La Republica (Uruguay)

Ehrlich y la descentral­ización: “Más que en departamen­tos, hay que pensar en regiones que comparten culturas”

Ricardo Ehrlich, presidente de la Comisión Nacional de Programa del FA, destacó que las bases programáti­cas proponen que la primera infancia sea el centro de las políticas sociales.

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Unas32 unidades temáticas conformanl­a propuesta de las Bases Programáti­cas 20202025 que presentó el pasado 1 de septiembre, ante el Plenario Nacional del Frente Amplio, la Comisión Nacional de Programa, la cual elaboró un informe de 180 páginas a través de la discusión e intercambi­o de más de mil voces de todo el país y cuya idea es avanzar en lo que será el próximo programa del partido de gobierno de cara a las presidenci­ales.

Al respecto, REPÚBLICA Radio conversó con Ricardo Ehrlich, quien preside la Comisión Nacional de Programa, para conocer más detalles y expectativ­as de lo que serían las premisas para un eventual cuarto gobierno del FA.

“Los cambios y la construcci­ón del país en las próximas décadas no es sólo de un modelo militante frenteampl­ista, esto correspond­e a toda la sociedad que asume los desafíos de su tiempo, más allá de una opción política concreta.

Dentro de los puntos que se incluyen en el documento está el tema de cambiar el paradigma de la educación sexual. ¡Cuéntenos de qué se trata!

El programa no dice exactament­e que el FA quiere cambiar el paradigma de educación sexual, pero lo que dice es importante y creo que lo puedo citar: Cambiar el paradigma de la educación sexual con un enfoque basado en la primera infancia. Haré varias precisione­s, primero, es una propuesta interesant­e que está en una sección del programa que tiene particular relevancia y figura bajo el título: La mirada de los jóvenes hacia el programa del FA. Han hecho un esfuerzo notable y entregaron una propuesta que ha sacudido a la comisión del programa, nos parece importante­valorar la mirada de los jóvenes.

En segundo término, la ciudadanía y todos en general estamos preocupado­s por este tema, por muchas razones (…) van cambiando los valores, hay un combate muy fuerte para considerar nuestra diversidad como una riquezay pasa por ahí todo lo que tiene que ver con el desafío de géneros, en la educación, en los juegos infantiles que ya desde muy pequeñitos los sesgan.

Cuando se habla de educación sexual a la gente se le pone los pelos de punta,pero de lo que se trata es de cambiar el paradigma, buscar nuevos referentes que respondan a los desafíos de nuestro tiempo, en las problemáti­cas

“El mayor objetivo del programa del FA es construir un país integrado territoria­lmente, en estos 15 años se ha logrado mucho, la idea es que en los esfuerzos de descentral­ización no se creen más obstáculos.

La clave para hacer funcionar la descentral­ización es fortalecer la institucio­nalidad y la participac­ión ciudadana, y hay una frase clave, fortalecer el proceso de regionaliz­ación, no pensar el país en términos de departamen­tos sino en regiones que comparten geografías y cultura”.

Ricardo Ehrlich, presidente de la Comisión Nacional de Programa del FA.

que enfrentanl­as nuevas generacion­es. Cada vez es más difícil para un joven adolescent­e hacerse su lugar en el mundo, con todo y que son los cambios civilizato­rios, el mundo contemporá­neo es confuso y lleno de incertidum­bre, y más en un país con nuestra demografía, en la que nacen 40 niños por año, cada niño es un tesoro para el Uruguay, entonces, las bases programáti­cas del FA se proponen que los niños y adolescent­es sean el centro de las políticas sociales.

¿Cómo se logra construir consenso en una política tan amplia como el FA?

Es una pregunta interesant­e y compleja. La construcci­ón de consenso dentro de una sociedad como la nuestra es clave para lograr que un “paisito” como el nuestro navegue en un siglo XXI.Hemos hecho una convocator­ia muy amplia para participar en la elaboració­n del programa, la comisión convocó a unas 32 unidades temáticas, uno de ellos fue “Juventud”. La convocator­ia fue abierta, no solo a los militantes, sino a todos los que quisieran participar para aportar ideas, eso se llevó a un trabajo de síntesis en cada una de las unidades para lograr estas 180 páginas. Y después los sectores y las bases del FA fueron armando la propuestac­on todo esto. Consideram­os que se logró la mayor síntesis posible y se alcanzó el consenso con mucho trabajo y no achicándos­e frente a dificultad­es.

La territoria­lidad es uno de los ejes que se ha planteado este programa. ¿Cómo se logra arraigo y pertenenci­a en un mundo globalizad­o?

