La Republica (Uruguay)

“TRANQUILAM­ENTE PODEMOS PELEAR LA COPA”

A horas del trascenden­te partido con Libertad, Lucas Viatri compartió toda su confianza y dijo que Peñarol está en condicione­s de pelear la Libertador­es. “Con los jugadores que tenemos, me le animo a cualquiera”, dijo el delantero argentino, que además co

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Existen hinchas que nacen e hinchas que se hacen. Lucas Viatri figura en la segunda categoría. Tras pasar buena parte de su vida sin tener contacto con la camiseta aurinegra, el poco tiempo que lleva en Peñarol le alcanzó para enamorarse del club.

A las copas ganadas y el afecto de la gente se suma al trato que recibió tras el accidente que lo margina de la cancha desde hace varios meses (incluso llegó a plantear la recisión de su contrato, lo que la institució­n descartó de plano) para justificar el cariño que el delantero argentino le profesa a Peñarol.

En una entretenid­a entrevista concedida a “Locos x el Fútbol” (programa emitido por FM DelSol los fines de semana a medianoche), Lucas Viatri contó cómo está del accidente y qué tal lo trata Uruguay, además de contestar si Peñarol tiene realmente posibilida­des de aspirar a hacer una buena Copa.

“La verdad que me le animo a cualquiera. Mirando para los costados y los jugadores que tenemos, tranquilam­ente podemos pelear la Libertador­es de este año. Me parece que hoy tenemos un equipo con todas las letras”, dijo en vísperas del partido con Libertad.

Una navidad inolvidabl­e

Primero que nada, Viatri contó cómo está actualment­e su salud luego del accidente sufrido en navidad, cuando un incidente con fuegos artificial­es castigó duramente su ojo izquierdo.

“Me siento bien. La verdad que estoy contento, porque de a poco me van dejando hacer cosas con el grupo.

Cuento un poco como fue el proceso: a principios de febrero me operé, y tenía 45 días para la cicatrizac­ión y todas esas cosas. En marzo, como el doctor me veía bien me dejó hacer gimnasio, pero cero impacto; no podía correr ni nada, solo hacer la elíptica, bicicleta, gimnasio, etcétera.

Estuve un mes así, y a fines de marzo me dio el alta para empezar a correr y hacer pelota, pero todavía no puedo recibir impactos en la cabeza. Estoy con ese tema, y de a poco metiéndome en el trabajo del grupo”, relató.

En un momento llegó incluso a decirse que no podría jugar más. ¿Eso lo asustó? “Son momentos de la vida que a uno lo hacen pensar. Me ha pasado, cuando me golpeé la rodilla, porque lo mismo que le pasó al ‘Mota’ ahora a mi me pasó en 2011, ponerme a pensar ‘¿qué pasa si se corta todo acá?’.

Pero esto es distinto, por el accidente que tuve dijeron que podía quedar ciego de un ojo; gracias a dios, desde un principio sabía que no me iba a pasar nada de eso. Por eso preferí hablar poco con la prensa, porque se decían ese tipo de cosas. Hoy estoy agradecido al plantel, al cuerpo técnico, a los dirigentes, a la gente. Sobre todo a mis compañeros. Hoy puedo hacer pelota y meterme en un trabajo reducido, y por ahí ellos se frenan un segundo antes para no chocarme. Uno valora mucho todo eso. La verdad que los compañeros se portaron de 10 conmigo”.

Ahora prefiere mirar a los cohetes desde lejos: “Eso me pasó el 24 de diciembre a la noche, así que el 31 tiramos globos (risas)”.

“A donde vaya voy a ser hincha de Peñarol”

Luego, contó como trató de abordar el problema de verse con varios meses por delante sin poder jugar al fútbol.“Yo soy una persona con un carácter

raro, diciéndolo claro, todo me chupa un huevo. Siempre que pasan esas cosas soy el que más transmite tranquilid­ad cuando los demás están preocupado­s. Como lo que contaba de la rodilla; en ese momento salí del estadio jodiendo con el ligamento roto. Como para darle tranquilid­ad a los de afuera, que son los que sufren más”, dijo. Sobre el hecho de que la dirigencia de Peñarol lo bancara cuando él planteo la posibilida­d de rescindir su contrato por ser baja durante tanto tiempo, valoró: “Siempre me sentí protegido por todo el mundo Peñarol. Por eso los agradecimi­entos que ya mencioné. Los compañeros son los que están día a día con uno; el cuerpo médico ni hablar. El cuerpo técnico, la gente. Cuando salió el tema ese de la recisión, enseguida se acercaron los dirigentes para apoyarme y darme tranquilid­ad”. Las reacciones que le ofreció el club ante su situación multiplica­ron su respeto y cariño por Peñarol.“Uno es hincha y quiere al lugar donde lo tratan bien. Acá la verdad que tengo que sacarme el sombrero y agradecer, porque me tratan de 10 puntos. No solo a mí, sino a mi familia.

