“Cambio de posición de Trump no significa que sirva para Uruguay”
Según Coitiño, “la situación es ambigua”. “El gobierno uruguayo no tiene más opción que esperar”.
El 5 de enero de este año el gobierno de Trump amenazó a la floreciente legalización de la marihuana en Estados Unidos, lo que hizo que se pensara que el futuro en cuanto a este tema era incierto. Sin embargo, en un mes cambió de actitud: hace dos días el gobierno estadounidense se pronunció a favor de que los bancos manejen el dinero que proviene del mercado legal de cannabis. Esto generó diversas repercusiones en el gobierno uruguayo, quien ha llamado a la prudencia: se considera que es una “señal fuerte”, pero que es necesario “esperar” otros pronunciamientos.
En la misma sintonía, el integrante del grupo de investigación Monitor Cannabis, Mauricio Coitiño declaró a LA REPÚBLICA que desde el gobierno estadounidense no hay una “decisión clara y única”. “La situación es ambigua” y existen “dos bibliotecas, que hay que ver cuál es la que después efectivamente prevalece”. “Es todo muy reciente y basado en declaraciones. No tenemos un documento oficial de validez federal en Estados Unidos que diga que el paradigma del gobierno ha cambiado. Por tanto, estamos en un punto en que el que parece haber un enfrentamiento de posiciones y habrá que ver cómo eso se resuelve dentro del gobierno”.
Consideró que en caso de que este nuevo cambio en la administración de Estados Unidos se hiciera efectivo, podría “despejar” una parte importante de la “incertidumbre” que tiene el sistema de legalización uruguayo, ya que los problemas que surgieron el año pasado relacionados a los bancos estarían “solucionados”: Desaparecería el riesgo que alegan los bancos uruguayos de perder sus cuentas de corresponsalía con los bancos internacionales. Sin embargo, Coitiño no se mostró tan seguro en que un cambio en la actitud de la administración de Trump efectivamente se traduciría en un cambio para la situación uruguaya: “El hecho de que se resuelva este problema dentro de Estados Unidos tampoco quiere decir que se resuelva para los negocios que están fuera de ese país. Por tanto, son
asuntos ligeramente diferentes. Bien nos podría pasar que se resuelva la situación dentro de Estados Unidos y que se siga en una zona gris este tema en los bancos internacionales”. En la mejor de las hipótesis, explicó que habría una regulación “clara” para los bancos internacionales, lo que “despejaría” los problemas o riesgos para los inversores y los operadores del sistema de cannabis regulado en Uruguay. “Pero solo podemos hacer hipótesis. Hay que ver efectivamente qué pasa”.
“El cannabis en el país norteño está legalizado a nivel de muchos Estados pero no a nivel
federal, entonces por ahora no hemos avanzado mucho. Podemos decir que se abre una ventana de oportunidades en la medida que se ve que el gobierno de Estados Unidos está reposicionándose, pero todavía no tenemos un elemento claro y oficial”, agregó.
Lo que se tiene hasta el momento son dos posicionamientos: el del Departamento del Tesoro que pretende regularizar todos los negocios relacionados al cannabis y el del Departamento de Justicia, que quiere mantener las reglas que existían hasta ahora para que los fiscales persigan las actividades
relacionadas a la marihuana en aquellos Estados que la tienen legalizada. Cabe mencionar que el año pasado el Departamento de Justicia decidió revisar la guía que existía para los fiscales y la hizo caer, por lo que hay un “vacío” de cómo deben operar, según explicó Coitiño. “Estados Unidos ahora no tiene una política en torno a cómo se van a manejar los fiscales a la hora de perseguir el crimen. Además, cabe recordar que a nivel federal se sigue penalizado la distribución y la producción de cannabis”.
En términos generales, consideró que la “situación es ambi- gua”, ya que no hay una señal del gobierno federal sobre cómo va a controlar a los bancos que operan desde Estados Unidos hacia afuera y que son controlados directamente con la normativa federal. “El gobierno uruguayo no tiene más opción que esperar para ver si efectivamente tenemos nuevas reglas de juego y cuáles son”.