La Republica (Uruguay)

“Siento que volví a nacer, conocí una faceta del mundo que la gordura no me dejaba ver”

- Fernanda Colman

Es uno de los personajes más queridos de la farándula uruguaya más que nada por su autenticid­ad ante cualquier persona que se lo cruce en la calle. Sus frases: “Pin y verde, mmm no te da”, “es un asco” (para decir que algo está muy bueno) o su caracterís­tico Hadouken que sacó del videojuego Street Figther enseguida se las identifica con él, sin lugar a dudas.

Gustavo Serafini, más conocido como El Gucci, se somete a las 10 preguntas de LA REPÚBLICA. Nos cuenta sobre cómo comenzó su carrera, cómo cambió su vida al empezar a comer sano y bajar tantos kilos, lo difícil de este año de estar bajo la lupa pública por una informació­n falsa y lo que viene en su futuro.

1- ¿Cómo comenzó tu carrera?

A los 11 o 12 años, un día me desperté y sentí que tenía que estar arriba de un escenario, pero no sabía cómo, si actuando, cantando o en la tele; pensé también soy diferente y no me jode, siempre tuve eso de ser extroverti­do y animarme a cosas que de repente para mí eran normales. A la música tropical llegué porque ya la escuchaba de chico, pero un día me sale un trabajo, por mi forma de ser me convocan de W Lounge para estar en una barra y tener lista de invitados: esa fue mi primera experienci­a con público. Ya en el liceo era el loco que cantaba por los pasillos y en W era el loco de las listas que pasaba cantando en la ventanilla, todo empezó así, jorobando con la gente que me pedía canciones. Hoy me doy cuenta que en realidad no sé cantar, pero la gente se “recolgaba”. En W conozco al DJ. Charlie Sacco, que también es Dj de aire FM, y le comento que había tenido varios intentos por formar una banda, pero todos eran intentos fallidos. Me había dado por vencido radicalmen­te, porque en mi último intento había conocido a mi pianista y cuando dije “bueno es mi oportunida­d”, pero a él le surge irse a vivir España. Seguí en contacto con el pianista quien me dijo: “Porque no hablas con Diego Picardo, que es el pianista de Los Fatales, se hacen unas pistas, hacen algo para grabar, por lo menos para ser feliz”. Le dije: “Sabés que tenés razón”. Saque unos temas que eran espantosos, estaban grabados horribles, muy a lo plancha, él hizo lo que pudo conmigo, porque tenía cero experienci­a y como había conocido a Charlie Sacco, le dije: “Charlie, grabé estos demos (los había grabado en versión salsa), te animás a pasármelos en la radio y me mandás un mensaje, así los escucho y soy feliz”. Sí, dale me dijo, pero en la radio pasamos cumbia o plena, no pasamos salsa, entonces tuve que volver a grabar todo a plena. Un día me dice Charlie “los dueños del boliche están preguntand­o que El Gucci, la gente empezó a pedir El Gucci y pero eran unos demos malandroso­s, malandroso­s (risas). Ahí empezó todo.

2- Tu estilo siempre fue la música tropical, pero últimament­e te has dedicado más al reggaetón, ¿tenías ganas de meterte en este estilo?

Un día me animé, creo que el primer paso es ese, soy consciente que el reggaetón está moviendo el mundo, hoy en día hasta Luciano Pereyra, Romeo Santos, Marc Anthony… Es negarse y ser cerrado. Creo que el uruguayo encasilla mucho, y les costó aceptarlo a El Gucci cantando reggaetón, porque soy plenero, pero creo que esos estigmas o prejuicios se han ido cortando con el pasar del tiempo. Por suerte creo que el concepto que está ganando lugar es que la música es música más allá de los géneros. Cuando me meto a hacer reggaetón no fue tanto para acá, porque realmente se consume los monstros que llegan, pero me pasó que la moda es grabar los temas que ya están grabados, versionado­s a plena, y yo en ese sentido quiero agradecer a Maximilian­o Porciúncul­a que me escribió un disco entero de reggaetón, de hecho, voy a grabar ahora un disco, estamos produciend­o el disco entero de reggaetón. Hay un tema de este disco en el que metí cuchara, metí frases y cuando fui a pedirle a Maxi el disco para edítalo por fin, me dice “este tema se lo di a tal banda”, no puedo explicar lo que me dolió. Capaz que el tema no es un éxito, pero justo en ese metí cuchara y además está escrito para mí, es muy difícil meter temas inéditos y que la gente compré,

porque estamos muy contaminad­os y lo digo en el buen sentido, con la música que viene del mundo, aunque no te gusten los temas los terminas cantando porque suenan en todos lados.

Mi papá, en realidad creo que me lo inculcó de chiquito. Soy de la generación que sobrevivió al quinquenio de Peñarol, más allá de que al Chino Recoba lo amo, a Hugo de León lo amo, pero mis grandes héroes son los campeones del 98, tanto así que les hice una plaqueta y una comida en casa. Los tipos se emocionaro­n y me dijeron: “Ni Nacional hizo esto por nosotros”. Como hincha creo que somos una generación sobrevivie­nte a la peor época oscura del Club, entonces ellos son culpables o responsabl­es de que hoy haya más hinchas de Nacional, porque era bravo ser hincha de Nacional en esa época, lo digo con toda honestidad, yo no sabía quién jugaba en Nacional, pero conocía a los jugadores de Peñarol porque eran los que estaban de moda; era terrible y así y todo mi papá me llevaba a la cancha. Me acuerdo que hacíamos esa terrajada: íbamos a una tribuna y nos pasábamos de una a otra, y mi padre nos tiraba para abajo, bajaba él, (era tremendo), nos bajaba la gente porque queríamos ir a la Ámsterdam.

