Mujica a Lula: “La derecha nos quiere débiles y desunidos”
La plaza Internacional de Santana do Livramento, un ícono de la hermandad entre Uruguay y Brasil, fue escenario ayer de un acontecimiento histórico. Cuatro expresidentes de la izquierda progresista se reunieron para analizar el momento político de la regi
La plaza Internacional de Santana Do Livramento, un ícono de la hermandad entre Uruguay y Brasil, fue escenario ayer de un acontecimiento histórico. Cuatro expresidentes de la izquierda progresista se reunieron para analizar el momento político de la región y sentar las bases de la reconstrucción de la integración regional.
Un emocionado “Lula” Da Silva aclamado por el público con cánticos y pancartas, presentó a Dilma Rousseff y a José Pepe Mujica para dar inicio al acto en la soleada y colmada plaza, a la que luego se sumó el ecuatoriano Rafael Correa.
El afecto que los brasileños guardan por José Mujica quedó en evidencia a lo largo de toda la jornada. Sus palabras eran aprobadas con cerrados aplausos y gritos de“Mu-ji-ca… Mu-jica” cada vez que el uruguayo levantaba su tono para recordarle a la dirigencia de la izquierda que“cuide su modelo de vida”y no se siente a la mesa de la burguesía, sino “del pueblo trabajador”.
“Vivan como vive el pueblo, y no como vive la minoría de la sociedad”, destacó el expresidente, porque “debemos expresar con nuestra vida los desafíos por los que luchamos”.
Un párrafo especial dedicó para hablar de la izquierda. “Luchen siempre por la unidad” porque “mientras nosotros nos peleamos por las ideas, la derecha se junta por sus intereses”, recalcó.
Frenteamplistas en el acto
Un grupo nutrido de frenteamplistas acompañó a Mujica en su viaje y se sumó a los brasileños para vitorear los momentos más salientes del acto.
Uno de ellos fue cuando el senador frenteamplista se refirió a la integración regional. “Tuvimos muchos gobiernos progresistas, nos sacamos lindas fotos juntándonos todos los presidentes, pero lo que no pudimos juntar fue nuestra inteligencia y nuestras universidades para construir una auténtica y verdadera integración”.
Las palabras de Mujica fueron interrumpidas por un corte de luz que dejó sin funcionar
por varios minutos los micrófonos, pero la gente permaneció de pie escuchando a Lula que se quedó completamente afónico gritando a sus seguidores que lo interrumpían cantando“ole, ole, olá… Lula, Lula”.
Dilma Rousseff tomó luego el micrófono y expresó su admiración por Lula y Mujica. “En Brasil dieron un golpe para aplicar el peor y más duro neoliberalismo que había sido derrotado en las elecciones de 2014, crearon un monstruo de extrema derecha para gobernar el país y la única persona capaz de oponerse a ese monstruo y devolver al pueblo su lugar en elecciones libres y soberanas se llama Lula Da Silva”, remarcó la expresidenta desatando la euforia de todos los presentes.
La presencia de Lula convulsionó Santana Do Livramento. La cuarta gira proselitista fue seguida por más de cincuenta periodistas de medios radiales, gráficos y televisivos que desde temprano se apostaron en la plaza que une la ciudad brasileña con Rivera, en Uruguay.
Ataviados con remeras con la consigna “Lula, vale a luta” cientos de simpatizantes del PT colmaron la ciudad y se reunieron con decenas de frenteamplistas del MPP que acompañaban la caravana.
Lula y la integración
El expresidente brasileño recordó una anécdota cuando Chávez era presidente venezolano y se reunieron los mandatarios progresistas para fundar Unasur. Destacó la visión integradora del fallecido líder venezolano y la importancia que le daba a la construcción de la unidad latinoamericana.
Lula lamentó que durante décadas Brasil “no miró para Latinoamérica, ni tampoco a los pueblos africanos, porque vivía bajo la órbita política de los Estados Unidos”. Recién a partir de su gobierno“se dio vuelta la cara para reencontrarse con los hermanos latinoamericanos y construir la Patria Grande”.
Por último, Mujica destacó: “Necesitamos un Brasil fuerte y unido, porque no somos nada en el mundo de hoy si no nos juntamos. Hicimos muy poco por estar juntos, porque nos preocupaba antes que nada nuestra interna política.Y le dimos ventaja a la derecha que nos quiere pulverizar, nos quiere divididos y débiles. Debemos aprender a juntarnos porque es la única manera de ser fuertes”.