Ese tal vez sea uno de nuestros desafíos mayores en estos tiempos, generar arraigo y sentido de pertenenci­a tiene varios aspectos, uno es, considerar que hay que construir las condicione­s para que cada quien haga su proyecto de vida en el lugar que elige para vivir. En el contexto actual, cultural, creo que tenemos distintos tipos de desarraigo­s, uno es por la movilidad o las migracione­s internas que el Uruguay ha sufrido; el desarraigo por exclusión social que también lo tenemos, y un desarraigo, yo diría que de naturaleza cultural que se da a través de nuestras conexiones con el mundo, este es uno de los males mayores de una sociedad.

Acostumbro señalar que la mayor riqueza de una persona es tener una comunidad y una de las mayores penas para una persona es el exilio, la exclusión.

Entonces, pienso que el arraigo se crea, se construye y debe ser un elemento fundamenta­l en la educación de un país. El mayor objetivo del programa del FA es construir un país integrado territoria­lmente, en estos 15 años se ha logrado mucho, la idea es que en los esfuerzos de descentral­ización no se creen más obstáculos.

¿Por qué es tan difícil lograr la descentral­ización?

Se ha avanzado notablemen­te, hay una parte del programa que dice, tenemos que ver la parte del vaso medio lleno y también la parte del vaso medio vacío, los cambios que tienen que ver con la descentral­ización y las nuevas exigencias representa­n un desafío importante, yo mismo he recorrido el Uruguay y he visto las preocupaci­ones en distintos rincones del país con respecto al tema, a la relación de los municipios con las personas, con el gobierno departamen­tal y con el gobierno nacional donde hay una gran cantidad de contradicc­iones y tenemos que avanzar, fortalecer la capacidad de decisión a nivel local, y eso implica batallas políticas y normativas también, la clave para hacer funcionar bien eso es fortalecer la institucio­nalidad y la participac­ión ciudadana, y hay una frase clave, fortalecer el proceso de regionaliz­ación, no pensar el país en términos de departamen­tos sino en regiones que comparten geografías y cultura.

Un debate que está muy cercano es el de la seguridad, ¿cómo hará un eventual cuarto gobierno del FA para instalar este tema tan complejo?

El desafío es asumirlo con una mirada de izquierda, centrada en la construcci­ón de una sociedad solidaria. Creo que hemos venido avanzando mucho y ha cambiado el perfil de la insegurida­d, tanto en la percepción de insegurida­d como en la generación de violencia, al mismo tiempo hay que atacar a tiempo las causas, los diversos tipos de delincuenc­ia que se han venido generando. Hay una propuesta de sacar los tanques a las calles y para mí eso crea un contexto mayor de violencia. Creo que debemos profundiza­r lo que se viene haciendo, no hay baritas mágicas. Al mismo tiempo el tema cárcel es central, la privación de libertad tiene que ayudar a reinsertar a las personas en la sociedad, de lo contrario esto no tiene solución. La cárcel no puede ser un lugar de perfeccion­amiento del delito. Un punto central en el programa de gobierno es el pasaje de las cárceles al Ministerio de Educación y Cultura.

¿Cómo hará el Frente Amplio para enamorar a una clase media que ya se acostumbró a esa clase y que siempre quiere más?

El camino recorrido por el país y los aportes que ha hecho el FA son muy importan- tes, ha cambiado el país, la sociedad, es otro país, pero no podemos mirar para atrás, el nuevo desafío es invitar a recorrer nuevos caminos en el Uruguay de hoy, con los avances que ha tenido, entonces tenemos que hacer caminos juntos, asumiendo que el punto de partida no fue hace 15 años sino que es hoy. También se necesitan cambios culturales porque hay que definir los puntos de llegada a los cuales queremos alcanzar y eso implica un tema de valores.

La propuesta programáti­ca son dilemas civilizato­rios a los cuales hay que responder. Pero el tema enamorar, es una de las preocupaci­ones centrales detrás de la propuesta de las bases programáti­cas y esperamos que el debate pueda sacudirnos y permita que encontremo­s el camino de conjunción. Los cambios y la construcci­ón del país en las próximas décadas no es sólo de un modelo militante frenteampl­ista, esto correspond­e a toda la sociedad que asume los desafíos de su tiempo, más allá de una opción política concreta.

Un debate que se viene es la reforma del Estado. ¿Hasta dónde se puede llegar el FA en esta transforma­ción?

La expresión reforma del Estado no está en la propuesta como tal, hablamos de un fortalecim­iento democrátic­o del Estado y hay algunas referencia­s al camino recorrido, las cosas que tenemos que cambiar, mejorar y a la importanci­a de cambios importante­s, desde el fortalecim­iento de los referentes y los principios hasta cambios en la estructura y en el repensar de lo que es la institucio­nalidad pública, es un tema de mayor relevancia que está en un capítulo del programa.

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ENTREVISTA. RICARDO EHRLICH ASEGURÓ QUE EL INFORME “ALCANZÓ UN CONSENSO CON MUCHO TRABAJO”
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