Chimango hizo su propio juego en la punta y convirtió la prueba en la cacería del zorro
El del stud El Bonete nos había defraudado en el Gral. Artigas pero demostró que no estábamos tan equivocados
Alo largo de tantos años de ver carreras de caballos, hemos recogido algunas enseñanzas que siempre, a la corta o a la larga, demuestran el gran valor que tiene la experiencia. Y hay un sabio dicho, que reza que “los resultados pueden ser cambiantes (y vaya si lo son) pero los conceptos, no”.
Y esa “máxima” volvió a hacerse presente ayer en Maroñas con la disputa del Gran Premio Municipal. Porque CHIMANGO, al que dimos de candidato en el Gran Premio General Artigas, comentando que nos gustaba en fija y al que veíamos imponerse de punta a punta, pero que se entregó mansamente en la recta final y llegó 6º a 10 cuerpos, en la víspera respondió al elevado concepto que tenemos de él y se trajo a la rastra a sus rivales, imponiéndose desde las gateras al disco y guapeando lindo para contener los embates finales de Coldplay, que atropelló para arrebatarle el triunfo pero se quedó con las ganas, pero dejando lejos a los demás, con Monje Negro en el tercer puesto y Olimpia Harvard en el cuarto, delante de Legion Cat e Isaac Newton.
Lo del ganador, no hace más que corroborar que se trata de un excelente ejemplar que está alcanzando su plena madurez (todavía no cumplió 4 años) y que combina a la perfección velocidad con aliento, algo que está reservado para muy pocos ejemplares. No en vano fue de los mejores exponentes de su generación, ganando el Carlos Reyles y corriendo con opción el Nacional, para vencer luego en el Clausura y rodar en la largada del Quintela (que clasificaba para el Latinoamericano) antes del fracaso en el Artigas, donde era nuestro candidato. Ayer pagó 7.30 por cada peso apostado y nos privó de una “Profecía” que hubiera hecho las delicias de nuestros seguidores. Pero como dice el “refrán”, los resultados cambian, pero los conceptos no.Y vaya si nuestros conceptos sobre los caballos de carreras están acertados.
Gran labor del jockey Héctor Lazo, que lo administró a la perfección y brillante preparación de Adolfo Gutiérrez, que sigue siendo un maestro en entrenar caballos de carrera, sobre todo en distancias de aliento. Lo de ayer nos trajo a la memoria aquellas memorables victorias de Compadre y Cabresto, que defendiendo los mismos colores “blanco con bandas cruzadas marrones” del stud El Bonete, escribieron páginas de gloria en el turf uruguayo. Felicitaciones para sus distinguidos propietarios, que se merecen este tipo de satisfac-