruguayos festejen...
Concluyo con un hecho muy importante que vi en la prensa el pasado jueves 30 de noviembre: leí “Búsqueda”, “El Observador” y “El País”, y en los tres decía“jueves 30 de noviembre”, una información sin manipular, me quedé contento, creo que no todo está perdido.