Ese es un tema que podemos hacer una serie de cuatro temporadas, pero lo resumo en que siento que volví a nacer, conocí

una faceta del mundo que la gordura no me dejaba ver. Siempre digo que por lo único que yo cambiaría esto es porque mi mamá estuviera acá, es por lo único, después no lo cambio por nada, es lo más importante que me paso en la vida haber tomado conciencia de dónde estaba parado, del problema que estaba viviendo y lo mucho que me estaba costando entenderlo porque es parte de la enfermedad.

Le digo a los gordos que lo primero que hay que hacer es asumirlo, porque somos crack, somos unos fenómenos, pensamos que la tenemos clarísima, que así estamos bien, que de algo hay que morir y todas esas terrajadas que decimos, como los fumadores. La gordura es una enfermedad para toda la vida. En mi caso, por ejemplo, había engordado unos kilos y ya hace dos días que estoy comiendo sano de nuevo, y ya me siento mucho mejor. Es un tema de salud, no hay que negarse, no se trata de estética, tenemos que empezar a darle bola porque hay veces que sin darnos cuenta nos estamos matando y puede que no haya vuelta a atrás. Tuve la suerte de que no se me prendió ninguna luz roja, no soy celíaco, ni diabético, y los valores me dieron bien.

Es un tema gravísimo. Lo que hicieron fue como para tomar fuerza y dijeron:

“Agarramos a la primera personalid­ad pública abusador”. No me gusta victimizar­me en este tema, me tocó a mí como le pudo haber tocado a cualquier otro. Empezaron a buscar donde no había, creo que la mala informació­n, el mal manejo de la informació­n, la malicia, la desesperac­ión de mucha gente que sufrió eso, para buscar una solución a este problema de mierda que tenemos, hizo que mucha gente se cegara y le diera para adelante. Y me tocó a mí, pero lo único que de verdad me molestó es que haya gente que se haya sumado a esta bola y así como me defenestró, tampoco han tenido la cara para disculpars­e, que es lo único que me hubiese encantado, pero por ellos. A las personas públicas, los hechos públicos nos levantan o nos destruyen. Realmente, siempre estuve tranquilo de que yo no había hecho nada, pero ojalá que todo esto sirva para aprender, a pesar de que no me pidieron disculpas, que sirva como un mensaje para la sociedad. Hoy me tocó a mí y ojalá sirva para que todos aprendamos. Soy el primero en luchar por este tema, siempre fui partícipe de todo tipo de campañas y de manifestac­iones por la violencia de género, de hecho hace 2 o 3 años llamé a la ministra de Educación y Cultura para hacer un proyecto integrado por personajes públicos para dar charlas en las escuelas, porque además de la violencia también hay que tratar el tema drogas. Lamento que no haya podido salir, y eso salió de mí y llamé más de una vez. Lo que a mí me molesta de todo esto es esa mancha que me toca llevar ahora para algunas personas, realmente lo único que me interesa es que hayamos aprendido todos de esto y que se maneje

con más cuidado la informació­n.

Creo que sí, porque el único concepto que manejo del estado en el que estaba antes era que yo tenía un cumpleaños en la cabeza (risas). Lo que agradezco haber conocido a Flor, te lo digo con una mano en el corazón, mi medidor es el celular, hace 4 meses que estoy con Flor, no solo hace 4 meses que no le escribo a nadie, sino que ni siquiera la engaño ni con la mente. Cuando yo empecé con Flor le dije: “Quiero empezar una vida nueva contigo, tenés una energía lindísima, hace 4 meses que no pienso en otra mujer que no sea Florencia, y se lo agradezco a la vida, a ella, no sé, al mundo porque nos volvimos a reencontra­r. Es la mujer de mi vida, me la encontré tres veces y siempre desencontr­ados, ahora pasé de un cumpleaños a estar en Disney (risas).

Creo que tiene algo de eso. Tomé como ejemplo que cuando comencé a ir a la tele, veía a colegas o amigos que iban a la TV como estructura­dos, y yo siempre fui medio sarnoso, pero sin desubicarm­e, y eso creo que cayó bien. Tiene que ver con ser auténtico porque yo no sé cantar, lo mío no es saber cantar, más allá de que alguna nota estoy metiendo ahora.

En realidad, mis dos ahijados. A Santino no lo ve tanto porque como el padre y la madre trabajan, lo veo menos, pero sí, los dos son mi luz. Me cambió mucho la vida, cosas para bien y para mal en realidad, Paulina está salada, ya es famosa y es más famosa que yo, pero completar el casal de sobrinos me sacaron las ganas de tener hijos, porque siento que me dan la cuota de paternidad que necesito, vi el crecimient­o de los dos y me di cuenta que no estoy ni preparado, ni dispuesto a levantarme temprano, a los llantos todo el día, a cambiar pañales. Con Paulina me puedo quedar la vida entera, además no molesta para nada, pero te juro que me di cuenta de que no, que soy consciente de que nosotros los tíos, los amigos y los vecinos vivimos la parte linda de los bebes.

Ahora estoy por liquidar el disco de reggaetón y saco 3 plenas, un tema con Borinquen, -Carlitos Goberna es un gran amigo- soy gran fan de la Borinquén hace años; también saco un tema con Stephanie, una artista nueva y un tema con Mosquera, que es un gran amigo que he hecho en la música tropical. Estuve un año trancado por equis razones y ahora estoy tratando de activar para no quedarme con ganas de nada. El día de mañana me muero o no estoy, o me voy del país, entonces no quiero haber dicho y si yo hubiera hecho esto… Entonces la regla es no quedarme con las ganas, porque si erramos estamos a tiempo de meter otro gol.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Uruguay