Restituyen la identidad a una hija de desaparecidos argentina, la nieta 127
La nueva nieta recuperada es hija de María del Carmen Moyano y Carlos Poblete y nació en 1977.
Las Abuelas de Plaza de Mayo de Argentina anunciaron hoy que encontraron a su nieta 127, hija de dos militantes de la guerrilla de Montoneros y nacida en cautiverio en 1977, durante la última dictadura militar argentina (1976-1983).
"Hace muy pocos días anunciamos la restitución de la nieta 126. Ahora cerramos el año de nuestro 40 aniversario con otra noticia feliz", dijo hoy en rueda de prensa la titular de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.
La nueva nieta recuperada es hija de María del Carmen Moyano y Carlos Poblete y nació en mayo o junio de 1977 en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), de Buenos Aires, donde funcionó el mayor centro clandestino de detención de la dictadura.
"Desde hace 40 años la hemos buscado, hemos luchado en conjunto ambas familias. La esperamos desde hace 40 años y a partir de ahora con los brazos abiertos", dijo Elsa Poblete, hermano de Carlos.
Elsa sostuvo que hay que darle a su sobrina "todo el tiempo que necesite para procesar la noticia".
"Está viva y hay que darle tiempo", destacó.
Sus padres se conocieron en la norteña provincia de San Juan y compartieron la militancia en la organización Montoneros.
Después de seis meses de novios, decidieron vivir juntos.
Entre abril y mayo de 1977, ambos fueron secuestrados en Córdoba (centro) y ella estaba embarazada de entre ocho y nueve meses.
La pareja, que permanece desaparecida, fue vista por sobrevivientes en el centro clandestino de detención La Perla, en Córdoba, y luego María del Carmen fue trasladada a la ESMA, donde dio a luz una niña.
De acuerdo con los testimonios de sobrevivientes de la ESMA, el parto fue atendido por el médico Jorge Luis Magnacco, recientemente excarcelado por haber cumplido ya dos tercios de su condena por delitos durante la dictadura.
La Unidad de Derechos Humanos de la provincia de Mendoza (oeste) llevó a cabo diferentes medidas con el objetivo de determinar si una mujer, anotada como hija propia de un matrimonio de esa provincia, vinculado al terrorismo de Estado, era hija de desaparecidos.
La investigación concluyó con el requerimiento de un juzgado de Mendoza de la prueba genética a la víctima, con la que finamente se corroboró que se trata de la hija del matrimonio Moyano-Poblete.