Intergremial del Área Salud busca fondos para terminar construcción de su edificio
“Queremos sólo que se termine la obra y estar funcionando todos con normalidad”, dijo la Lic. Myriam de León, directora de la Escuela de Nutrición.
E ste miércoles 5 de setiembre, autoridades de la Universidad de la República (UdelaR) inaugurarán la primera etapa del nuevo edificio que tendrá cuatro servicios usufructuando del mismo; la Escuela de Nutrición, de la Escuela de Parteras y de la Escuela Universitaria deTecnología Médica de la Facultad de Medicina, la Facultad de Enfermería y el aulario del Área Salud.
Dicha edificación se encuentra sobre la Av. Ricaldoni, pegado al Cudim, frente al Estadio Centenario, en el Parque Batlle Montevideano.
Para saber más acerca de este avance en materia de infraestructura, que atiende en parte un gran anhelo de años de los citados servicios de la casa mayor de estudios de nuestro país, LA REPÚBLICA dialogó con la Lic. Myriam de León, directora de la Escuela de Nutrición.
Contó que la idea de construir este edificio surgió en 2008, de parte de los estudiantes de Nutrición que tenían el afán de lograr “estar todos juntos”en un local propia de la escuela.
“En ese momento funcionábamos en el piso 13 del Clínicas en varios otros locales alquilados, como el exedificio de la fábrica Alpargatas”, dijo, y agregó que en ese momento esta escuela era dependiente de la Facultad de Medicina, de la cual se separó en 2012 para ser un servicio independiente.
“En ese proceso de construcción de un nuevo edificio y necesidad del Área Salud de la UdelaR y de otros servicios, empezó a consolidarse esta obra, que lo que se inaugura este miércoles es el área académica y de gestión de las escuelas de Nutrición, Tecnología Médica y Parteras, y un aulario que compartimos los tres servicios con Facultad de Enfermería, lo que abarca casi 6.000 m2, pero para el total del proyecto están faltando unos 10.000 m2 más”, explicó la jerarca.
Recorte y ajuste
Este faltante de edificación, prevista en la idea original, en 2016, por “un recorte presupuestal que afectó a toda la Universidad, donde se jerarquizaron una serie de cosas, se hizo un ajuste, y se limitaron las aulas, muchas que iban a ser exclusivas de EUTM, y se transformaron en un aulario general”. En lo que respecta a Nutrición, “logramos que se cambiara un poco el plan inicial porque eso iba a generar que quedáramos mucho más compartimentada de los que estábamos hasta ahora. Con este nuevo edificio nos mudamos casi totalmente al nuevo y en el piso 13 del Clínicas quedan laboratorios que aún no están construidos, y la biblioteca en la sede de la calle Leguizamón, en el Buceo. Ese es un logro importantísimo donde estamos docentes, funcionarios y estudiantes”, destacó.
Ante la consulta de cuál fue el motivo que generó esa reasignación de fondos que desencadenó la reformulación de la obra, de León puntualizó que“las dos canchas de baby fútbol que estaban en el predio, para desalojarlos había que ubicarlos en otro lado. Eso generó un tema judicial porque no querían irse. Eso enlenteció el proceso. Después se encontró una vertiente de agua debajo de la obra que atrasó otro período. Mientras tanto estaban en cola otros proyectos de la UdelaR, los que se beneficiaron de esta ‘trancadera’ y cuando el nuestro se destrancó, esos fondos se habían redistribuido.Y ahora todos estos servicios estamos ‘remando’ para conseguir los fondos para terminarlo”.
Que se resuelva el problema
Adelantó que la Intergremial del Área Salud y los asistentes académicos de estos servicios “están buscando rubros para seguir con la construcción de este edificio que se inaugura una primera parte. Uno de los temas es que además el Clínicas se está refuncionalizando y necesita que queden libres los espacios que usábamos, tanto Tecnologías Médicas como nosotros. Pero tanto ese servicio, como Nutrición no podemos irnos del todo porque hay áreas que precisamos que están en la segunda parte de la obra, en eso 10.000 m2 que faltan. En definitiva, aún no se resuelve totalmente el problema que tenemos estos cuatro servicios. Vamos a seguir repartidos”.
Añadió que “estamos esperanzados que en el próximo presupuesto (que será votado en 2020 y empezará a ejecutarse en 2021) se incluya esta obra, ya que en la Rendición de Cuentas no hay fondos para el mismo. Queremos sólo que se termine la obra y estar funcionando todos con normalidad”.
Enfatizó que lo que si hay fondos es para terminar una parte de la obra, que incluye tres laboratorios, dos de Nutrición y uno de Tecnologías Médicas, y tres pisos de aulas, los que estarán prontos a principios de 2019, y luego de eso si hasta 2021 “estaría parada el resto de la obra, que incluye la biblioteca, parte de laboratorios, más aulas y toda la Facultad de Enfermería”, aseveró.
En síntesis, y específicamente, la Intergremial de los servicios del Área Salud propone la creación de un espacio de trabajo con el Rectorado, Dirección General de Arquitectura, representante del Área Salud y representante de la Intergremial del Área Salud, con el objetivo de realizar una propuesta de planificación económica, que permita la culminación de las obras del Edificio Parque Batlle antes de 2022.