Calzada: “Tenemos inversores interesados, pero los procesos administrativos son lentos”
Uno de los problemas que Uruguay tiene para insertarse en el mundo es que tiene una institucionalidad que genera una cantidad excesiva de controles, sostuvo a República Radio el ex secretario general de la Junta Nacional de Drogas (JND) Julio Calzada. Consideró que “estamos perdiendo oportunidades en el desarrollo productivo. Hay inversiones que quieren asentarse en Uruguay, porque tenemos una Ley que da muchas garantías, pero estos procesos administrativos y esta interpretación que desde el Ministerio de Salud Pública se hace de la Ley es muy restrictiva”.
“Los estadounidenses hablan de que tienen 80 millones de dólares para invertir en Cannabis. Hoy California es un tren a 300 kilómetros, andando por vías adecuadas. Nosotros tenemos acceso a eso pero nuestras vías funcionan para trenes de 30 kilómetros. Si seguimos este criterio, seguiremos profundizando las desigualdades. Por algo estructuras sumamente conservadoras como las de Trump han impulsado la producción de cannabis. La cantidad de puestos de trabajo que esto ha generado son muy importantes”, reflexionó.
Consideró que se pueden hacer intervenciones legislativas para precisar con más claridad qué es lo que cada uno de los actores comprometidos en la implementación tiene que hacer.“Por ejemplo, es paradójico que con las posibilidades que tenemos, estemos produciendo un medicamento que lo hacemos con aceites importados. Importamos de Suiza un tipo de producto que lo podemos plantar en una maseta en cualquiera de nuestras casas. Esta es la historia de Latinoamérica. Le mandamos la lana y les compramos a los ingleses el buzo”.
Además, dijo que estos frenos institucionales no sólo no permiten que existan más inversiones, sino que producen que existan pocas farmacias. Sin embargo, dijo que todos estos problemas son “solucionables” y “lo que tenemos que hacer es ser mucho más proactivos”.
Por otro lado, afirmó que el tema medicinal es en donde se han presentado las “mayores dificultades”. “En los últimos cinco años hay otros países que han ido más rápidos que nosotros como es el caso de Chile y Colombia. Otros países han investigado mucho más. En Israel se está haciendo una investigación de este tipo de producto con sepas de todos los continentes, lo que significa un paso significativo. Si hiciéramos lo mismo, no sólo tendríamos una ventana de posibilidades para el desarrollo en la medicina sino que también en otros rubros, sin contar la cantidad de empleo que generaríamos”.