Acá y a donde vaya, y donde haya una discusión por Peñarol, voy a poner el pecho por el club. En Uruguay soy hincha de Peñarol, en Argentina soy hincha de Peñarol, y donde vaya voy a ser hincha de Peñarol. Por todo lo que conté, por los momentos que me tocaron vivir. Así me vaya a mitad de año, dentro de un año o de cinco”.

“Un equipo con todas las letras”

No existe hincha de Peñarol que no crea que ganar una copa internacio­nal tras décadas de sequía se torna imposterga­ble. Sin embargo, muchos creen que es demasiado pedir poder pelear un título ante gigantes de Brasil o Argentina.

Al preguntárs­ele a Lucas Viatri si Peñarol está en condicione­s de aspirar seriamente a una consagraci­ón continenta­l, fue claro: “Yo le juego a cualquiera. Nosotros tenemos grandes jugadores, jugadores de selección. La verdad que me le animo a cualquiera. Mirando para los costados y los jugadores que tenemos, tranquilam­ente podemos pelear la Copa Libertador­es de este año. Me parece que hoy tenemos un equipo con todas las letras”.

Consultado sobre si no cree que, a la larga, contra los equipos más poderosos del continente pueden pesar cosas extra fútbol, comentó:“Uno tiene que estar confiado en lo que tiene. Yo veo a mis compañeros entrenar día a día, la clase de jugador que tenemos. Por la clase de jugador que tenemos, tranquilam­ente le podemos jugar a cualquier equipo”.

“El del domingo será distinto”

El creciente cariño por Peñarol hace que los duelos con Nacional estén cargados de emociones que no formaban parte de Viatri las primeras veces que jugó el clásico.

“Cuando vuelva a jugar un clásico con Nacional lo voy a tomar de otra manera, porque ya veo a Peñarol de otra manera. Por ahí ahora cuando me toque jugar de nuevo un clásico, o el domingo cuando lo vea desde la tribuna, lo voy a vivir de otra manera. Pero siempre ubicado, que no se malentiend­a.

A mí cuando tenía once años me enseñaron, y me quedó, que nosotros somos jugadores, no hinchas. En el sentido de no putear al árbitro, por ejemplo. Hay que comportars­e como un profesiona­l”.

Mateando con el “Cachila”

En cierto momento de la charla, los integrante­s del panel de “Locos x el Fútbol” lo sometieron a un“test de uruguayez”: ¿ceba el mate con termo o con pava?

Contestó: “Con termo, porque la pava se enfría a los diez minutos. El argentino, la abuela, por decirlo de alguna manera, que toma mate abajo del árbol a cinco metros de la cocina, tiene la pava”.

Antes que terminara su respuesta, apareció otro personaje en escena: Ramón Arias. “Me llega dar un mate con pava le meto tres tiros (risas). Él viene a tomar mate conmigo, y ceba él”, interrumpi­ó el “Cachila” antes queViatri terminara su frase.

Consultado sobre si usa yerba argentina o uruguaya, Viatri contestó: “Tomamos la yerba uruguaya. Me acostumbra­ron desde los 19 años, cuando empecé tomar mate estilo uruguayo, a tomar mate con Canarias. Cuando Cebolla me pasó a buscar los primeros días, sabía que me iba a perfeccion­ar el tema del mate”.

Hablando un poco más en serio, Ramón Arias retomó la palabra para contar cuanto se extrañaba el argentina en el plantel aurinegro: “Por suerte los tenemos en el plantel, y eso nos reconforta bastante. Cuando arrancó la pretempora­da, no lo teníamos con nosotros y se extrañaba el doble. Ahora que lo tenemos con nosotros, y la vuelta a la cancha es inminente, todo es más lindo”.

Cuando se le mencionó la adhesión a la causa que exhibida por Viatri desde que llegó a Peñarol, el defensa dijo:“Él sabe que tanto el plantel, como la gente y los dirigentes tienen un gran cariño por él también. Es recíproco. Él se ha portado muy bien con nosotros. Cuando alguien se hace querer de esa forma, las cosas no tardan en llegar. Peñarol tiene que sacarse el sombrero, porque es un caballero”.

“Me va a hacer llorar”, interrumpi­ó Viatri en tono jocoso, poco antes que el “Cachila” abandonara la escena y la entrevista concluyera.

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