El peso argentino tocó un mínimo histórico y la devaluación continúa
A pesar del anuncio de la suba de la tasa de interés hasta el 60 por ciento, la divisa estadounidense volvió a dispararse. Se vendió a un récord de más de 42 pesos y sobre el cierre de la rueda retrocedió a 40,97 pesos. El Banco Central vendió 330 millone
La devaluación va en aumento. El dólar subió ayer 6,47 pesos y cerró en 40,97 tras haber pasado la barrera de los 42 pesos. De poco sirvió que el Banco Central anunciara el aumento de la tasa de referencia al 60 por ciento y el incremento en 5 puntos porcentuales de los encajes bancarios, integrables con pesos, LELIQ o NOBAC. Con la venta de 330 millones de dólares sobre el cierre de la rueda cambiaria, la entidad monetaria al mando de Luis Caputo consiguió apenas amortiguar la suba del billete verde.
La corrida sigue erosionando al peso. La depreciación de la moneda argentina con respecto al dólar fue de un 8,7 por ciento.
A más de una hora del cierre de los bancos, el dólar se vendió a un máximo de 42 pesos en bancos y casas de cambio de la city porteña. A las 14 mostró un leve retroceso hasta 41,10.
Para contener la corrida, la primera reacción del Banco Central fue el anuncio de la suba de tasa de interés de referencia a un sideral 0 por ciento, lo que hizo retroceder un poco la cotización hasta 39 pesos. Pero pasado el mediodía la disparada se reactivó y el dólar cotizó en torno a los 41 pesos.
El intento del Gobierno por tranquilizar los mercados no dio sus frutos y minutos después de que el jefe de Gabinete Marcos Peña saliera a intentar calmar la corrida, el mercado le dio otra vez la espalda. “Tenemos que seguir trabajando. No creemos estar ante un fracaso económico ni mucho menos. La Argentina va a salir adelante y más fortalecida… lo dicen todos los indicadores”, afirmó Peña esta mañana, que descartó un cambio de gabinete ya que no “hay soluciones mágicas por esa vía”. Los mercados tampoco lo escucharon. Con el dólar por encima de los 42 pesos, el Central decidió jugar su última carta al filo del cierre de las operaciones: puso a
disposición del mercado 500 millones de dólares, de los cuales vendió 330 millones. Tras rozar los 41 pesos, el dólar en el segmento mayorista cerró a 37,60 pesos.
al registrarse el séptimo día consecutivo de subas, el Banco Cental también había intentado contener la corrida. Para ello vendió 300 millones pero no logró calmar al mercado y el dólar cerró en 35,50. Tampoco las palabras del presidente Mauricio Macri, quien anunció un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para que adelante los desembolsos del crédito por 50.000 millones de dólares. Veinticuatro horas después el dólar está 6,47 pesos más caro.
Desde comienzos de año el peso acumula una devaluación de 104%. Con su decisión, el banco emisor busca hacer más atractivos otros instrumentos de inversión alternativos al dólar como los depósitos a plazo en pesos. La contrapartida es que debido a que las tasas del sistema financiero acompañan ese movimiento en alza, se genera un enfriamiento de la economía por el encarecimiento del crédito, explicó a The Associated Press Matías Carugati, economista jefe de la consultora privada Management & Fit.
Frente a las casas de cambio del centro de Buenos Aires varias personas tomaban fotografías de las pantallas que mostraban el precio del dólar, tradicional refugio de los ahorristas argentinos en momentos de crisis. Rubén Montiel, de 55 años, dijo a AP que “es una vergüenza lo que están haciendo con el pueblo, todos los días aumentan las cosas... no hay trabajo”. El Banco Central vendió 330 millones de dólares de reservas al final de la rueda para contener el precio de la divisa y elevó en cinco puntos porcentuales los encajes para todos los depósitos bancarios en pesos para “acentuar el control de liquidez en el mercado de dinero”y que no se vuelque a la compra de la divisa.
La suba del dólar ha recalentado en los últimos meses la inflación, que según el gobierno del presidente Mauricio Macri será de 30% este año pero que analistas sostienen que rondará el 32%. La indomable alza de los precios ha acrecentado el malestar social y las protestas en las calles.
Carugati afirmó a que existe “una especie de pánico y no hay algo estrictamente racional para que el dólar siga subiendo”. Agregó que “tenemos una economía mucho más frágil que otras, con desequilibrios que no se van a corregir a corto plazo. Lo que vino de afuera fue el chispazo que encendió esta corrida, agravado por la falta de reacción del gobierno”.
La moneda local aceleró su devaluación en los últimos días en medio de temores sobre la capacidad del país para cumplir sus compromisos de deuda, combinados con el impacto de la devaluación del real en Brasil y de la lira en Turquía. La víspera Macri anunció que había acordado con el FMI un adelanto de fondos del acuerdo suscrito en junio por 50.000 millones de dólares para tranquilizar a los mercados en medio de rumores de que el país no podría enfrentar sus obligaciones financieras. Pero el mensaje no convenció. “No hubo detalles ni números en su mensaje y eso generó incertidumbre” afirmó Carugati.
El economista consideró que primero habría que estabilizar la situación cambiaria, luego minimizar el malestar social haciendo uso de partidas que el propio FMI contempló en el acuerdo y después aplicar una política monetaria que impida que la devaluación se traslade a los precios.
Según el Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano, el dólar es la moneda de los argentinos para preservar a largo plazo el valor de sus ahorros y su demanda crece en tiempos de incertidumbre. “Lo excepcional del caso argentino estriba en que no existe ninguna alternativa de ahorro que ofrezca garantías equivalentes al dólar”, señaló el centro.