Hagobian: “La interna de la UE está trancando el acuerdo”
El licenciado en relaciones internacionales señaló que hay “temas sensibles”, como son los lácteos y las carnes, que aún no han sido resueltos. Explicó que Francia es el país que más ha presentado reticencias por ser productor de materias primas.
S ebastián Hagobian, licenciado en relaciones internacionales y participante del equipo de negociación del Mercosur en el acuerdo con la Unión Europea, habló con LA REPÚBLICA sobre los detalles de la negociación.
Según sus palabras, la gran mayoría de los capítulos ya están acordados, pero faltan los “sensibles”, que son, por ejemplo, el tema agrícola y carnes. “Esperamos exportar más, pero la propia interna europea con un Macron (presidente de Francia) creciendo, hace que la situación se dificulte. Francia está potenciándose y eso obviamente al Mercosur lo complica porque dicho país es productor de materias primas que compiten con nosotros. Por tanto, la interna de la Unión Europea es la que está trancando el acuerdo, por lo que primero tiene que dirimir sus problemas internos”.
Según sus palabras, es una “gran oportunidad para América Latina”, ya que es un acuerdo que posiciona en“muy buenos términos” a la región. Afirmó que la negociación siempre fue en “muy acelerada”.
Explicó, además, que el Mercosur actuó en forma “unida y coordinada”. Asimismo, señaló que “si no se llega a un trato, es muy difícil que la Unión Europea y la región lleguen a un acuerdo de acá a diez años”.
Cabe mencionar que Hagobian es miembro de la Comisión de Asuntos y Relaciones Internacionales del Frente Amplio y coordinador por el mismo tema en Asamblea Uruguay.
“No hay que tenerle miedo a las siglas, no es porque sea TLC es bueno o malo. Tenemos que saber utilizarlo en pos de negociaciones correctas, que no pongan en peligro el desarrollo nacional”.
¿Cómo definirías a este acuerdo?
Es una gran oportunidad para la región, ya que nos revitaliza. Nos parece que el Mercosur estuvo paralizado durante mucho tiempo por diferencias internas. Por tanto, que se logre firmar un acuerdo de estas características es plenamente positivo. Para Uruguay también lo es porque nos permite seguir abriendo mercados y poder posicionar nuestra producción con menores impuestos y aranceles.
Al día de hoy tenemos 170 mercados, pero cuando asumimos en 2005 solo accedíamos a 60. A pesar de que aumentamos la cantidad de mercados, solo el 30% de ellos tienen acuerdos preferenciales con nosotros, lo cual nos pone en riesgo con la competencia extranjera.
Entonces, lograr acuerdos de estas características son herramientas del comercio exterior. No hay que tenerle miedo a las siglas, no es porque sea TLC es bueno o malo. Tenemos que saber utilizarlo en pos de negociaciones correctas, que no pongan en peligro el desarrollo nacional.
¿Qué consecuencias tendría tanto para Uruguay como para el Mercosur?
Desde nuestra perspectiva es un pacto favorable, siempre y cuando se contemplen las demandas del Mercosur, principalmente con los productos agrícolas. Es importante recordar que somos nosotros los que más proveemos este tipo de mercadería. En términos generales, es un acuerdo que nos posiciona a nivel mundial en un mundo donde va rumbo al proteccionismo. Lograr un acuerdo bilateral es un eslabón positivo para el Mercosur, que estuvo inactivo durante mucho tiempo. Conseguir ingresar a la Unión Europea con menores aranceles para Uruguay es algo sumamente importante porque producimos calidad y no cantidad, pero la calidad es cara en todo el mundo. Si a eso le agregamos los aranceles y los impuestos, nuestra producción queda por fuera de los rangos de competitividad. Es por esta razón que llegar a un acuerdo sería netamente beneficioso para Uruguay.
Con respecto al Mercosur, hay consecuencias diferentes en función de los diversos países y realidades. Por ejemplo, Brasil y Argentina tienen una industria fuerte que proteger, la parte automotriz, por lo que hay varias cadenas esenciales que a ellos si les preocupan. Como en Uruguay no tenemos ese grado de industrialización (al igual que Paraguay) ese tema no nos preocupa e incluso sería beneficioso. Los productos europeos no competirían con los nuestros, salvo en la cadena de lácteos. Por tanto, los principales países latinoamericanos que ponen cuotas de riesgo serían Argentina. Brasil y
¿Crees que el tratado se firma este año?
Ese es un desafío. Debería estar firmado en 2018. Si no se acuerda este año, no se va a pactar porque solo quedan algunos capítulos sensibles que no deberían llevar mucho tiempo. En términos generales, hay determinados capítulos que ya están acordados. Por ejemplo, a mí me tocó estar en el equipo negociador del capítulo de facilitación del comercio, el cual está prácticamente acordado. Lo que falta es que se acuerden los demás capítulos para poder avanzar, porque en este tipo de negociación se acuerda todo o nada. Los temas más sensibles se dejan para el final, que son los más complicadas en acordar y los que más llevan tiempo, y son los faltantes. En otras palabras, la gran mayoría de los capítulos ya están acordados, pero faltan los sensibles. Lo que está tardando es el tema agrícola y carnes, que