Proyecto de Insolvencia Patronal, una protección para los trabajadores

Garantizar el cobro a los trabajadores de los haberes generados por las empresas que se declaren insolventes, es una de las principales propuestas del Proyecto de Insolvencia Patronal, que aprobó recientemente la Cámara de Representantes. A propósito el d

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Hay que ratificarlo en la Cámara de Senadores, posiblemente sea antes del 27 de octubre, pasaría a que lo homologue el Poder Ejecutivo y automáticamente se va a aplicar. El proceso tendrá lugar después que el Ministerio constate que la empresa es insolvente mediante un exhaustivo proceso de investigación y una instancia judicial previa. Luego en un plazo de 20 ó 30 días tienen derecho a acceder a ese cobro los trabajadores.

En qué instancias falta presentar el proyecto para su final aplicación?

“Latinoamérica ha retrocedido siglos en cuanto a los derechos laborales en un corto período de tiempo y aquí hemos avanzado”.

¿Cuál es la principal importancia que le atribuye al proyecto?

Esto es una aspiración histórica porque son muchas las empresas que se han quedado por el camino. La Ley de los Créditos Laborales por ejemplo, tiene un proceso muy largo, los primeros en cobrar la deuda son los acreedores mayoritarios y los trabajadores son los últimos en recuperar su dinero. Sobre esa base está creado el proyecto, sabemos que puede haber empresarios oportunistas, pero la reglamentación y el proceso aseguran que no sea así.

Tenemos que darles una garantía a los trabajadores en caso de que sigan cayendo empresas. Está por ejemplo el caso de Pili que ha cerrado sus puertas y decenas de trabajadores se han quedado sin empleo.

Algunos están considerando si pueden hacer usufructo de las instalaciones para trabajar de manera auto gestionada.

Hay otros ejemplos, pero lo importante es reconocer que el trabajador necesita en primera instancia cobrar el dinero que le permita recupe- rarse y reinsertarse a otras actividades.

¿En la comisión, cuál fue el aspecto más debatido?

La discusión del fondo para este proyecto fue lo más debatido desde el comienzo, porque la Cámara de Comercio e Industria se oponían constantemente. Reafirmaban que las empresas no tenían por qué pagar por cuestiones de otras empresas que no son serias. Pero se entendió que las empresas tienen que ofrecer seguridad, para eso es este fondo, a propósito de la estabilidad y la responsabilidad que el empresario tiene que tener. Los empresarios se iban y nadie se hacía responsable en ese sentido de los trabajadores. El debate que hubo en la comisión fue por el problema de la financiación, se opusieron a lo que era la iniciativa principal. Estuvimos discutiendo mucho tiempo con el ejecutivo y finalmente se aprobó que no se crearan más impuestos para los empresarios, sino que el fondo se hiciera a partir de los aportes patronales donde solo el 0,025 % va al fondo de garantía.

¿Uruguay sigue siendo referente cuando de derechos laborales se trata,en el medio de un panorama regional marcado por el retroceso?

Nosotros somos consecuentes, Uruguay es muy serio en ese sentido. Latinoamérica ha retrocedido siglos en cuanto a los derechos laborales en un corto período de tiempo y aquí hemos avanzado. También hemos logrado un buen posicionamiento internacional, una buena carta de presentación cuando de inversión se trata por la estabilidad económica que tiene nuestro país. Pero lo primero es ver lo que los trabajadores necesitan.