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Desde el dolor de cabeza, los ataques al corazón pasando por el embarazo.
Algunos mitos acerca del sexo se han convertido en reglas para muchas personas. Sin embargo, a menudo resulta que no tienen nada que ver con la realidad. Así, la típica excusa del dolor de cabeza para evitar sexo ya no es válida. Anna Magee, columnista de Daily Mail, intentó averiguar con la ayuda de los científicos qué creencias son reales y cuáles son totalmente falsas y elaboró una lista de los mitos más comunes, en los que, según ella, suelen creer incluso las personas inteligentes.
1. El dolor de cabeza es una buena excusa para no tener sexo
En el caso de las mujeres, el orgasmo podría incluso ayudar a curar el dolor de cabeza, lo que destruye la vieja excusa. La autora hace referencia a la investigación de un equipo de neurólogos de la Universidad de Munster, Alemania, publicada en 2013, que descubrió que más de la mitad de las personas con migrañas que tenían relaciones sexuales experimentaron una mejoría en los síntomas. Según los investigadores, el sexo desencadena la liberación de endorfinas, los analgésicos naturales del cuerpo, a través del sistema nervioso central, que podrían reducir o eliminar el dolor de cabeza.
2. El orinar antes de tener sexo disminuye el riesgo de contraer una infección
Según el urólogo de NuevaYork el Dr. David Kaufman, orinar antes de tener relaciones sexuales es la causa número uno de infecciones urinarias poscoitales.Según Kaufman, estas infecciones pueden ser provocadas por las bacterias empujadas hacia la uretra durante el sexo. Pero no orinar antes de tener relaciones sexuales significa que uno tendrá suficiente líquido almacenado en la vejiga para crear una corriente fuerte, por lo que es más probable que las bacterias sean expulsadas.
Por lo tanto, orinar después del sexo sí que puede ayudar, añade el Dr. Zaki Almallah, urólogo consultor en el BMI Hospital Edgbaston. “Orinar después del sexo significa que uno está eliminando cualquier bacteria que se haya alojado durante el coito en la uretra, lo que ayuda a minimizar las posibilidades de infecciones urinarias poscoitales”, explica Almallah, citado por la periodista.
3. La mujer no puede quedar embarazada durante el periodo
No hay momento en el que una mujer de entre 15 y 50 años no pueda quedar embarazada, asegura la Dra. Gillian Lockwood, ginecóloga consultora y directora médica de los Servicios de Fertilidad de Midland.
El momento más probable de que una mujer quede embarazada dura de tres a cuatro días alrededor de los días 18 o 19 del ciclo. Pero un buen óvulo liberado durante la ovulación tiene una vida útil de unos cuatro o cinco días y un espermatozoide sano tiene una capacidad fertilizante de hasta cuatro días, afirma Lockwood. Por lo tanto, aunque sea el final del ciclo, es posible que la mujer quede embarazada.
4. Tener sexo aumenta las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco
Los investigadores analizaron los historiales de salud de 536 pacientes con cardiopatías entre 30 y 70 años de edad y descubrieron que la actividad sexual no era factor de riesgo en ningún ataque cardiaco posterior.
Según el estudio, publicado en noviembre de 2017 en el Journal of the American College of Cardiology, solo el 0,7% de los pacientes informaron haber tenido relaciones sexuales una hora antes de sufrir un ataque cardíaco. Según Deitrich Rothenbacher, autor principal del estudio y presidente del Instituto de Epidemiología y Biometría Médica de la Universidad de Ulm, Alemania, “los pacientes no tienen que preocuparse y deben retomar su actividad sexual habitual.”
5. El sexo y el orgasmo pueden provocar el parto prematuro
Teóricamente, el sexo puede provocar el parto, pero el cuello uterino necesita estar preparado, explica el doctor Downey, citado por la periodista. El semen contiene unas hormonas llamadas prostaglandinas, que pueden suavizar el cuello uterino y estimular las contracciones.
Sus formas sintéticas se utilizan médicamente para provocar el parto. Por lo tanto, teóricamente, es posible que el sexo pueda acelerar el proceso, pero solo si la mujer está cerca de su fecha de parto. “El cérvix tiene que madurar y ser receptivo a las prostaglandinas y esto solo sucede cerca del final del embarazo”, explica el médico. Sin embargo, hay ciertas advertencias. Si el consultor médico dice que las membranas se han roto, si la mujer tiene placenta baja, si tiene gemelos o espera un bebé prematuro, se le puede aconsejar que evite tener relaciones sexuales incluso durante todo el embarazo, según el Dr. Downey.