Con el apoyo del PIT-CNT se creó el Sindicato Único Carnavalero

“No son todos los directores los que deben, la mayoría cumple con lo acordado".

Bajo el nombre de Sindicato Único Carnavalero del Uruguay (Sucau) finalmente los trabajadores de los conjuntos de carnaval lograron organizarse y comenzar a negociar una plataforma reivindicativa con la patronal, la cual está representada por la organización Directores Asociados de Espectáculos Populares del Uruguay (Daecpu).

Miriam Bertolini, responsable de prensa y propaganda del Sucau, le recordó al Portal de la central obrera que el grupo originario del sindicato es conocido como “Somoscarnaval” y que previo a la formalización de la organización se realizaron tres reuniones en el local del PIT-CNT. La idea y la necesidad firme de construir un sindicato se revitaliza en 2003, pero la iniciativa fracasa. Nuevamente el miércoles 18 de abril del corriente y a partir de una convocatoria boca a boca con trabajadores carnavaleros se lleva adelante una primera reunión. A partir de ese momento se conformó una Mesa de Conducción provisoria, la cual fue confirmada en la siguiente reunión. Finalmente el lunes 18 de junio, en el marco de una gran participación, se acepta la propuesta que llevó la Mesa Provisoria y nació, con la unanimidad de los presentes, el Sucau. Se aprobó también que la Mesa Provisoria fuera integrada por dos personas más, por lo que quedó integrada por 15 miembros, y pasara a constituirse en el Consejo Ejecutivo del sindicato. En este momento están trabajando varias comisiones, las cuales están encargadas de definir y realizar propuestas en torno a: organización; perspectiva de género; derechos de imagen; salario; incumplimientos y obligaciones contractual; interior; comunicación; y tercera pata. Bertolini manifestó su sorpresa ante la cantidad de“compañeros del interior que se comunicaron para apoyar al sindicato y para participar del mismo. En principio pensamos organizarnos en Montevideo y con alegría comprobamos que la necesidad de organizarse existe en todo el país. Lo que quedó demostrado en la segunda asamblea que realizamos y en la cual nos encontramos con trabajadores carnavaleros de Salto, Paysandú, Río Negro, entre otros. Esto dejó claramente evidente la necesidad de la existencia del sindicato. En este corto período contamos ya con contactos en 12 localidades de diferentes departamentos del interior.

Se debe tener en cuenta que existen tres categorías y que los arreglos económicos se hacen con las respectivas intendencias, ya que no existe como en Montevideo una patronal nucleada en Daecpu.Todo esto demuestra la necesidad que tienen los trabajadores de organizarse si quieren defender sus derechos y lo que se ha podido lograr en este corto tiempo. A modo de ejemplo podemos señalar que los delegados de Salto y Paysandú cuando hay una asamblea las respectivas intendencias le facilitan la locomoción”. La responsable de prensa del Sucau confesó que en el ambiente del carnaval existe una relación muy personal y las“empresas fomentan el concepto de se está en una familia. A esto debemos sumarle el hecho de que quien participa de la fiesta de Momo lo hace porque le gusta, lo que es utilizado por algunos conjuntos cuando dicen que te hacen un favor porque podes trabajar en lo que te gusta. Lo que debemos tener claro es que somos trabajadores y que por más título que tenga del conjunto si no tiene gente no lo puede sacar. Junto a Pablo Itamuzu, con quien hicimos hace años un primer intento para organizar el sindicato, pensamos que la realidad del país no es la misma que en 2003 y 2004, por eso en ese momento fracasamos. Hoy el país no es el mismo y el movimiento sindical, con sus respectivas organizaciones, cuentan con un papel protagónico importante. Cosa que no sucedía en momentos que salíamos de la crisis vivida y padecida por los uruguayos en el 2002 durante el gobierno de Jorge Batlle. A esto se le debe sumar que ingresó al carnaval una savia nueva y que esta combinación está permitiendo que nazca el sindicato de los trabajadores del carnaval”. Bertolini subrayó que entre las principales preocupaciones existentes está el incumplimiento salarial, ya que existen conjuntos que de forma contumaz no les pagan a los trabajadores. “No son todos los directores los que deben, la mayoría cumple con lo acordado, pero existe un núcleo duro que no abona los salarios correspondientes. Debemos tener en cuenta que no existe ningún contrato y todo, hasta ahora, se hace de palabra y se confía en que el acuerdo se cumpla. Hoy existen más de 20 compañeros que se encuentran reclamando que se les pague, a algunos de ellos no se les ha pagado un solo peso y los directores son los responsables de conjuntos conocidos”. Agregó la dirigente que ante este panorama “nos reunimos con la directiva de Daecpu y denunciamos la falta de pago que sufren estos trabajadores. Se comprometieron a citar a los directores involucrados y luego instalar una mesa de negociación. Nuestro planteo es que quien no paga no pueda sacar su conjunto. Sabemos que este es un año bisagra y que esta medida se podrá poner en práctica para el carnaval del 2020.